El fraude del abstencionismo electoral, por Griselda Reyes
Hoy día encontramos dentro del proceso electoral parlamentario venidero, una campaña de abstencionismo muy parecido a la del año 2005, que busca crear un fenómeno desmovilizador apáticamente a los electores que reflejan algunos líderes de la oposición.
Esta no es más que una muestra de revivir el pasado que atornilló al régimen con una Asamblea Nacional casi exclusivamente chavista como consecuencia de la decisión que, muy a última hora tomó la oposición de no participar en las elecciones parlamentarias de ese año, pensando erróneamente que con ello contribuiría a deslegitimar al gobierno y a precipitar su caída, en esas elecciones a coro expresaban: “En estas condiciones no podemos participar…», a nombre de los partidos políticos condenando las elecciones parlamentarias. ¿Que logramos viendo TV en casa? ¿Qué logramos políticamente con esa absurda decisión? !Nada! Al final no había un plan B y perdimos nuestras libertades. En esas elecciones estaba en juego, no sólo el control de la Asamblea Nacional, sino la posibilidad de que el gobierno lograse una mayoría calificada como la obtuvo.
Los abstencionistas de ayer, son los mismos actores que hoy no quieren el voto del soberano en elecciones parlamentarias, su radicalismo político los lleva a señalar: “…no descartan la intervención militar estadounidense en medio de la escalada de la crisis policía…” como lo declara en los medios el líder de la oposición. Sin embargo, en el llamado de la abstención del 2005 señalaba como bandera un vocero de un partido político; «…No estamos sentados en las piernas del embajador de Estados Unidos, como tampoco en las piernas del embajador cubano…». ¿Son estas contradicciones lo que quieren algunos líderes de oposición?.
El argumento de la abstención inducida nos indica la incidencia del resultado a obtener, perjudicando las opciones de candidatos que las regiones requieren tener como sus representantes ante el parlamento. Sobre la amputación política del abstencionismo señalaba un líder opositor de un importante partido político en 2005: “…Pienso que estar fuera de la Asamblea Nacional nos va a permitir explorar esas formas de lucha y renovar nuestro contacto con el pueblo…». Esta posición de la MUD con su agenda de protestas antigubernamentales nos dejó unos resultados de heridos, muertos y presos políticos sin nadie ser responsable. Según analistas políticos y muchos artículos de opinión les preocupa el peligro de la abstención electoral en las elecciones con un mínimo porcentaje de participación y movilización de algunas organizaciones, lo cual obedece según las encuestas, a la mala situación y decepción con la oposición. Considero que el tiempo se convertirá en el recurso más importante con el que demostremos cuan equivocados han sido esas políticas opositoras, y las del régimen al observar las regiones e incluso en las áreas rurales, donde el régimen de Maduro había sido más fuerte en el reparto de dádivas, hoy existe descontento en sus bases debido a la escasez de alimentos básicos y el incremento en las tasas de inflación y de criminalidad.
Sin lugar a dudas, el derecho de todo ciudadano a emitir su voto es uno de los actos más sublimes de todo régimen democrático, y esto es así porque es el instrumento a través del cual la sociedad puede libre y periódicamente participar en la determinación de la orientación política general mediante la designación de sus representantes electos en votación con propuestas que les sean sometidas a su consideración. En la política, se usa el voto para que los electores elijan a los miembros del gobierno u otros cargos públicos y representantes. “En ningún país del mundo los abstencionistas obtienen cargos de elección popular no votando”.
Señores abstencionistas electorales, el voto es una condición necesaria para que un sistema político sea democrático, el mismo sistema electoral convierte los votos emitidos en la elección general en diputados, bien sea lista o nominal, igualmente en representación proporcionales ganados por partidos y candidatos. De allí parte que las organizaciones políticas tienen como fin promover la participación del pueblo en la vida democrática, en la elección de sus candidatos con representantes en las mesas. Según analistas políticos y muchos artículos de opinión les preocupa el peligro de la abstención electoral con un mínimo porcentaje de participación y movilización de algunas organizaciones políticas, lo cual obedece según las encuestas, a la mala situación del país, la pésima gestión del régimen madurista y decepción con la oposición.
Hay que planificar bien y sobre todo marcar objetivos realistas de oposición al régimen con los procesos de elecciones, estamos obligados ante nuestros electores expresar y tener la capacidad de rectificación y reconocer los errores cometidos con humildad, tanto oposición como el régimen altanero, ¿Vamos a seguir ahondando en esas prácticas de politiquerías?. Considero que se agotó el tiempo, por ello seguiremos adelante con propuestas frescas a través de un nuevo liderazgo político, para una nueva Venezuela que hay que reconstruirla, sin compromisos de alianzas ni macoyas de jefes de partidos políticos. Construyamos un nuevo liderazgo para una nueva arquitectura con seguridad institucional.