Diputado Martínez rechaza diálogos «a escondidas» y en otro país
El diputado Martínez abogó porque se permita que líderes empresariales, laborales, académicos, representaciones de mujeres, jóvenes y dirigentes comunales, de las iglesias, entre otros, participen «por lo menos» en calidad de observadores, en lugar de dar preferencia a veedores internacionales como ha propuesto la oposición liderada por el presidente de la AN electa en 2015, Juan Guaidó
El diputado de la Asamblea Nacional de Nicolás Maduro electa en los cuestionados comicios del 6 de diciembre Luis Eduardo Martínez calificó de inaceptable la idea de una negociación de espaldas a la ciudadanía y en territorio extranjero.
El parlamentario de la bancada opositora, por el contrario, respaldó el planteamiento hecho por el gobernante Nicolás Maduro de que el proceso sea público, idea que ha sido rechazada por Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional Electa en 2015, quien aseguró que una negociación «de micrófono» resta «seriedad» al proceso.
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«Es inaceptable dialogar y negociar sobre el futuro de los venezolanos a escondidas, de espaldas al país, en territorio extranjero, limitado los actores a unos pocos políticos y sin que los medios de comunicación social tengan facilidades para cubrir en tiempo real lo que discute y decide», señaló en un comunicado el diputado Martínez.
Martínez consideró que las negociaciones surgidas de una propuesta del propio Guaidó se deben realizar lo antes posible en una localidad venezolana y no en el extranjero, en referencia a la posibilidad que barajaron algunos actores políticos opositores de dialogar fuera del país.
«¿Quién pagará la cuenta de hoteles, pasajes, movilizaciones internas, salones de reuniones, comidas, de unas delegaciones cuyo número aún es indeterminado en México, Noruega u otro país como insisten sea? ¿Qué empeño existe de fijar el proceso lejos de nuestras fronteras?», se preguntó el también vicepresidente de la Comisión de Diálogo, Paz y Reconciliación del Parlamento electo en 2020.
El diputado Martínez abogó porque se permita que que líderes empresariales, laborales, académicos, representaciones de mujeres, jóvenes y dirigentes comunales, de las iglesias, entre otros, participen «por lo menos» en calidad de observadores, en lugar de dar preferencia a veedores internacionales.
Instó a la ciudadanía a reclamar que este y cualquier diálogo y negociación que se adelante para salir de la «dramática crisis» sea «transparente e inclusivo, sin secretismo que generan tantas sospechas».