El 10 de enero se acaba el mundo, por Eduardo López Sandoval

El diálogo que de seguidas husmearemos es del año pasado, del tiempo de los exámenes de final del año escolar, de un sitio web que al parecer se dedica a atender lo relacionado con materias que se cursan en bachillerato, uno de los estudiantes dice:
-Pues yo me(Sic) presento a(Sic) Estadistica(Sic)… a ver si no lo pone dificil(Sic) y saco el 5.
El compañero responde:
-No te preocupes mucho que el 10 de enero se acaba el mundo.
Sin duda no se acabará el mundo como pareciera vaticinar el aspirante a bachiller, porque dice “no te preocupes”, hablan en el sentido figurado que todos entendemos. Pero algún mundo se acabará de verdad verdad, veamos el de quién, el del exitoso Gobierno o el de la fallida Oposición… fallida por lo menos hasta el este 10 de enero…
Pero sigamos con los aspirantes a bachilleres, ahora cuando eran niños…
Anteriormente, durante los primeros diez años de esta pesadilla de veinte, bien pudimos ver que sus padres los durmieran con el siguiente cuento infantil…
Erase una vez un rey, que se entronizó sobre los carapachos de unos partidos que infructuosamente intentaban por décadas construir una República. El militar de rango medio, rebautizado por Zapata El Poseso, que después se hizo rey, inventó una Constituyente, ilegal desde su nacimiento, mandó a preguntar: ¿Autoriza usted al Presidente de la República para que mediante un Acto de Gobierno fije, oída la opinión de los sectores políticos, sociales y económicos, las bases del proceso comicial en el cual se elegirán los integrantes de la Asamblea Nacional Constituyente? Pregunta capciosa, tramposa. La gente de aquel pueblo con su voto hizo el bebedizo doloroso que religiosamente ingirió con efectos venenosos por esta veintena de años. Ningún dirigente de la llamada Oposición analizó con algún detalle el, ¿Autoriza usted al Presidente de la República para que…fije… las bases del proceso comicial?
Gato por conejo: El militar fue autorizado por los votantes para fijar las condiciones que regirán en el proceso comicial… ¡Y LAS FIJÓ!, entre éstas metió una de contrabando, que establecía que: “Cada elector dispondrá de tantos votos como constituyentes a elegir”.
¿Qué significaba esa base comicial fijada unilateralmente? ¿Qué importancia tuvo esa base comicial? La trampa. El Presidente, que se hizo Rey en este acto, contaba con el apoyo del 54% de los electores del país, y con esa norma fijada unilateralmente, autorizó a los ciudadanos a votar tantas veces como candidatos existieran; por ejemplo en un Estado gocho se elegían cuatro diputados constituyentistas y los electores podían votar 4 veces , o sea, con el 54 % de votos eligió el 100% de los diputados y la oposición con el 46% de los votos obtuvo cero diputados (0%). Nació una Monarquía Comunista.
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Un quince de diciembre, de un antaño año -valga la cacofonía-, el pueblo con su mayoría democrática ya no quiso creer más las mentiras del Gobierno y votó por la Oposición que se presentó como unida, cambió de mentiroso en un mes que aún sonaban buenas gaitas… Y logró una mayoría en el Parlamento suficiente para despertar de esta pesadilla, para democráticamente deponer al Rey sustituto, -este sustituto había sido dejado por el rey muerto, porque monarca que se respete ante el apremio de su muerte tiene la eternal libertad de nombrar a su sucesor, y así lo hizo. El rey primero había disfrutado el más jugoso precio de las riquezas naturales que malgastó a manos llenas para sostener el Poder. Con este Poder dado en las urnas por el pueblo engañado y el encumbrado precio de los barriles, se mantuvo.
El segundo rey vio que era un cochino que le había llegado su sábado, cuando el Parlamento recién electo, el primer mes de su toma de mando bien pudo exigir la Partida de Nacimiento, y de presentar una, tenía la posibilidad cierta de declarar su elección nula por tener doble nacionalidad por así establecerlo la Ley del país donde nació su madre, porque tampoco ha presentado la renuncia a su primera nacionalidad… Fin del cuento.
¿En enero se acaba el mundo del gobierno castro chavista? Eso esperamos en otros meses de enero.
2016, cuando el Parlamento electo para precisamente resolver esto no decidió declarar la Ausencia Absoluta del Interfecto, ni siquiera lo consideró con su mayoría por un año bajo la conducción de Ramos.
2017, Borges fue lo primero que decidió aquel enero, y horas después, envés de darle el tratamiento de expresidente al Interfecto, declaró que éste debía presentar la Memoria y Cuenta en el Parlamento y no en el TSJ, políticamente fue un Reenganche Indirecto, y lo más grave del “olvido”: dejó que los estudiantes salieran a la calle a derramar su sangre sin esa bandera política.
2018, nada.
2019. La llamada Oposición, con su mayoría en el Parlamento decide el mundo de quién se acaba…