CIDH preocupada por más de 5.000 desplazados tras enfrentamientos en Apure
La CIDH pide a Venezuela y Colombia adoptar medidas para atender y proteger a los civiles desplazados, así como garantizar el retorno voluntario y seguro
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresa preocupación por el desplazamiento de más de cinco mil personas hacia Arauquita, Colombia, luego de los enfrentamientos entre la Fuerza Armada Nacional (FAN) y una disidencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el estado Apure, que habrían comenzado el pasado 21 de marzo.
La CIDH insta a las autoridades de Colombia y Venezuela «a adoptar medidas coordinadas para atender y proteger a la población civil desplazada, así como garantizar su retorno voluntario y seguro».
Las autoridades colombianas aseguran que el ingreso de personas que dejaron sus hogares y pertenencias aún continúa. Los enfrentamientos en la zona dejaron varios heridos y al menos cinco integrantes de una familia masacrados duraron al menos tres días.
En Colombia, hombres y mujeres han denunciado y responsabilizado a la FAN de ser los responsables de una actuación violenta en medio del conflicto, además decir que fueron quienes los obligaron a huir.
El director de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, aseguró que han «recibido denuncias creíbles de abusos por parte de las fuerzas de seguridad en contra de la población de Apure”.
El ataque que ocurrió específicamente en la población La Victoria incluyó el uso de explosivos por parte de grupos armados a instalaciones civiles y militares de la zona provocó una respuesta con ataque aéreo y bombardeos por parte de la Fuerza Armada Nacional.
Las autoridades colombianas instalarán en el departamento fronterizo de Arauca un centro de atención para los venezolanos desplazados con capacidad para 300 personas, tras el visto bueno del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), para su construcción y la confirmación de la donación de 60 carpas.
Hasta los momentos, el ministro de Interior de Colombia, Daniel Palacios, instaló un puesto de mando en el municipio de Arauquita y se comprometió a colaborar para que la región se declare en emergencia, medida que permitiría optimizar políticas de atención para los desplazados.
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