Casi medio millón de venezolanos quedan a la deriva tras cierre de embajada en Ecuador
El gobernante Nicolás Maduro aseguró que todos los consulados y la Embajada de Venezuela en Ecuador serán cerradas «hasta que se restituya el derecho internacional» en ese país. La politóloga y activista Betzabeth Jaramillo asegura que «esta acción no solo vulnera los derechos básicos de identidad y consulares, sino que también impide que los venezolanos en Ecuador ejerzan su derecho a voto»
La decisión del mandatario Nicolás Maduro de cerrar la embajada de Venezuela en Ecuador deja a casi medio millón de venezolanos sin acceso a documentos y servicios consulares esenciales, alertó este martes 16 la politóloga y activista Betzabeth Jaramillo.
La medida, en apoyo a México tras las acciones de Ecuador, impide que aproximadamente 474.000 venezolanos, según datos de la plataforma R4V, puedan acceder a servicios esenciales como la tramitación de pasaportes y visas, así como la regularización de su estatus migratorio.
A juicio de Jaramillo, según recoge una nota de prensa, la decisión unilateral de la administración Maduro desencadenó una «crisis humanitaria y de derechos humanos» para los venezolanos en ese país.
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«Esta acción no solo vulnera los derechos básicos de identidad y consulares, sino que también impide que los venezolanos en Ecuador ejerzan su derecho a voto, una táctica que refleja el miedo del chavismo a la voluntad popular de sus ciudadanos en el exterior», afirmó la politóloga.
Denunció que la falta de representación consular «complica significativamente la situación legal de los venezolanos en Ecuador, dejándolos en una posición vulnerable respecto a la regularización de su estatus migratorio y la obtención de visas».
Esta situación, señaló la activista, podría tener «consecuencias a largo plazo en términos de integración y estabilidad legal para miles de venezolanos, quienes se ven forzados a permanecer en un limbo migratorio».
Jaramillo instó a la comunidad internacional a responder ante esta crisis y solicitar a la administración Maduro a que reconsidere su decisión.
Insistió en que esta medida solo refleja una «desconexión con las necesidades de la diáspora venezolana, sino también un desprecio por sus derechos fundamentales, exacerbando la crisis migratoria en Ecuador, un país que ha sido un refugio clave para los venezolanos desde 2018».
