Andrés López podría ganar la presidencia en México con un discurso «chavista»
Los candidatos rivales alertan que una gestión del líder del Movimiento Regeneración Nacional podría conducir al país por la senda que llevó a Venezuela a sufrir la crisis que padece en la actualidad
Las elecciones presidenciales en México se efectuarán el próximo domingo 1° de julio, y está en juego un posible cambio de ideología en el Gobierno gracias a la popularidad del candidato de izquierda, Andrés Manuel López Obrador, que se postula como favorito para ganar la contienda.
El líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), alimenta sus posibilidades con un discurso que sus rivales y detractores han catalogado de «populista».
Con promesas como reducir sueldos a funcionarios, aumentar el salario mínimo, revisar contratos públicos y detener los aumentos bruscos del combustible, su forma de hacer política se ha comparado con la del fallecido presidente venezolano, Hugo Chávez, y del líder norteamericano Donald Trump.
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Su oposición alerta que una gestión de López podría conducir a México por el camino que llevó a Venezuela a sufrir la crisis que padece en la actualidad.
El candidato presidencial ha intentado calmar las aguas y asegura que no es como Chávez ni Trump, con quien dice que espera mantener una relación de respeto.
Sin embargo, durante su acto de cierre de campaña, López sostuvo que, de ganar la presidencia, llevará a México a una «revolución pacífica, ordenada pero profunda y, diría, radical».
«Espero que nadie se asuste porque la palabra radical viene de raíz y esta transformación va a consistir precisamente en arrancar de raíz al régimen corrupto, de injusticias y de privilegios», agregó al dirigirse al público que llenó el estadio de fútbol más grande del país.
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A pesar de que sus asesores de campaña han intentado calmar a los mercados y empresas al aclarar que López Obrador comulga con el libre mercado, llama la atención la similitud que posee su discurso de campaña con el que le hizo a Chávez llegar a la presidencia de Venezuela.
Según las encuestas, sus rivales figuran a dos dígitos de distancia: Ricardo Anaya, de una coalición encabezada por el Partido Acción Nacional (PAN) y el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD); y José Antonio Meade, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), se disputan un lejano segundo lugar.
Este es el tercer intento del exalcalde de Ciudad de México para llegar a la presidencia. Durante su campaña ha dicho que podría gestarse un fraude en su contra como el que, asegura, le impidió ganar las elecciones presidenciales de 2006.