Casa Blanca protegerá a venezolanos sin acudir al TPS
El funcionario norteamericano señaló que “la cuestión es proteger a los venezolanos para que no sean perseguidos ni deportados”, no trabajar en legalismos
EL gobierno de Estados Unidos informó este martes que “protegerá a los venezolanos” que se encuentran en el país para evitar “que sean deportados”, al tiempo que rechazó que dicha protección sea a través del Estatuto de Protección Temporal (TPS).
Así lo informó el encargado de la Casa Blanca para América Latina, Mauricio Claver-Carone, quien calificó de “debate político falso” la insistencia de otorgar el TPS a venezolanos, el cual quedó descartado luego de que el Departamento de Estado y de Seguridad obtuvieran algunas pistas al respecto.
“(Respecto a) Los venezolanos que están aquí, nosotros estamos muy atentos a su situación. No hemos buscado deportarlos, ni ponerlos en una situación de peligrosidad, ni lo haremos”, subrayó el asesor del presidente estadounidense, Donald Trump.
En tal sentido, el funcionario norteamericano señaló que “la cuestión es proteger a los venezolanos para que no sean perseguidos ni deportados”, no trabajar en legalismos. “Eso es lo que buscamos y haremos”, dijo.
“Estamos hablando, francamente, cuando se habla del TPS, de legalismos; y nosotros seguiremos buscando la manera de proteger a los venezolanos”, agregó.
Claver-Carone aseguró que para Washington la prioridad es encontrar “una solución permanente para la crisis”, que es “la democracia en Venezuela, para que todos los venezolanos puedan vivir libres de ningún tipo de miedo o de persecución”.
Apoyos electorales en Florida
Asimismo, el funcionario estadounidense indicó que la ausencia del TPS en la propuesta electoral de Donald Trump, para su reelección en 2020, no restará apoyos electorales en Florida, estado en el cual existen diversas organizaciones venezolanas que le han exigido la medida al mandatario norteamericano.
“El apoyo al presidente se va a hacer, porque este ha sido el primer presidente que verdaderamente ha puesto presión máxima hacia la dictadura de Maduro”, indicó.
De la misma manera, Claver-Carone aseguró que el presidente norteamericano ha hecho más por el pueblo de Venezuela en los últimos seis meses que los tres últimos presidentes de la historia de Estados Unidos. “Francamente la historia lo juzgará como el mejor amigo del pueblo venezolano”, expresó.
Senadores piden TPS a venezolanos
Un grupo de senadores estadounidenses de ambos partidos, conformado por Bob Menendez, Marco Rubio, Dick Durbin, Patrick Leahy y Cory Booker introdujeron las actas del Estado de Protección Temporal (TPS) correspondiente a 2019, con la finalidad de garantizar este estatus para los venezolanos que huyan debido a las condiciones de su país.
Este recurso permitirá proteger familias elegidas en Estados Unidos que residan en este país producto a una migración forzosa causada por el gobierno de Nicolás Maduro.
“Deportar a los venezolanos de vuelta a esa tragedia sería decirles que son un lastre en nuestras comunidades, una amenaza para nuestra seguridad nacional y huéspedes no bienvenidos en nuestro país. La realidad y nuestro interés nacional es precisamente lo opuesto”, indicó Menendez al introducir este documento.
La semana pasada, el director en funciones del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), Ken Cucinelli, expuso en una carta al Senado las razones que complican la concesión del TPS y señaló que “puede haber” otras opciones de alivio migratorio para los venezolanos, lo que muchos interpretaron como una negativa.
Más claro fue el enviado especial de EEUU para Venezuela, Elliott Abrams, quien afirmó este lunes en una entrevista con la Voz de América que no cree que la Administración de Trump “ni la próxima vayan a otorgar TPS” mientras los tribunales del país mantengan “que (ese beneficio migratorio) es perpetuo“.
Sin embargo, la Cámara Baja tiene previsto votar hoy un proyecto de ley que busca presionar a Trump para que conceda el TPS a los venezolanos que viven irregularmente en el país.
El programa TPS fue creado en 1990 y a través de él, EEUU concede permisos de forma extraordinaria a los ciudadanos de naciones afectadas por conflictos bélicos o desastres naturales.