Banco Caroní de la avenida Andrés Bello se quedó sin remesas para pensionados
La institución informó a los abuelos que solo entregaría 50 números por no disponer de suficientes billetes
Los pensionados continúan apostados en las entidades bancarias para cobrar las asignaciones correspondientes al mes de julio, este viernes frente al Banco Caroní del Mercado Guaicaipuro en la avenida Andrés Bello, un grupo de ancianos llevaba más de cuatro horas a la espera del dinero, sin embargo, la gerente de esa institución les informó que solo entregarían 50 números debido a que no había billetes suficientes para pagarles a todos.
A pesar de la información que brindó Caroní, a las 10 de la mañana las remesas aún no llegaban, por lo que más de uno de los pensionados manifestó a TalCual que se quedarían a la buena de Dios pues ellos sabían que “plata no hay”.
La espera se repite en la avenida Francisco de Miranda y en toda la Baralt, al oeste de Caracas. En un recorrido realizado por el equipo de TalCual las colas se observaron en distintos bancos
* Lea también: Pensionados protestan en toda Venezuela por el cobro de la pensión
“Salió la gerente y nos dijo que tenían dinero solo para 50 personas, pero la remesa es hora que no ha llegado, hay gente aquí desde las cinco de la mañana, yo llegué a las seis, son cuatro horas y media que tenemos de pie, un poco de personas mayores, muchos enfermos, no es justo. Otras personas se tuvieron que ir, no tuvieron opción para cobrar. Esperamos porque necesitamos el dinero”, manifestó Rosa Nieves de (69A) a TalCual.
El viacrucis comenzó el 18 de julio cuando el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS) prometió que les pagarían los 8.400.000 de bolívares, no obstante, desde ese día les han cancelado Bs. 2.000.000, lo que representa solo el 23%.
“Estamos humillados, así no puede ser porque uno trabajó tantos años para vivir de su pensión y ahora nos hacen esto. No me alcanza para nada, tu vas a buscar una medicina y te vale dos millones, tres millones, con lo que nos dan no nos alcanza, yo tengo 72 años y jamás y nunca viví algo así, dicen que la cuarta, que la cuarta y uno vivía mejor que aquí. Yo estoy vieja, yo viví en la cuarta y nunca pasé hambre, cómo es posible que un kilo de pasta cuesta casi cuatro millones, no puede ser”, reprochó Carmen Esperanza Blanco en la entrada del mercado.
El 18 de julio un funcionario de la Superintendencia de Bancos (Sudeban) admitió que la banca no disponía de remesas para cancelar los Bs. 8.400.000, por lo que las personas de la tercera edad debían conformarse con los dos millones de bolívares.