Capturan en Colombia a jefe del Tren de Aragua en Chile y mano derecha de «Niño Guerrero»
La detención de Carlos Francisco Gómez Moreno, alias «Bobby», jefe de la banda multinacional Tren de Aragua en Chile, se dio en el municipio Los Patios en Norte de Santander. Se espera que en los próximos días sea enviado a Chile
El cabecilla de la organización criminal Tren de Aragua en Chile, al mando de más de un centenar de miembros en ese país, fue capturado la madrugada del sábado 7 de diciembre en el municipio Los Patios, de Norte de Santander, Colombia, durante un operativo conjunto entre la policía de ambos países, informaron las autoridades.
La detención de Carlos Francisco Gómez Moreno, alias «Bobby», jefe de la banda multinacional en Chile, fue anunciada por el presidente de Colombia, Gustavo Petro, por medio de la red social X, donde compartió un video del operativo.
En la madrugada de hoy, en una operación policíal en Los Patios ( N de S) fue capturado Carlos Gómez, alias Bobby, jefe de la banda multinacional Tren de Aragua en Chile.
La colaboración policial con inteligencia chilena y colombiana logró este gran éxito en la seguridad de… pic.twitter.com/0N7dUFqhqP
— Gustavo Petro (@petrogustavo) December 7, 2024
Por su parte, la Policía de Colombia detalló en un comunicado que Gómez Moreno contaba con circular roja de Interpol y es hombre de confianza del máximo líder del Tren de Aragua, Héctor «Niño» Guerrero, quien se fugó de una cárcel venezolana hace más de un año y de quien se desconoce el paradero.
De acuerdo con la información de las autoridades, Carlos Gómez huyó hace tres meses de Chile, donde tenía a su cargo a unos 120 delincuentes para organizar secuestros, homicidios selectivos y tráfico de drogas. Se espera que en los próximos días alías «Bobby» sea enviado a Chile para que sea procesado en ese país.
El Tren de Aragua fue catalogada por Estados Unidos como una estructura delictiva transnacional que representa una «creciente amenaza» para toda la región por su acelerada expansión por el hemisferio. El Departamento de Estado de EEUU ofreció una recompensa por un total de hasta 12 millones de dólares por información que conduzca a la captura y condena de varios de sus cabecillas.