¿De quién es la culpa del alto costo de la vida? ¡Del Gobierno!
La producción agrícola, así como la de leche y carne, han caído dramáticamente en los últimos años. Si la producción nacional alcanzara no habría necesidad de traer tanta comida de afuera. El gobierno hostiga y amenaza a los productores y a través del INTI se ha apoderado de más de dos millones de hectáreas de tierra, de las cuales apenas 50 mil están medianamente productivas y el resto está ocioso. Al no haber suficiente producción nacional de alimentos, los precios son empujados hacia arriba porque hay más compradores que comida. De la caída de la producción en el campo el único culpable es el gobierno.
Por otro lado, el gobierno mantuvo congelados los precios de alimentos esenciales durante tres años. Cuando se vio obligado a hacer aumentos en los precios de los productos que venden Mercal y Pudreval, porque nadie puede vender con costos superiores a los precios que recibe por su producto, esos aumentos pasaron al costo de la vida. Esto es responsabilidad exclusiva del gobierno, en un ámbito donde los precios los fija este y no el sector privado. Ha podido mantenerlos congelados tanto tiempo porque el gobierno pone la diferencia entre lo que cuesta producirlos o importarlos y sus precios de venta al detal. Pero llega un momento en que los subsidios no alcanzan y se ve obligado a propiciar un brinco enorme en los precios de venta al público. De estos responde el gobierno y nadie más.
Igualmente, el gobierno mantuvo congelada la tasa de cambio con el dólar durante tres años y llegó el momento en que tuvo que aumentar el precio del dólar en bolívares, por razones parecidas a las de los aumentos de la comida. Fue la devaluación de enero pasado. ¿La hizo el sector privado o la hizo el gobierno? El dólar que costaba 2,15, pasó a costar 2,60 y 4,30 bolívares por decisión del gobierno. 60% más, en promedio.
De modo que la comida que importan Pudreval y Mercal tuvo que ser pagada con dólares más caros y eso se reflejó en los precios al detal. De la relación entre el bolívar y el dólar el único responsable es el gobierno, quien mantiene un control cerrado sobre su compra-venta. No puede culpar a nadie más.
El número de empleados del gobierno pasó de un millón en 1998 a 2 millones 300 mil este año. Pagar eso cuesta bastante más del doble de los que costaba en 1998. Aunque no se vean muchas obras, el gobierno gasta también mucho dinero improductivamente y pone muchos bolívares en la calle. Muchos bolívares circulando, persiguiendo relativamente pocas mercancías, empujan los precios hacia arriba. La mano que gasta es del gobierno y por este lado la responsabilidad del alto costo de la vida también es suya.
¿Que hay algunos vivos que aprovechan para especular? Sí, pero pueden hacerlo porque el alza de los precios es indetenible gracias a los errores del gobierno. Eso es la inflación y los especuladores se esconden detrás de ella. Luchar contra la especulación sin hacer nada contra la inflación es un intento de desviar la atención del verdadero problema, para engañar incautos y buscar votos.