Cardenal Baltazar Porras pide tomar acciones para atender situación de migrantes
El cardenal Porras indicó que desde Venezuela debe hacerse algo pronto para evitar las ofertas engañosas y que se lleven a los jóvenes para evitar que sean usados en la trata de personas o la explotación sexual
El obispo de Mérida y Administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Caracas, cardenal Baltazar Porras, se pronunció respecto a los 16 menores de edad deportados de Trinidad y Tobago y de los que aún no se tiene respuesta, según alertó el comisionado de la secretaría general de la OEA para la crisis de migrantes y refugiados venezolanos, David Smolansky.
En entrevista concedida al Circuito Éxitos, el cardenal Porras cuestionó que existan «zamuros» que se aprovechan de la necesidad y el hambre que padece la población en Venezuela para llevarse a personas jóvenes del país y tratarlas luego como mercancía en varias islas del Caribe -entre ellas Trinidad y Tobago- donde son posteriormente introducidas en el negocio de explotación sexual y trata de personas.
Resaltó que desde Venezuela se debe hacer algo contra ese flagelo porque «es un problema bastante complejo y no podemos hacernos de la vista gorda», al tiempo que recordó que la iglesia ha denunciado desde hace tiempo se ha venido denunciando estas irregularidades que ocurren en poblaciones como Güiria, en el que hay un «sitio de concentración de gente que desaparece porque se van en una barca ¿para dónde y por qué? Ese ofrecimiento que se hace por las redes que habría que ponerle coto».
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«Esa seducción con cuatro lochas que le dan a la familia y convertirlas en esclavas, son muchos centenares de casos de ellos que tenemos registrados y los familiares que están aquí, no solo del oriente, sino de muchos otros sitios que van seducidos por una riqueza fácil y vemos que no es así», manifestó.
La diputada Mariela Magallanes denunció el 22 de noviembre la deportación de 16 menores de edad venezolanos por parte de las autoridades de Trinidad y Tobago, pese a una medida judicial introducida por una abogada para evitar su expulsión de ese país.
A través de su cuenta en Twitter, la parlamentaria destacó que actualmente se había introducido en tribunales una medida de habeas corpus de emergencia, pero «la oficina de Migración de ese país no esperó» a la respuesta judicial.
Las dos embarcaciones donde viajaban 29 migrantes venezolanos (13 adultos y 16 menores de edad entre ellos un bebé de cuatro meses de nacido), deportados de Trinidad y Tobago, fueron encontrada en La Barra, sector fronterizo entre el estado Delta Amacuro y las aguas internacionales de la isla, informó el diputado a la Asamblea Nacional Omar González la noche del 23 de noviembre, aunque Smolansky dice que todavía no hay una fe de vida.
Por otro lado, el cardenal Porras afirmó que las dificultades que se presentan en la sociedad no deben servir para «aplastarnos», sino tenemos que verlas como una oportunidad. «Ir haciendo y construyendo para reforzar los auténticos valores».
Resaltó que las divisiones internas entre los venezolanos y el ver al otro como un «enemigo» lo que hace es ahondar las diferencias que hay en la población, por lo que es importante buscar los puntos de encuentro y establecer un «diálogo sincero» que debe aplicarse primero entre los ciudadanos y no solo por el interés político o partidista de algunos. «Interesa es la totalidad de la población», subrayó.
«No podemos seguir con ese enfrentamiento entre los unos y los otros que lo que hacen es paralizarnos y hacernos retroceder (…) pensamos distinto, pero no podemos considerarnos enemigos», agregó.
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A su juicio, las «situaciones como las que están planteadas para diciembre no es el camino de la solución», sino que la misma va por otras vías y tiene que ver con el entendimiento de unos con los otros.
El cardenal Baltazar Porras se sumó a la posición esgrimida con anterioridad por el obispo de San Felipe, monseñor Víctor Hugo Basabe, acerca del acompañamiento que hace la Iglesia como institución a la ciudadanía y que existe una especie de «desconexión» por parte de la dirigencia política del país respecto a las necesidades del pueblo.
También lamentó cómo la clase media se ha ido empobreciendo debido a la hiperinflación que afecta al país, ya que los sueldos no alcanzan para poder tener una buena calidad de vida y las remesas que envían los familiares tampoco son muchas debido a que en todo el mundo la pandemia del covid-19 afectó las economías de los países.
«Estamos en hiperinflación que se dispara como cohete y se pierde. Eso nos tiene que hacer reflexionar para exigir de buenas maneras y no nos podemos dejar quitar la libertad, el derecho de opinar y la exigencia que nos permite echar adelante».
