El PSUV no sabía que Alex Saab era «agente del gobierno» cuando pidió investigarlo
Francisco Torrealba busca de nuevo una curul en la Asamblea Nacional por el PSUV, participando en el proceso del 6 de diciembre convocado por el CNE. Desde 2019 ha sido el portavoz del grupo parlamentario del Bloque de la Patria y de su partido en el parlamento venezolano. Afirma que la llamada «ley antibloqueo» es un paso a la ofensiva frente a sanciones internacionales, y torea preguntas sobre las investigaciones que anunció y nunca se concretaron contra Alex Saab. Recibe a TalCual para una rápida entrevista en medio de reuniones partidistas
-La llamada «ley antibloqueo» abre cancha al secretismo y brinda una carta blanca al Ejecutivo para supuestamente ocuparse de asuntos económicos. Debido a su relevancia, ¿por qué no esperar que se discutiera por el nuevo parlamento que el PSUV impulsa electoralmente para el 6D?
-Que exista la confidencialidad no significa que dejen de existir las medidas de control y de seguimiento de todos los procesos por los cuales tenga que atravesar cualquier tipo de instrumentación de la ley antibloqueo para el desarrollo nacional y la garantía de los derechos humanos de lo que aquí vivimos. Nosotros hemos venido siendo víctimas injustas de un conjunto de agresiones y de daños, sufrimiento y dolor que ha causado el gobierno de los Estados Unidos y sus aliados, incluyendo a las marionetas que han mantenido durante estos cinco años el control del poder legislativo nacional. Frente a esto, yo creo que más bien hemos esperado mucho para pasar a la ofensiva, que es lo que se plantea a estas alturas con esta ley, y dejar simplemente de ser reactivos y de defendernos. Yo creo que nos tardamos más de lo deseado. Creo que es oportuno decir que efectivamente, si se da la situación que nosotros estamos aspirando, que es pasar a recobrar la mayoría en la AN, entonces podrá continuarse legislando sobre esta materia, en términos de ampliar los rangos de instrumentación de todas estas disposiciones que ya son vigentes por cuanto han sido aprobadas por vía de ley constitucional.
-¿Cómo garantizar que haya control en medio de ese secretismo, siendo la narrativa oficial la que trajo el concepto de contraloría social?
-Te repito que el hecho de que haya confidencialidad no significa que haya impunidad o patente de corso para hacer cosas que estén reñidas con el resto del estamento legal vigente, porque esta ley, en efecto, sólo permite que el Estado pueda protegerse con un nivel de discreción, que, de paso, lo tienen todos los Estados del mundo. Todos los gobiernos guardan secretos, pero no significa que no sean controlados. Lo que pasa es que el Estado tendrá sus propios mecanismo de control adicionales, no solamente los vigentes que existen por vía de la Contraloría General de la República, y el mismo mecanismo de control que según la Constitución le atribuye la facultad al parlamento venezolano, que lo podrá seguir ejerciendo plenamente. Que se haga con régimen de confidencialidad de protección como secreto de Estado, no significa que va a estar oculto de forma permanente, ni que vaya a permitirse que esto sea un mecanismo para incurrir en hechos irregulares. Con las mismas leyes que tú te desenvuelves en tiempos normales y de paz no vas a darle respuesta a estos tiempos que son bastantes anormales y de mucha agresión y guerra contra el pueblo venezolano.
-Hablemos de secretos. Antes de la llamada ley antibloqueo, el gobierno negó durante mucho tiempo que Alex Saab fuese contratista del Estado. Y de repente nos despertamos un día en este año 2020, con la información de que Saab es un enviado especial con pasaporte diplomático venezolano en gestiones internacionales. ¿Ese secretismo también es válido?
-Es correcto que se haga todo lo que sea necesario para proteger al pueblo venezolano. Tú me preguntas por el caso de Alex Saab, quiero decirte que su caso me parece injusto, como me parece injusto también lo que le hacen a Chevron, como me parece injusto lo que le hacen a todos los que intentan de alguna manera ayudar a que llegue comida y medicina al pueblo venezolano, e insumos para poner a producir a nuestras refinerías, que estaban afectadas por el propio bloqueo de los Estados Unidos de Norteamérica. Yo quiero decirte que nosotros no podíamos permanecer contemplativos más tiempo de lo que ya hemos estado, y reaccionando simplemente. Entonces, era y es momento de pasar a la ofensiva.
Por cierto, tras las publicaciones en @ArmandoInfo el chavismo se mostró alarmado por la “corrupción opositora”. El jefe de fracción del Psuv, Francisco Torrealba, entre risas, aseguró que estaban dispuestos a investigar a Alex Saab pic.twitter.com/earXTL7ROO
— Roberto Deniz (@robertodeniz) June 17, 2020
-En 2019, usted dijo, cuando se divulgó la investigación sobre las gestiones de diputados a favor de Alex Saab en el extranjero, que el caso debía ser investigado, que no se debería admitir ningún tipo de corrupción, y que había que investigar a todo el mundo, incluyendo al propio Saab. Luego desde el PSUV apoyaron a Luis Parra y ahora defiende que Saab sea considerado un agente del Estado. ¿En qué quedó ese anuncio?
-Nosotros, el bloque parlamentario del PSUV y del Gran Polo Patriótico, mantenemos siempre una línea muy claramente definida de batallar en contra de todos los hechos irregulares y que se sancione a quien corresponda. Nunca hemos protegido ningún tipo de hecho delictivo o de corrupción. Nosotros no vamos a pedir que haya solidaridades automáticas o que se proteja a nadie en particular, siempre vamos a estar de acuerdo con que haya investigaciones. Lo que se investiga en el parlamento es lo que decide la mayoría que se debe investigar. Nosotros planteamos eso y eso no fue investigado. Nosotros planteamos que investiguen eso de cómo fue que el papá del diputado de La Guaira (Juan Guaidó), de ser un asalariado en un país de Europa pasó a ser dueño de grandes propiedades y de líneas de taxi y de todo lo demás que se dice, ¿Qué pasó con los millones de dólares del concierto que supuestamente era para traer solidaridad a Venezuela? Es un robo que han llevado adelante con esa mayoría, y ¿por qué no se han investigado? Porque ellos mismos no han querido investigarse. Nosotros lo planteamos desde el principio, y planteamos incluso que se separaran de la investigación, porque no estaba bien que se autoinvestigaran ellos mismos.
–La Fiscalía anunció que investigaría el caso y tampoco pasó nada. ¿En aquel momento usted sabía que Alex Saab era un agente del gobierno con pasaporte diplomático?
-No, no lo sabía. Es más, no sé si lo era, porque estamos hablando de un momento en el cual no sabíamos de esta situación en la cual se involucra al tantas veces nombrado por ti, ciudadano Alex Saab. Lo que pasó por aquel momento, lo que no se investigó y lo que no se ha investigado hasta ahora, ha sido producto de que la propia mayoría que controla el parlamento nacional no ha querido investigarlo. Nosotros votamos para la elección del diputado Luis Parra como presidente, no siendo de nuestro agrado pero pensamos que cualquiera podía hacerlo mejor que todo el proceso de destrucción que había encabezado durante ese añito el diputado de La Guaira.
-¿Usted es candidato nominal o por lista con el PSUV?
-Soy candidato a la reelección por el PSUV, y por el Gran Polo Patriótico Simón Bolívar también, en el estado Portuguesa, por el circuito número cuatro, que son los municipios de Aragua y Lido Pino, ahí estamos haciendo nuestra campaña sui géneris, porque como esta campaña es con pandemia, hemos tenido que innovar.
-El 6 de diciembre usted sabrá en el estado en el que usted votó cuánta gente pudo respaldar su candidatura. Pero los principales dirigentes del PSUV, Diosdado Cabello, Cilia Flores, etc, van en una llamada lista nacional por la que nadie vota directamente. ¿Por qué no buscan votos directamente?
-Por la lista nacional sí se vota, cuando votas en la lista del estado. Lo que hay es un proceso de simplificación, para que no tengas que votar una vez por la lista nacional, una vez por la vista regional, y una vez por el circuito, si es uninominal, porque hay circuitos de más de una nominación. Aquí lo que vas a hacer es una sumatoria de todos los que voten por la lista en los estados y vas a hacer un cociente nacional, y ese cociente nacional puede expresarse cierta cantidad de diputados o diputadas. Lo bueno es que los electores de nuestro país son informados. Tú lo has mencionado, has dicho quienes están entre los primeros de la lista. Nosotros la vamos a publicar y vamos a hacer que la conozca todo el país, e igual andaremos con la lista en los estados.
-En la Asamblea Constituyente de 1999 William Lara fue quien propuso el artículo 187 constitucional que limita el tamaño del parlamento venezolano. Ahora se aumentó la cantidad de diputados de 167 a 277, en una decisión que no tiene explicación matemática según la fórmula constitucional. ¿Usted tiene claro cuál fue ese criterio matemático? ¿Considera que se irrespeta el planteamiento del entonces constituyente William Lara?
-Bueno, quiero comenzar por decirte que, para mí, toda posibilidad de ampliar los niveles de participación y de garantizar que las expresiones puedan darse dentro del foro político por naturaleza, que es la AN, todo eso es positivo. Yo no voy a entrar a valorar las intervenciones y razonamientos que hizo nuestro compatriota William Lara, que en paz descanse, para aquel momento, pero sí tengo que decir que la dinámica política te impone situaciones muy dinámicas, muy variables, y en medio de todas esas variaciones nos ha traído hasta este punto, donde es de interés nacional y de especial trascendencia que haya una muy buena y amplia participación en el parlamento nacional. Así que, creo que esta decisión que ha tomado el CNE lo posibilita y en razón de eso la respaldo plenamente.
-¿La Constitución no busca justamente dar certezas y plantear reglas de juego que no se vayan moviendo según intereses de la dinámica política?
-Esta situación no está reñida con la Constitución, porque, de hecho, la propia Sala Constitucional emitió opinión en relación a esta decisión del CNE, que yo sí creo que tiene mucha pertinencia política. De manera que todo lo que tiene que ver con un análisis en el cual yo no voy a entrar, que es el crecimiento demográfico de la población, más allá de eso, yo lo que valoro como político que soy es la pertinencia de que en este momento podamos tener un parlamento muy representativo y variado. Aquí estamos muy claro de las reglas del juego. El pueblo venezolano conoce la Constitución, tiene una profunda madurez política, y por eso identifica con claridad sus agresores, y por eso yo creo que va a elegir una nueva mayoría, en este caso en un parlamento que no esté en contra de Venezuela como ha estado durante estos cinco años, como ha estado este pequeño grupo de la derecha radical venezolana.
-El 21 de octubre fue noticia que el papa Francisco habría dicho que estaba de acuerdo con las uniones civiles de parejas del mismo sexo. El chavismo tuvo mayoría calificada en la AN de 2005 a 2010, y luego mayoría absoluta 2010 a 2015. El PSUV nunca ha impulsado esto, ni siendo mayoría ni siendo minoría. ¿Se puede esperar que ese tema, en algún momento, se asuma desde ese partido? ¿Cuál es su posición sobre este tema?
-Dentro de la gran variedad de hombres y mujeres que forman parte de la propuesta electoral del PSUV y del Gran Polo Patriótico Simón Bolívar, hay una importante representación de todos estos sectores que reclaman estas garantías, estos derechos también. Quiero decirte que, aunque este debate no se ha dado en términos formales, es decir, no ha entrado en agenda, no se ha dado una primera discusión, no se ha propuesto una ley que haya entrado por iniciativa parlamentaria al debate, sí se ha discutido, y mucho, entre las distintas bancadas. Yo, en mi aspiración de ser uno de los diputados a partir del 5 de enero del bloque mayoritario, no puedo comprometer a la totalidad de mis colegas en estos debates. Yo estoy ganado para todo lo que sea conquistas, mejoras, beneficios, asumir las realidades y los derechos que tienen quienes no tengan la conducta en término de sexo y diversidad que uno tiene. Yo no veo nada malo, y en lo personal estaría de acuerdo con que se den los debates que sean necesarios
-La oposición que comanda la Asamblea Nacional no va al proceso del 6D y por lo tanto no formará parte del parlamento que usted afirma saldrá de allí. Fuera de ese espacio, se puede buscar puntos de acuerdo con actores con los que se marca tanto antagonismo? ¿Usted ha detectado coincidencias en algunos temas que puedan servir para recuperar el entendimiento político, o está descartado?
-Definitivamente, sí. Yo creo que mis colegas actuales en la oposición, que son mayoría dentro del parlamento, no quieren causarle daño al país como le ha causado el diputado de La Guaira. Creo que sí hay muchas coincidencias que se pueden explotar. Lamentablemente, en este momento el problema es que ese interlocutor, que es muy pequeño pero que es muy dañino, no tiene ni siquiera voz propia, y entonces, probablemente tú no estás hablando con la persona adecuada para alcanzar acuerdos. Por eso nosotros hemos insistido, en más de una oportunidad, en plantearle al propio Donald Trump un diálogo directo, respetuoso, pero directo. ¿Por qué? Muy probablemente el problema mayor para alcanzar acuerdos no sea la oposición, sino un pequeño sector de ella que no tiene otra alternativa que hacerle caso a lo que le ordenan desde el despacho de la Casa Blanca de Washington en los Estados Unidos de Norteamérica.
-¿Dentro del PSUV también hay voces contrapuestas, disidentes, que permitan discusión? Pudiera pensarse que no todo el que forma parte del PSUV asume como única verdad que los migrantes que se van caminando forman parte de una campaña mediática, que todos los problemas son culpa del bloqueo, o que se agreda a PPT, PCV, Redes, Tupamaro.
-Lo que pasa es que una cosa es lo privado, y una cosa es lo secreto. No es secreto que nosotros tenemos discusiones de disidencia y argumentada de forma enérgica y eufórica en algunos casos; algunas se cuelan por ahí al debate interno de la revolución y del PSUV en particular. Pero nosotros tenemos como máxima aquella que nos enseñó el comandante Chávez: ser irreverentes en el debate interno, pero luego disciplinados a la hora de la acción política fuera de las paredes de nuestra organización y de nuestro movimiento. La conclusión que se adopta siempre se asume como general de cara al debate con el que nos adversa políticamente hablando. En la vida de los partidos políticos siempre ha habido debates, no somos la excepción, pero tenemos una cosa muy clara, que es la necesidad de estar monolíticamente unidos para poder seguirle haciendo frente con posibilidades de éxito a estas complejas adversidades que se nos presentan en nuestro país.