Caída de la ocupación hotelera obliga a desincorporar 40% de las camas en Margarita
Los hoteles en Nueva Esparta llenaron apenas 30% de sus plazas debido, principalmente, a la pérdida del poder adquisitivo del turista nacional
Las expectativas desalentadoras que el sector turístico tenía en torno a la ocupación hotelera para Semana Santa se cumplieron, pese a que es una de las temporadas vacacionales más importantes del año, además de Carnaval, verano y diciembre.
Los hoteles en el estado Nueva Esparta, el destino turístico por excelencia del país, llenaron apenas 30% de sus plazas debido, principalmente, a la pérdida del poder adquisitivo del turista nacional, producto de la hiperinflación que en el mes pasado registró una tasa interanual —de marzo de 2018 a marzo de 2019— de 1.623.656%, de acuerdo con la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional.
“La ocupación fue muy baja, no nos agrada esa cifra. La situación del país nos está golpeando muy duro y tampoco podemos desarrollar un mercadeo y unas promociones adecuadas sobre todo para que el turista extranjero venga a Venezuela, porque el (turista) nacional está muy afectado por la crisis económica. El esparcimiento no es una prioridad”, dijo José Ignacio Casal, presidente de la Cámara de Turismo de Nueva Esparta.
Jesús Irausquín, presidente del Consejo Superior de Turismo (Conseturismo), había expresado que las expectativas para Semana Santa eran muy negativas, pues el desarrollo del sector se verá limitado mientras exista racionamiento eléctrico, que la administración del gobernante Nicolás Maduro aplica incluso en aquellos estados en los que se encuentran los principales destinos turísticos de Venezuela.
Casal añadió que 40% (8.000) de las aproximadamente 20.000 habitaciones hoteleras que hay en la isla de Margarita se encuentra cerrado, en algunos casos para reducir los costos por la caída de la ocupación y en otros por remodelación. Ese es el caso del hotel Bella Vista, ubicado en Margarita, cerrado temporalmente ya que está siendo sometido a un profundo proceso de remodelación y de mantenimiento.
En la entidad, que registraba hace un año una ocupación hotelera de 42% y cinco años atrás de hasta 83%, el alojamiento promedió entre 8% y 11% durante el primer trimestre de 2019, de acuerdo con Julio Arnaldes, director ejecutivo de la Asociación Venezolana de Mayoristas y Empresas de Representaciones Turísticas (Avemarep).
Por otra parte, en el estado Zulia, uno de los estados más golpeados por la crisis eléctrica, el promedio de ocupación en Semana Santa no fue superior a 19%, en el mejor de los casos, pues en algunos el alojamiento fue de apenas 8%.
“Un hotel de la ciudad (de Maracaibo) notificó que cerrará sus puertas porque no posee plantas eléctricas. En algunos hoteles se movió un poco el área de la piscina con residentes, pero otros tuvieron que cerrarla por falta de agua”, dijo Elvira Pradelli, presidenta de la Cámara Hotelera del estado Zulia.
Afirmó que la temporada vacacional de Semana Santa fue bastante mala porque los cortes eléctricos siguieron produciéndose. Señaló que la situación fue difícil para los pocos turistas que se alojaron en aquellos hoteles que cuentan con plantas eléctricas, pues cuando salían a las calles se encontraban con establecimientos e incluso centros comerciales sin electricidad. “Las personas no podían pagar porque no funcionaban los puntos de venta ni había Internet ”, añadió.
Irausquín recordó que desde hace muchísimos años el sector privado advirtió que el sistema eléctrico nacional iba a colapsar, y en efecto sucedió. “Es una crónica de un apagón anunciado, producto de la desinversión y de la falta de mantenimiento. Este colapso eléctrico prácticamente trajo como consecuencia la paralización del sector turístico”, dijo.
Pese al asueto extendido de Carnaval –que fue del 28 de febrero al 5 de marzo–, En 13 de 19 estados del país, la ocupación hotelera se redujo en marzo hasta 20 puntos porcentuales respecto a febrero, que fue el caso de Sucre, que pasó de 40% a 20%, de acuerdo con la Federación Nacional de Hoteles de Venezuela (Fenahoven).