Advierten de otra hiperinflación mientras venezolanos notan que la plata «no alcanza»
El alza acelerada de los precios vuelve a recortar el poder de compra de las familias venezolanas. Un reporte de AFP advierte que las proyecciones inflacionarias se disparan mientras disminuye la disponibilidad de divisas. Expertos comienzan a hablar de posible hiperinflación
Un reporte de la agencia AFP describe un escenario familiar para los venezolanos: bolsas con pocas compras, precios que cambian a diario y un ingreso que no alcanza. Varias proyecciones apuntan a que el país podría regresar a un episodio de hiperinflación como el que marcó los años más duros de la crisis económica reciente.
Según los datos citados, la inflación anual llegó al 130.000% en 2018, en la cúspide de un ciclo hiperinflacionario de cuatro años que concluyó en 2021. La administración de Nicolás Maduro aseguró que la inflación de 2024 fue de 48%, aunque el Banco Central de Venezuela no publica estadísticas desde octubre de ese año.
El Fondo Monetario Internacional proyecta un aumento de precios de 548% en 2025 y 629% en 2026. Otros economistas, consultados por la agencia, calculan que el alza podría superar 800%. Para muchos hogares, las cifras ya se traducen en una pérdida acelerada del poder adquisitivo. «Si ganamos 20 bolívares, nos gastamos 50», dijo a AFP Jacinto Moreno, comerciante informal en el centro de Caracas. «Todos los días suben los precios».
Alerta de una hiperinflación
AFP recoge testimonios que muestran el deterioro cotidiano. Norma Guzmán, ama de casa, compra solo lo imprescindible: «Hago la compra a diario porque no alcanza», explica mientras sale de una tienda con apenas tres tomates.
Para el economista Óscar Torrealba, una inflación estimada de 811% en 2025 es un indicio claro: «Esto indiscutiblemente nos acerca mucho a un escenario hiperinflacionario», sostuvo. El experto recuerda que la definición clásica de hiperinflación exige variaciones mensuales superiores al 50% durante tres meses consecutivos, aunque otros especialistas consideran que un alza interanual de 500% ya permite hablar de hiperinflación en una economía global con precios estables.
El clima para la discusión económica tampoco es sencillo. AFP señala que varios economistas fueron detenidos a mediados de año, entre ellos un exministro de Finanzas. Aunque los arrestos no fueron anunciados oficialmente, coincidieron con operativos contra páginas que publicaban el precio del dólar paralelo. Desde entonces, esa referencia quedó sujeta a cotizaciones informales o marcadores en criptomonedas.
La presión del dólar
A diferencia de los años de escasez profunda, hoy los anaqueles están abastecidos. Sin embargo, la brecha cambiaria se ha ampliado con fuerza. El dólar se disparó cerca de 400% en lo que va de año y la diferencia entre la tasa oficial y la paralela ha superado 60%.
El dólar es determinante en un contexto de baja disponibilidad de divisas. Chevron, uno de los principales proveedores de dólares al sistema, opera ahora de manera limitada y paga regalías en crudo, no en efectivo. Venezuela vende ese petróleo con grandes descuentos en mercados secundarios, lo que reduce aún más el flujo de divisas.
«Eso lo trasladamos a la inflación», dijo a AFP Juan Carlos Valdez, profesor de Economía Política y diputado electo por el oficialismo. El académico señaló que los precios avanzan incluso más rápido que el tipo de cambio debido a los ajustes preventivos de comerciantes ante la incertidumbre.
Mientras la administración de Maduro proyecta un crecimiento del PIB por encima de 9% en 2025, el FMI prevé 0,5% y otros analistas alrededor de 3%. El contraste refleja el nivel de opacidad estadística y la dificultad para medir con precisión el rumbo económico del país.
*Lea también: Conindustria reporta aumento en la producción privada de 5,2% durante tercer trimestre
*El periodismo en Venezuela se ejerce en un entorno hostil para la prensa con decenas de instrumentos jurídicos dispuestos para el castigo de la palabra, especialmente las leyes «contra el odio», «contra el fascismo» y «contra el bloqueo». Este contenido fue escrito tomando en consideración las amenazas y límites que, en consecuencia, se han impuesto a la divulgación de informaciones desde dentro del país.





