Cuatro de cada 10 estudiantes de medicina utiliza insumos comprados por pacientes
Carlos Meléndez, director del Observatorio de Universidades, dijo que 49% de los estudiantes de medicina debe trabajar y estudiar al mismo tiempo para poder subsistir. «Es algo que antes no se veía, sabemos que tenían que dedicarle todo el día al estudio de medicina, pero ahora no pueden, tienen la necesidad de tener otro ingreso»
Las condiciones del personal de salud venezolano, en específico de los estudiantes de pregrado y postgrado de medicina, es de precariedad en cuanto a materiales para poder realizar sus prácticas de forma efectiva. Según la última medición del Observatorio de Universidades (OBU), hecho durante los primeros cinco meses de 2022, cuatro de cada 10 estudiantes utiliza insumos comprados por los pacientes o sus familiares.
La encuesta del OBU fue hecha a estudiantes y profesores de nueve universidades donde se oferta la carrera de medicina. El 70% trabaja en hospitales tipo IV, los centros de salud con mayor estructura dentro del sistema sanitario venezolano.
19% de los estudiantes de medicina, tanto de pregrado y postgrado, utiliza insumos provenientes del gobierno nacional, mientras que 13% son comprados por las gobernaciones y 14% suministrados por donaciones de organismos internacionales.
🚫 El Gobierno no garantiza las condiciones para las actividades clínicas asistenciales en Venezuela 🇻🇪. 📌Los pacientes y/o familiares deben proveer sus medicamentos💊💉 para poder ser atendidos.#EnobuSalud2022 #Venezuela #Medicos #universidades
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En cuanto a equipos de protección personal (mascarillas, batas, lentes, gorros), 69% de los universitarios se ve obligado a costearlo. Aquí la proporción de suministro cambia, pues 15% de estos materiales es entregado por organismos internacionales en los centros de salud, 13% lo provee el Gobierno nacional y otro 13% lo compran y entregan pacientes o sus familiares.
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La dotación en hospitales y ambulatorios de insumos, medicinas y materiales médico quirúrgicos, a partir de la pandemia de covid-19, no ha cambiado según el 54% de los encuestados, mientras que 27% considera que ha desmejorado.
Otro dato que destaca la OBU es la capacitación en el manejo de pacientes con covid-19. A pesar de que los porcentajes han bajado en cinco puntos desde 2020, 41% de los universitarios dijo que no ha recibido ningún tipo de orientación para ello, a pesar de que más de la mitad (55%) dijo estar en un ambiente de alta exposición a la enfermedad. 27% aseguró haber recibido instrucción, pero no la suficiente.
La cobertura de vacunación contra el coronavirus, como parte del personal de riesgo, sí ha cumplido con estándares internacionales. 94% de los estudiantes y profesores señalaron tener el esquema completo (dos dosis) y 48% se ha aplicado una dosis de refuerzo.
Estudiantes de medicina deprimidos
Al menos 60% de los estudiantes de postgrado de medicina en Venezuela tienen dos o más síntomas de depresión, de acuerdo a la encuesta del Observatorio de Universidades. Al menos 12% de los estudiantes de pregrado han presentado ideas suicidas.
«La salud mental es otra de las realidades invisibilizadas. Las consecuencias de estudiar o enseñar en ciencias de la salud en las condiciones en que se encuentran los universitarios, pueden llegar a la depresión, agravada en la población más joven, que afirmó en un porcentaje significativo tener pensamientos suicidas», destacó la OBU.
Debido a la crisis que padecen los centros de salud públicos, 79% de los universitarios encuestados afirmó que en los últimos 12 meses ha renunciado a su cargo al menos un compañero de trabajo o estudio.
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66% de los residentes de posgrado ha evidenciado episodios de acoso laboral, lo que afecta su seguridad física y emocional. «La hostilidad en los establecimientos de salud tiene triple rostro. La provocada por las carencias estructurales, la delictiva y la ejercida por las autoridades frente al personal».
Carlos Meléndez, director del OBU, dijo que uno de los datos más resaltantes de la encuesta es que el 49% de los estudiantes del área de salud debe trabajar y estudiar al mismo tiempo para poder subsistir. «Es algo que antes no se veía, sabemos que tenían que dedicarle todo el día al estudio de medicina, pero ahora no pueden, tienen la necesidad de tener otro ingreso».
En cambio, 85% de los profesores deben buscar otras actividades laborales para poder sobrevivir. El trabajo tampoco es seguro, pues 70% de los universitarios encuestados realiza trabajos informales para poder tener algún ingreso.