Chantaje, robo y corrupción, por Adalberto Farías Estrada
Esa mafia que impera tiene que acabarla Señor Presidente porque es el sacrificio y sudor de los propietarios
Jamás había visto tanta putrefacción como la que impera en el Garaje Privado de Lagunillas, es un antro de corruptela, mejor dicho un atajo de pillos que viven de los ingenuos propietarios de vehículos, a quienes les envían sus unidades para esa cueva de bichos.
Por simple delitos de tránsito o pequeños detalles del auto, le siembran una inmensa agricultura de causas graves para la extorsión y el infame martilleo, el Martillo de Lagoven en el pasado se quedó en pañales comparándolo con el que usan estos trúhanes, todo vehículo es desvalijado en su totalidad y solamente dejan la carrocería.
Allí se configura toda una parafernalia criminal por un horrendo contubernio que va desde que envían el carro, amigos lectores el comienzo de ese tormento es asombroso ya qué es un concierto malandrín con las alcabalas móviles y un operativo ruin y es precisamente el martilleo, cuando te dicen, párate ahí a la orilla, dame la cédula, carta médica, los papeles del carro, los cauchos están pelones.
Luego le dicen al propietario, lo vamos a enviar al estacionamiento, pero si tú tienes 500 soberanos lo dejamos así, el conductor como está pelado dice que no tiene dicha cantidad, se origina una discusión y al final la unidad es enviada a “Alcatraz” ante la mirada impune de su familia, inclusive delante de niños, cuando van a buscar el automotor se encuentran con una espeluznante sorpresa
El carro ha sido desvalijado y nadie responde por el Reproductor, cajas de herramientas, baterías y cauchos, Señor Presidente Nicolás Maduro Usted debe ponerle la Lupa a estas jaurías de pillos que se lucran a través de los humildes conductores, porque el costo de la estadía en ese antro es impagable y muchos vehículos se pierden o desaparecen para siempre.
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Esa mafia que impera tiene que acabarla Señor Presidente porque es el sacrificio y sudor de los propietarios…
La Justicia llegará en el momento adecuado y preciso para condenar a estas alimañas que han estado toda una Organización que se alimentan con carroña de los carros muertos por el olvido y el tiempo, claro cuando los van a retirar ya son chatarras inservibles y dejando en la ruina y pie a sus propietarios.
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No solamente aquí en el Municipio Lagunillas, esto sucede en todo el país y ante la mirada impune de las autoridades en cada Estado de Venezuela, nunca es tarde para desenmascarar a ese bribones que roban al pueblo de manera inmisericorde.
Cien días estuvo mi vehículo en el estacionamiento y la cantidad que tenía que pagar no me alcanzaba ni para arreglar mi carro y tuve que perderlo, allí se fue todo mi trabajo y sacrificio.
A través de este pequeño artículo quiero hacerles un llamado a otros propietarios para que levantemos la bandera de lucha y protestas ante esta cuerda de pillos que conforman una Organización de pillaje y calandrajo, el Martillo del Juez está listo, la banqueta del Juzgado los espera y los barrotes de la Cárcel están fríos esperándolos.
La Ley no es ciega, quizás lo que la conforman son invidentes ante tanta injusticia ocasionada por tantos delincuentes que andan cometiendo fechorías y pillería.
Amigos lectores les reitero que levanten su voz para evitar que otros propietarios caigan en las redes de estas gigantes arañas que están al acecho en los garajes del País.
Mientras tanto seguiré pensando y opinado que esas cuevas son un atajo de ladrones, extorsionadores y corruptos-
No solamente ocurre en el Municipio Lagunillas esta corruptela, porque las alimañas de esta calaña está esparcida a nivel de todos los estados del País, dejando a su paso secuelas irreversibles a tantos propietarios de vehículos humildes que han perdido su unidad en manos de esos alacranes de la sociedad venezolana.