Doble Fantasía, por Wilfredo Mora
Autor: Wilfredo Mora
Hoy recuerdo el disco de vinilo del sello Geffen, recién salido en la ciudad de Los Ángeles, Doble Fantasía, de John Lennon, lo traía yo, de regalo, bajo el brazo, para mi amigo, Evio Di Marzo.
Si bien fui el primero en obsequiarle el nuevo disco, también me tocaría, a los pocos días, muy temprano, ser el primero en darle la noticia por teléfono: John Lennon había sido tiroteado con un arma de fuego.
Evio se despertaría sobresaltado, y automáticamente escribiría, sobe la carátula del disco, fecha y hora de la noticia.
El Nunca imaginó que correría la misma suerte del legendario músico. Yo tampoco
Esta mañana, cuando la noticia de Evio, y su muerte violenta, llegó a mis oídos en el informativo radial de la mañana, lo primero que recordé, fue la muerte de Lennon que volvía a repetirse. Doble Fantasía- pensé
Dos seres imprescindibles, muertos, de un modo tan absurdo. Nos habían dado donde más duele.
Jamás pensó Evio que su vida corría peligro, confiado de su carisma, abrazaba siempre nuevos horizontes, confiado en vivir muchísimos años, para poblar la tierra de hijos, de proyectos, de música, toda Boca de Uchire frente al mar… pa mi solito, Solita Ella…
Evio se fue sin avisar, y aún no puedo expresar el impacto de su desaparición, contaba con él, pensé que era del grupo de los inmortales con sus aventuras y sueños, fue un niño que no pudo crecer, que viviría cientos de años.
Su muerte representa al país sin derecho a la vida, su ausencia se siente más porque dio tanto con la briosidad de su canto, creía en lo que le apasionaba, creía que tenía que volver a nacer para ser mejor, así, se hizo musulmán, también cocinero, también profesor, también navegante. Era Renacentista, pero fue estafado por una causa, que por él, ni se preocupó. Así ocurrió a Yanis Chimarra.
Los otros, los que se han ido, nadie los recuerda porque eran muy discretos, aunque no menos importantes, son muchos los que cada día mueren y mueren
Para ellos, para Evio y para muchos, John Lennon escribió aquellos estribillos….
“Hay lugares que siempre recordaré mientras viva, algunos han cambiado, unos para siempre, no para mejor, algunos se han ido, otros quedan, todos estos lugares tienen sus momentos, sus amantes y amigos, a todos los recuerdo. Algunos están muertos, otros vivos, pero en mi vida los amo todos.”
Cada vez que pase por Bellas Artes, miraré ese puente que une la plaza Morelos a la Mezquita, y pensaré que ése fue el último cielo que vieron los ojos de Evio antes de irse. Y quizá oiga el estribillo… Yo me quedo en Venezuela
Adiós Amigo te fuiste sin despedirte. Prometo visitarte cada día por Bellas Artes, Estación Doble Fantasía: Evio Di Marzo. Tu Amigo siempre Wilfredo.
