Brasil invita a Maduro a deponer el poder «con un mínimo de dignidad»
El canciller brasileño, Ernesto Araújo, afirmó que la decisión del Grupo de Lima que insta al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a no asumir un nuevo mandato
En una entrevista difundida el sábado 5 de enero por el canal Globo, Araújo expresó su deseo de que Maduro tome conciencia de esa oportunidad y entregue el poder a la Asamblea Nacional el próximo 10 de enero, en vez de asumir un nuevo mandato.
El ministro de Exteriores del gobierno de Jair Bolsonaro consideró: “Si Maduro atiende la petición del Grupo de Lima, podría interrumpir el sufrimiento del pueblo venezolano, que está siendo oprimido por una dictadura que está destruyendo al país”.
El Grupo de Lima, formado por 14 países Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía, aprobó este viernes, con la única excepción de la delegación mexicana, una declaración en la que anunció que esos países no reconocerán un nuevo gobierno de Maduro.
Además, instaron a Maduro a no asumir el próximo 10 de enero un nuevo mandato, pues consideraron que las elecciones del 20 de mayo de 2018 carecen de legitimidad, pues no se garantizó la participación de todos los actores políticos ni la presencia de observadores internacionales independientes.
El canciller Araújo, que asumió su cargo este 1 de enero, cuando fue investido del poder el Bolsonaro, debutó en la escena internacional en la reunión del Grupo de Lima y en un mensaje difundido en sus redes sociales reveló que la propuesta de instar a Maduro a no asumir un nuevo mandato fue presentada por Brasil.
“La Declaración de Lima adopta propuesta brasileña instando a Maduro a no asumir su mandato ilegítimo el 10 de enero y entregar el poder a la Asamblea Nacional, hasta que se realizan elecciones democráticas”, escribió el canciller, quien apuntó que se trata de una oportunidad histórica para redemocratizar a Venezuela.
El gobierno venezolano reaccionó con perplejidad, calificó la declaración de extravagante y consideró que alienta un golpe de Estado en Venezuela.