Adobe y Transferwise suspenden sus servicios en Venezuela por sanciones de EEUU
No son las únicas compañías basadas en Internet que han suspendido sus servicios en Venezuela luego de que Trump firmara la orden ejecutiva 13884. El 6 de agosto, un día después de que el mandatario estadounidense tomara la medida, la alemana SEDO, dedicada a la compraventa de dominios en Internet, suspendió las cuentas de sus usuarios en Venezuela
La compañía británica Transferwise y la empresa de software estadounidense Adobe Systems Incorporated informaron que dejarán de prestar sus servicios en Venezuela a partir del 21 y 28 de octubre, respectivamente, debido a las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos.
En un comunicado enviado a sus clientes, Adobe informó que ya no estará autorizada a proporcionarles acceso al software y a los servicios, ni a permitirles realizar nuevas compras. “Con el fin de adaptarnos a este cambio, te ofrecemos un aviso previo y un período de gracias hasta el 28 de octubre de 2019 para que puedas descargar todo el contenido que hayas almacenado en tu cuenta de Adobe. Después del 28 de octubre de 2019, ya no tendrás acceso a tu cuenta, a adobe.com o al software y los servicios de adobe”, añade la empresa en el comunicado.
Adobe señala que la orden ejecutiva 13884, firmada por el presidente Donald Trump el pasado 5 de agosto, prohíbe casi todas las transacciones y servicios entre empresas, entidades e individuos estadounidenses en Venezuela, e indica que no podrá reembolsar a los usuarios que fueron cobrados.
La compañía, que ofrece programas muy utilizados en Venezuela como Photoshop e Illustrator, aclara que tampoco proporcionará acceso a software y servicios gratuitos. La empresa no sabe hasta cuándo mantendrá canceladas las suscripciones de sus clientes en Venezuela, pues indica que la orden ejecutiva fue emitida sin fecha de vencimiento. “Continuaremos monitoreando de cerca los desarrollos y haremos todo lo posible para restaurar los servicios a Venezuela tan pronto como sea legalmente permitido hacerlo”.
Por su parte, la británica Transferwise, empresa especializada en transferencias internacionales de dinero, informó que por las sanciones de Washington y “los requisitos reglamentarios establecidos para Venezuela”, el 21 de octubre cerrará las cuentas de sus clientes en Venezuela, a quienes recomienda iniciar sesión antes de esa fecha para que retiren su dinero. Después del 21 de octubre, tendrán que contactar a la compañía para retirarlo. “Se ha hecho insostenible brindar el apoyo adecuado. Si esto cambia, avisaremos”.
Adobe y Transferwise no son las únicas compañías que han suspendido sus servicios en Venezuela luego de que Trump firmara la orden ejecutiva 13884. El 6 de agosto, un día después de que el mandatario estadounidense tomara la medida, la alemana SEDO, dedicada a la compraventa de dominios en Internet, suspendió las cuentas de sus usuarios en Venezuela “porque el sistema financiero de EEUU lo considera de alto riesgo”, de acuerdo con un comunicado enviado a sus clientes.
“El gobierno de USA aplica sanciones económicas y comerciales basadas en la política exterior y los objetivos de seguridad nacional contra países y regímenes extranjeros seleccionados, terroristas, narcotraficantes internacionales, aquellos involucrados en actividades relacionadas con la proliferación de armas de destrucción masiva y otras amenazas para el país. Esto tiene un impacto directo en nuestras relaciones comerciales y las de nuestra subsidiaria en los Estados Unidos. Por lo tanto, hemos promulgado una política de no participar en transacciones financieras, ya sea relacionadas con ventas de dominios o estacionamiento de dominios con clientes en su país”, señala el comunicado de la germana.
La orden de Estados Unidos del 5 de agosto bloquea todos los bienes propiedad del gobierno de Venezuela que se encuentran en Estados Unidos y prohíbe que cualquier empresa norteamericana haga negocios con Caracas.
Expertos advierten que el endurecimiento de las sanciones complica el escenario económico y financiero venezolano, pues aumenta el riesgo reputacional que ya venían sintiendo empresas de terceros países, que mantienen relaciones comerciales con Venezuela, desde que Estados Unidos empezó a presionar con sanciones a Nicolás Maduro para que ceda el poder.
El incremento del riesgo que sienten compañías no estadounidenses de ser sancionadas y no poder seguir manteniendo relaciones comerciales con ese país, uno de los principales mercados internacionales, puede provocar que esas empresas decidan de manera unilateral romper vínculos con Venezuela.