Cambiando de celda, por Naky Soto
Este miércoles, Delcy Rodríguez dio por concluido el proceso de excarcelaciones de presos políticos que adelantó el Gobierno por designio de Nicolás “en aras del gran diálogo nacional, el reencuentro y la unión”, según enfatizó, añadiendo que el trabajo de la Comisión de la Verdad de la ANC también culminó, pero se supone que seguirán “abordando otros casos aún pendientes de etapas anteriores”. El fiscal general impuesto, Tarek William Saab, dijo que serán al menos 40 presos políticos liberados (Delcy precisó luego que serían 43), hablando de un total de doscientas personas, refiriéndose a los “tres lotes” de beneficiados; como si se tratara de cosas y no de personas. Pedro Pablo Fernández aseguró que en este nuevo grupo de excarcelados no hay presos comunes e insistió que seguirán revisando los casos de los presos políticos aunque Delcy diera por terminado del proceso.
Civiles procesados por militares
Tres civiles involucrados en uno de los supuestos golpes de Estado contra Nicolás. Intitulado el “Golpe azul”, sumó para todos los involucrados (militares y civiles) al menos 95 audiencias entre efectivas y fallidas, hasta que el 11 de enero de 2017, fueron condenados por instigación a la rebelión.
– Luis Colmenares: cajero bancario, detenido el 12 de febrero de 2015, puesto a la orden de un tribunal militar. Condenado a 5 años de prisión en La Pica
– Pedro Maury: taxista, detenido el 14 de febrero de 2015 en Maracay. Egresa con un complejo cuadro de salud cuyo empeoramiento fue denunciado a lo largo de su prolongado e injusto presidio. La cautelar por su salud y edad que su defensa presentó, le fue negada alegando que en Ramo Verde (prisión militar) podían garantizarle la atención necesaria.
– Jesús Salazar: carpintero, detenido el 13 de febrero de 2015, acusado de instigación a la rebelión, con agravantes, uso indebido de condecoraciones y títulos militares. Recluido en La Pica. Hermano del también preso político Henry Salazar.
– Sin vínculo con el “Golpe Azul”, también fue excarcelado Carlos Contreras, recluido en Ramo Verde tras ser acusado de pertenecer a un supuesto grupo terrorista. Su mamá, Iralis Contreras, reclamó muchas veces las consecuencias físicas de los tratos crueles y torturas que recibió Carlos durante su reclusión, incluyendo “descargas eléctricas en los testículos”.
De la UPEL
El país siguió con detalle la detención masiva de estudiantes de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL) cuando la madrugada del 2 de julio de 2017 fue violada la autonomía universitaria por policías, militares y hombres encapuchados, que sacaron a la fuerza al grupo de manifestantes que se resguardaron de la represión dentro de la UPEL. y Los jóvenes fueron golpeados y las mujeres denunciaron haber sido abusadas sexualmente, golpeadas e insultadas. De los 27 estudiantes detenidos, un juez de un tribunal militar acordó la privativa de libertad para 22, todos imputados por delitos militares. Hoy son excarcelados:
– Boris Quiñones: médico cirujano, recluido por más de dos meses en la cárcel El Dorado. Luego que el tribunal militar ordenara su libertad bajo medidas cautelares, un juez dictó una nueva privativa de libertad. Fue recluido en la cárcel de Tocuyito, donde intentó suicidarse un par de veces. Amnistía Internacional había solicitado una medida humanitaria para Boris.
– Álex González: presidente del Centro de Estudiantes de la UPEL. Como la mayoría de sus compañeros, fue acusado de posesión de objetos inflamables, rebelión e instigación para delinquir. Recluido en El Dorado y luego trasladado al Centro Penitenciario 26 de Julio. Su salud se encuentra seriamente deteriorada, tras meses de enfermedad y tortura.
– Kenny Colmenares: estudiante imputado por detentación de material inflamable, rebelión e instigación. Recluido en la cárcel 26 de julio.
– Mitchell Sosa: estudiante imputado por detentación de material inflamable, rebelión e instigación. Recluido en la cárcel 26 de julio.
De Mérida
Los tribunales militares ordenaron la excarcelación de cuatro presos políticos civiles procesados por tribunales militares recluidos en el Centro de Procesados Militares (Cepromil) del estado Táchira, ellos son:
– Héctor Guaicapuro Fernández: estudiante de Ingeniería, dirigente de la Universidad de Los Andes (ULA) de Mérida, detenido el 19 de julio de 2017 en la ciudad de Ejido.
– José El Hajale Rabah: comerciante detenido el pasado 10 de agosto de 2017 en Timotes por manifestar.
– José Gregorio Morales Utrilla: entrenador deportivo, habitante de Timotes, detenido por manifestar.
– Fernando Domínguez Osuna: detenido el 5 de septiembre de 2017 cuando regresaba de viaje.
– Villca Fernández: estudiante, detenido el 31 de enero de 2016 por el Sebin en Mérida, acusado por instigación al odio y divulgación de información falsa solo por responder en Twitter un mensaje. Recluido en El Helicoide, Amnistía Internacional calificó a Villca como un prisionero de conciencia. El gobernador del estado Mérida, Ramón Guevara, informó que será excarcelado este 14 de junio. Por cierto, ayer fue diferida por 50ª vez la audiencia preliminar de Lorent Saleh: 50 diferimientos en 3 años y 10 meses de detención.
De Barinas
Según informó Foro Penal, fueron liberados Gilberto Téllez, ex alcalde del municipio Sabaneta y propietario de la estación de Radio Planeta 98.7 FM, quien fue detenido el pasado 25 de marzo por funcionarios del Sebín. Acusado de asociación para delinquir, instigación al odio, incendio, daños a la propiedad pública y detentación ilícita de explosivos. En el mismo operativo fueron procesados Cristofer López y Asciel Jiménez, también liberados hoy.
La misma organización confirmó la liberación de cuatro presos políticos recluidos en El Helicoide, todos mencionados en listas pero sin mayores datos sobre sus perfiles: Michael Linares, Yonger Rosales, Yeison Rodríguez y Merino Rojas, relacionado con el movimiento estudiantil merideño que fue detenido en Plaza Venezuela el 21 de mayo de 2017 durante el allanamiento a un apartamento. Estuvo recluido en El Helicoide.
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De ser cierta la cifra de 43 personas “beneficiadas”, faltan muchos aún.
-poco les duró la indulgencia-