«Chiky Lorens» acudió a la Fiscalía para denunciar lo ocurrido en el Hotel Pestana
Varias ONG hicieron un llamado al Ministerio de Turismo para que tome cartas en el asunto y no se repita la discriminación que vivió la «Chiky Lorens» en el Pestana
El actor Juan Alejandro Solórzano, quien interpreta el personaje de la «Chiky Lorens», acudió este domingo 12 de diciembre junto a sus abogados a la sede del Ministerio Público en la Avenida Urdaneta para denunciar la discriminación y la homofobia que sufriera en el Hotel Pestana en días pasados.
A través de su cuenta en Instagram, indicó que la Defensoría del Pueblo le envió una funcionaria para formalizar la acusación ante la Fiscalía. Destacó que no es una denuncia «unipersonal» sino que fue un acto contra las personas sexo diversas en Venezuela
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Más temprano, un grupo de más de 40 organizaciones no gubernamentales (ONG) emitieron un comunicado en rechazo a la discriminación de la que fuera víctima el actor Juan Alejandro Solórzano, quien interpreta el personaje de la «Chiky Lorens», por parte de funcionarios del Hotel Pestana en Caracas.
Estas ONG hicieron un llamado a la Asamblea Nacional electa en diciembre de 2020 y al Consejo Nacional Electoral para que tomen acciones que permitan avanzar en los derechos de las personas de la comunidad Lgtbiq+ y de esta forma se cumpla con la responsabilidad de garantizar el derecho de identidad a las personas trans.
A juicio de las organizaciones, el Estado venezolano «tiene una deuda significativa con la garantía de derechos humanos para las personas lesbianas, gais, bisexuales, trans, intersex, queer (LGBTIQ+) que lo hace responsable directamente por la vulneración a la integridad física, mental y psicológica que viven a diario las personas de esta comunidad en las calles, escuelas, universidades y hogares del país».
Junto al Poder Legislativo y Electoral, exhortan al Ministerio de Turismo a que desde esa cartera se generen medidas preventivas y de reparación para resarcir las vulneraciones a los derechos que impidan que nuevos hechos como el que vivió «Chiky Lorens» en el Hotel Pestana se repita. También llamaron la atención del Ministerio Público para que se cree una división especial que atienda los casos de crímenes de odio basados en «orientación sexual, identidad y expresión de género real o percibida».
Entre las ONG firmantes se encuentran Amnistía Internacional Venezuela, Avesa, Codhez, Defiende Venezuela, Alianza Lambda de Venezuela, Fundación Reflejos de Venezuela, Aula Abierta, Organización StopVIH, entre otras.
El viernes 10 de diciembre, “La Chiky Lorens”, interpretada por el actor Juan Alejandro Solórzano, denunció que fue víctima de discriminación y homofobia cuando intentó ingresar al Hotel Pestana, en Caracas.
*Lea también: «Derecho de admisión»: una excusa para justificar discriminación hacia personas Lgbti
A través de su cuenta de Instagram, Chiky Lorens explicó que acudió al hotel para fotografiar a su sobrina, a la que le pagaron un full day motivo de sus 15 años. Chiky relató que al llegar al hotel le pidieron un documento de identidad con su género. Pero les explicó que, dado el personaje que representa, no contaba con ningún documento que la identificara como Chiky Lorens.
Lo ocurrido con el artista venezolano se evidencia luego que el 25 de septiembre en el restaurant Vera Pizza en el municipio Chacao decidiera ejercer «el derecho de admisión» para discriminar a dos hombres gays. En esa oportunidad se alegó «el asco» que producía ver a dos hombres bailando y la presencia de menores de edad en el sitio, como motivo de desalojo del local.
La denuncia en redes sociales de los afectados, entre ellos el activista Lgtbi Yendri Velásquez, desató una ola de tuits que posicionó en las tendencias de Twitter «Vera Pizza» durante tres días, así como dos comunicados escuetos del restaurante y otro escrito de la Alcaldía de Chacao que, sin aludir a la discriminación de dos hombres gay, notificaba una sanción contra el local basados en la ordenanza municipal contra la no discriminación y la igualdad, vigente desde el 9 de agosto de 2016.
Luego de la sanción, un grupo de activistas protestó en el sitio. El dueño del local se disculpó con los afectados y aseguró estar dispuesto a participar en actividades de formación junto a su personal para evitar este tipo de sucesos en un futuro.
Con información de Monitoreamos
