Agresiones a defensores de DDHH ya superan la cifra de todo el 2019
Desde esta organización manifestaron su preocupación por este registro, que solo evidencia “que la situación de pandemia por covid-19 solo se advierte desde una perspectiva humanitaria y sanitaria, dejando de lado los DDHH
100 presuntas agresiones contra personas y organizaciones defensoras de los Derechos Humanos se han registrado en el país durante los primeros seis meses de este 2020, así ha quedado registrado desde Cofavic.
Este reporte solo deja en evidencia que la violencia, hostigamiento y medidas arbitrarias en contra de las ONG y sus equipos durante lo que va año, se ha venido agudizando, rebasando incluso el total de casos del 2019, que cerró con 84 registros.
El registro independiente realizado por Cofavic señaló que en estos primeros seis meses han sucedido detenciones arbitrarias, hostigamientos, intimidación, amenazas, allanamientos y estigmatización, entre otros tipos de ataques.
Desde esta organización manifestaron su preocupación por este registro, que solo evidencia “que la situación de pandemia por covid-19 solo se advierte desde una perspectiva humanitaria y sanitaria, y se deja de lado la atención a los derechos humanos, lo cual debería ser un elemento transversal e insustituible para analizar y afrontar esta grave situación”.
Detallaron que durante lo más de cinco meses que han transcurrido desde que sé informó el primer caso positivo, “se ha hecho notorio que, en el marco del Estado de Alarma por la emergencia sanitaria del Covid-19, han aumentado las agresiones y abusos bajo el amparo de la nueva orden dada por las autoridades de mantener lo que han denominado ‘la furia bolivariana’, como una especie de alerta para ‘proteger’ la nación de los enemigos y agentes intervencionistas”.
Para Cofavic, organización que tiene más de 20 años laboran en pro de la defensa de los DDHH, este llamado desde el Gobierno venezolano solo ha traído consigo “ataques más violentos como amenazas de muerte, detenciones, judicialización y mayor censura con el objeto de invisibilizar las denuncias. Solo en mayo 2020 registramos 40 presuntos casos (es decir, en ese mes sucedió más de la mitad de casos de los que hubo en todo 2019), por tanto, es claro que bajo el Estado de Alarma no solo han incrementado los niveles generales de hostigamiento y criminalización contra quienes defienden derechos, sino que, con un claro objetivo de censurar toda voz crítica, estos ataques se han dirigido especialmente contra periodistas y profesionales de la salud que, por diversos medios, han ejercido su libertad de expresión para informar sobre la evolución de la pandemia en el país o sobre la gestión de la crisis sanitaria por parte del Estado venezolano”.