Borges propone pasar control de empresas venezolanas en el extranjero a un fideicomiso
El político Julio Borges planteó la posibilidad de «desmantelar» el interinato de Guaidó y convertirlo en una «oficina de representación en el exterior»
Julio Borges, designado como comisionado de Relaciones Exteriores por la Asamblea Nacional electa en 2015, propuso que el gobierno interino que preside Juan Guaidó transfiera las empresas de Venezuela en el extranjero a un fideicomiso -u otra figura- para que sea administrado por un organismo multilateral.
Borges expuso que el único beneficiario debe ser Venezuela y que cuando se produzca un cambio en la administración del país, esa institución se disuelva y vuelvan a la administración del Ejecutivo, esto con el fin de protegerlas de los acreedores y la corrupción.
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Para lograr esto, dijo que desde el partido Primero Justicia ha hecho «propuestas concretas» como el desmantelamiento de la organización actual del interinato y «reducirlo a una oficina de representación en el exterior», así como también expresó que debe transformarse en una «plataforma política» que sea amplia y que apunte a los esfuerzos de la negociación.
A su juicio, el recurrir a una herramienta como esta permitirá el manejo «transparente» de todas esas empresas venezolanas para garantizar además auditorías imparciales en la que no influyan intereses políticos y sean víctimas de la corrupción.
Julio Borges hizo mención a que los procesos legales en el extranjero han sido costosos y los mismos se han llevado a cabo en condiciones desfavorables, debido a las expropiaciones que ha hecho el chavismo en los últimos 20 años -como el caso de Crystallex, que reclama los activos de Citgo como pago-.
Insistió en que la oposición venezolana debe centrarse en alcanzar elecciones libres por medio de una negociación que tenga el respaldo de la comunidad internacional, aunado a un movimiento de presión interna.
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“Nuestro mayor reto es lograr la unidad de los principales factores de la oposición de cara al proceso de negociación integral internacional, de cara a las acciones de presión interna, de movilización o electorales. Nuestro segundo reto, es foco en el objetivo de lograr el cambio democrático a través de elecciones libres y dejar de hacer cosas que lejos de contribuir con ese objetivo, distraen energías y traen todo tipo de problemas como por ejemplo la gestión de empresas en el extranjero”, señaló Borges.
En entrevista concedida al portal Su Noticiero, el dirigente de Primero Justicia explicó que esa oficina de representación en el exterior «debe tener capacidad para brindar apoyo a los millones de refugiados y migrantes venezolanos que están regados alrededor del mundo».