Al poeta de la libertad, por Douglas Zabala

Andrés Eloy Blanco nació en Cumaná el 6 de agosto de 1896. Al poeta se le ha valorado más por su sensibilidad lírica que por su incansable lucha política, pero su frase hecha poesía en los días finales de la dictadura gomecista: «No hay en la tierra un pueblo de mayor resistencia, ni más bueno que el mío», revela su profunda venezolanidad.
Desde joven, como estudiante de Ciencias Políticas, se enfrentó al régimen de Juan Vicente Gómez. Junto a Salvador de la Plaza dirigió una revista universitaria, iniciando así su vocación intelectual. La política y la poesía se entrelazan en su vida como dos fuerzas inseparables.
Publicó en revistas como Cosmópolis, El Cojo Ilustrado y Cultura Venezolana. En 1945, en su columna «Puerta sin llave» en El Universal, confesaba: «He abandonado la vida de poeta. No quiere esto decir que ya no escriba versos… pero siempre en las horas que me deja libre la política».
Fundador de ORVE, militante del PDN y miembro fundador de Acción Democrática, fue electo concejal por la Parroquia San Juan y luego presidente de la Asamblea Nacional Constituyente tras el golpe contra Isaías Medina Angarita.
Hoy, en una Venezuela donde la democracia enfrenta nuevos desafíos, recordar a Andrés Eloy Blanco, es un llamado a los ciudadanos a rescatar los valores de libertad, justicia y participación por los que él luchó. Su vida es testimonio de que la palabra puede ser arma contra la opresión.
Homenajear a Andrés Eloy Blanco es recordar que la poesía puede ser trinchera, y que la democracia se defiende también con belleza, convicción y pasión.
«Madre, si me matan,
ábreme la herida, ciérrame los ojos
y tráeme un pobre hombre de algún pobre pueblo
y esa pobre mano por la que me matan,
pónmela en la herida por la que me muero.
Y una palabra: JUSTICIA
escriban sobre la tumba
Y un domingo, con sol afuera,
vengan la Madre y las Hermanas
y sonrían a la hermosa tumba
con nardos, violetas y helechos de agua
y hombres y mujeres del pueblo cercano
que digan mi nombre como de su casa
y alcen a los cielos cantos de victoria,
Madre, si me matan».
Elías Santana (1956-2025), por Omar Ávila
Douglas Zabala es influenciador en redes sociales.
TalCual no se hace responsable por las opiniones emitidas por el autor de este artículo.