«ANC prepara una Constitución excluyente al servicio de un proyecto político»

El exconstituyente Froilán Barrios subraya que a Maduro no le gusta la Carta Magna de 1999 por considerarla burguesa. Cuestiona que el debate sobre un nuevo texto fundamental se haga de espaldas al país y exhortó a conformar un frente para defender a la Constitución que está en vigencia
El dirigente sindical Froilán Barrios, quien fue constituyente por el estado Zulia en 1999, censura el secretismo con que se manejan las propuestas para una nueva Carta Magna a lo interno de la ANC. En una entrevista para TalCual, asevera que todos los actos de la instancia, presidida por Diosdado Cabello, son nulos debido a su carácter ilegítimo y puntualiza que el Gobierno trabaja en una nueva Carta Magna con el único objetivo de atornillarse en el poder.
–¿Qué implicaciones puede tener la opacidad con las que se trabajan las propuestas constitucionales en la ANC?
– Aunque los constituyentes anuncian que se han realizado consultas, hay muchas dudas sobre cómo se va a realizar el proceso. En 1999, las comisiones de la ANC hicieron asambleas abiertas. El proyecto fue presentado al país y los que estaban a favor y en contra se pronunciaron. Más allá de todas las observaciones, el proyecto que se aprobó, el 15 de diciembre de 1999, terminó siendo la Constitución de una nación. Esto que se trabaja ahora es la Constitución para un proyecto político y no le paran en absoluto a otros sectores del país. Se afianzan en un proyecto gubernamental comunista que refleja su visión socialista, una visión que es excluyente y que busca imponer el Estado comunal y perpetuarse en el poder. Esa Constitución que quieren implantar es una mezcla del libro verde de Gadafi con el modelo cubano, es un sancocho ideológico, un parapeto comunal para controlar a la sociedad. Este control prevén afianzarlo el año que viene.
– ¿Cuáles son las diferencias más importantes entre la ANC de 1999 y la de 2017?
-La primera es el origen. Para la Asamblea Constituyente de 1999 hubo una consulta en la que se les preguntó a los ciudadanos, de manera universal y secreta, si querían ir a un referendo para elaborar una nueva Carta Magna. En segundo lugar, los 136 constituyentes fuimos electos geográficamente y en 2017 el Gobierno impuso una elección por sectores. La actual ANC es un organismo corporativo porque eligió a sus miembros por sectores y hubo constituyentes que fueron electos por 300 votos. En tercer lugar, una elección de este tipo es propia de los Estados fascistas, así lo hizo Franco en España y lo han repetido otros regímenes.
-¿Ese corte corporativo origina la falta claridad sobre un nuevo texto constitucional?
– Sí, porque las fuerzas expresadas allí todas están integradas al Estado. Representan a un pensamiento único, que es el pensamiento único gobernante y cuyo objetivo es establecer el Estado comunal.
-¿Cuántas discusiones hubo para la Constitución de 1999?
– Yo era el coordinador de la Comisión de Derechos Labores y se planificaban las reuniones de acuerdo con los temas y por sectores, se atendieron a empresarios y sindicatos, entre otros voceros. Todo estaba organizado, recuerdo que hasta criticábamos la planificación del presidente de la ANC, Luis Miquilena, En esta constituyente, hasta ahora no nos han llamado para nada. A Nicolás Maduro no le gusta la Constitución de 1999. A Maduro le parece que la Constitución del 99 es una Constitución burgués, por eso su empeño en un nuevo texto que limite la propiedad privada, la libertad sindical y la libertad y la libertad de expresión, entre otros derechos. Ya vimos cómo se aprobó la Ley contra el Odio, por ejemplo.
– ¿El país debe confiarse en las afirmaciones del presidente de la ANC de que todavía no hay un proyecto de Constitución?
– No hay que confiarse en absoluto. En cualquier momento, el gobierno saldrá con la Constitución, como la ropa pret a porter, lista para usar, con el cuento de que la ANC es una instancia supraconstitucionale. La oposición venezolana, las academias y la población deben organizarse en un frente en defensa de la Constitución actual. Nosotros nos hemos reunido con Antonio Di Giampaolo, Ricardo Combellas; Alberto Jordán Hernández y Ernesto Alvarenga, entre otros ex constituyentes, hemos debatido en torno a eso. Este Gobierno vive montando emboscadas en cada esquina y en cualquier momento lanza la nueva Carta Magna. Y todo esto ocurrirá en medio de ese parapeto que montaron hace año y medio de una constituyente que ha aprobado decretos y leyes que, debido a su origen, son nulos.
– ¿Cree que la constituyente viola sus propias bases comiciales?
– Ellos fueron a hacer sus negocios a la constituyente. La ANC es un respiro para el gobierno de Maduro, para aprobarle el presupuesto, la memoria y cuenta y todo lo que le da la gana. El gobierno de Maduro nunca aceptó ni dirigió la derrota de las elecciones parlamentarias de 2015. Entonces crearon su poder paralelo, lamentablemente la oposición no estuvo a la altura y cayó de provocación en provocación.
– ¿Dados los cuestionamientos a la posibilidad de una nueva Constitución, se debe llamar a la campaña por el No?
– Mi opinión personal es que eso debe revisarse bien. Como no se estaría eligiendo a ningún presidente, alcalde o gobernador, sino el futuro del país; hay que hacer campaña para el No. Recordemos que, Pérez Jiménez, hizo lo que le dio la gana con el Consejo Supremo Electoral y prohibió a AD y al PCV participar, solo lo hicieron URD y Copei. Acción Democrática le dijo a la gente que no votara y la gente votó por URD. Hubo el plebiscito en 1957 y después, el 23 de enero de 1958, Pérez Jiménez fue derrocado mediante una gran manifestación nacional.