Destinatario equivocado, por Simón Boccanegra
Aristóbulo ha dicho lo siguiente: «Quiero escuchar al jefe del comando de campaña de la oposición decir que reconocerán el resultado sea cual sea», porque, según él, el PSUV si reconocerá el resultado «sea cual sea». Ese no es el punto, Aristóbulo. No es el Psuv quien tiene que reconocer sino el Gran Capo. Lo que queremos es oír decir al jefe de esa banda de zombies en que se han transformado, entre otros gente tan irreverente en el pasado como el propio «Negro», que va a reconocer los resultados y que a ningún diputado de la oposición le va a aplicar la de Ledezma y los gobernadores, a quienes a duras penas les reconocieron el triunfo pero después les quitaron atribuciones, presupuesto e instalaciones. Es Chacumbele quien tiene que garantizar que va a reconocer y respetar los resultados. ¿Lo que le hicieron y hacen a Antonio Ledezma y a los gobernadores es reconocer y respetar los resultados? Es a su jefe a quien Aristóbulo tiene que exigirle respeto para quienes van a derrotar a sus candidatos. ¿Aristóbulo dijo algo cuando designaron a Jacqueline Faria, cuando dejaron en la calle a Antonio Ledezma? Que ahora diga, «en nombre del Psuv», que van a reconocer los resultados tiene menos valor que si lo hubiera escrito en papel toilette. Por otro lado, a Aristóbulo, famoso por su chispa e ingenio en otros tiempos, ya ni eso le queda. Da pena ajena oírlo repetir por enésima vez no sólo la mentira sino la infinita estupidez, la incalificable idiotez, de que los adversarios del gobierno «tienen un pie en las elecciones y otro en la conspiración». ¿Hasta cuándo siguen con esos refritos? Por lo visto se les secó la sesera, porque ahora hasta hacen pasar como novedades decretos que dictaron hace siete u ocho años y que, por cierto, nunca han hecho cumplir y por eso ahora los quieren presentar como cosa nueva.