Elecciones para la paz democrática, por Marta de la Vega
«La paz no es simplemente la ausencia de conflicto;
la paz es la creación de un entorno
en el que todos podemos prosperar».
Nelson Mandela.
A diferencia del ánimo agresivo, opresor, de la política de desapariciones forzadas de dirigentes políticos opositores al régimen autocrático, de persecuciones y detenciones arbitrarias, de torturas despiadadas a los presos políticos, que no cesan, las fuerzas democráticas organizadas en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), superada la fragmentación política de los partidos para ponerse de acuerdo acerca de la ruta electoral, han logrado impulsar el apoyo de una mayoría, incluso silenciosa en las bases chavistas.
En las multitudinarias manifestaciones que acompañan a María Corina Machado en su visita a distintas regiones, pese a la hegemonía comunicacional de los medios que el Estado somete o controla para impedir que circulen las informaciones, no ha sido posible frenar la emoción, el entusiasmo, la energía a favor del cambio y la esperanza espontánea de muchísima gente en todo el territorio nacional.
Después de días tensos en relación con la escogencia del candidato o candidata presidencial de las mayorías democráticas para enfrentar al oficialismo en las elecciones del 28 de julio de 2024, a causa de la cínica arbitrariedad, inconstitucional e ilegítima de una presunta inhabilitación, inexistente pero impuesta en la práctica contra María Corina Machado, que le impidió inscribirse, al igual que a la candidata propuesta por ella, Corina Yoris, aceptada por unanimidad por todos los partidos que integran la PUD, a la hora casi final del lapso de inscripciones surgió la inesperada candidatura de Manuel Rosales. El actual gobernador del Estado Zulia, se inscribió sin problemas en la tarjeta de Un Nuevo Tiempo, partido político del cual es presidente.
El revuelo fue inmenso. Afortunadamente, prevalecieron el respeto a los ciudadanos y al mandato del 22 de octubre de 2023 sobre intereses partidistas o particulares, conciliábulos secretos o conatos de componendas signadas por el pragmatismo, el populismo y la realpolitik. Puesto que el dirigente zuliano había sido el único no vetado por el régimen, parecía representar la sola posibilidad realista como candidato unitario, aunque nunca pudo obtener ni el consenso ni el apoyo de todas las organizaciones políticas de la plataforma (PUD). Tampoco su liderazgo provenía de las elecciones primarias en las cuales no participó. Además, el nivel de rechazo de Rosales para la población era casi tan alto como el que provoca hoy Nicolás Maduro.
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El 25 de marzo de 2024, el oficialismo vetó como no confiables para el régimen a varios otros dirigentes, por ejemplo, Omar Barboza o Roberto Henríquez, propuestos por la PUD, en vista del bloqueo a Corina Yoris. La súbita prórroga otorgada por el consejo nacional electoral después de conversaciones entre Gerardo Blyde y el gobierno de Maduro, permitió inscribir de manera provisional a Edmundo González Urrutia.
Sin duda el mejor calificado para asegurar la paz en la transición hacia la democracia por su habilidad de conciliación. Profesional honorable, ecuánime, discreto, serio y eficiente en las funciones de servicio público a las que dedicó buena parte de su trayectoria en relaciones internacionales, ha mantenido un bajo perfil en el plano político y académico.
A pesar de sus logros y publicaciones, para muchos era un ilustre desconocido. Tal vez por ello no hubo ninguna objeción del madurismo. Fue coordinador del Grupo Ávila hasta 2022, que ha sido un referente respetado en el campo de política exterior, fundado en 2005 por iniciativa del senador Pedro Pablo Aguilar; se ha destacado como diplomático de carrera, competente en negociaciones de alto calibre y directivo durante varios años de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Fue escogido por unanimidad en la tarjeta de la Unidad de la PUD, «la de la manito», para preservar el puesto, es decir, la opción de un candidato para competir en las elecciones presidenciales.
La Plataforma Unitaria no hallaba solución al dilema de nombrar a Rosales como candidato presidencial; este anunció su propósito de poner a disposición de la Unidad su candidatura y la tarjeta de su partido. Dirigentes políticos y ciudadanos le pedían que honrara su palabra para destrancar el juego. Gracias a su desprendimiento y a sucesivas deliberaciones de los integrantes de la Plataforma Unitaria en sesión permanente, con el apoyo decidido de María Corina Machado y el respaldo de organizaciones de la sociedad civil, le plantearon a Edmundo González Urrutia que aceptara en firme la candidatura para la presidencia de la república.
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«Edmundo para todo el mundo»
Al aceptar esta responsabilidad como un inmenso honor para él y un compromiso a favor de la democracia, «un hombre que se ha ganado el corazón de la gente», en palabras de Nora Bracho, se ha convertido en «Edmundo para todo el mundo». Dado que constitucionalmente el nuevo gobierno toma posesión en enero de 2025 aunque las elecciones hayan sido fijadas para el 28 de julio de 2024, como afirmaba González a Emilio Figueredo el 2 de mayo entre las múltiples entrevistas que ha tenido: «Es necesaria una negociación para una transición pacífica del poder, sin traumas, sin incertidumbres, con garantías recíprocas, con normalidad y tranquilidad, de lado y lado». Y agrega, «por un lado, que se respeten los resultados y, por otro lado, que se respete la conformación de los cuadros que van a dirigir el país en los próximos años».
De ser electo presidente de la República sintetiza su aspiración en una frase: «Las garantías de una transición pacífica, que conduzca a un mejor país, donde se respete el Estado de derecho, donde se den garantías para todos por igual, se inicie un proceso de recuperación económica y de reinstitucionalización». La Unidad ha salido fortalecida al aglutinar una voz unánime alrededor del candidato presidencial, enlazado al liderazgo indiscutible de María Corina Machado, que ganó, con la elección primaria, por la fuerza avasallante de las mayorías que pudieron participar el 22 de octubre de 2023.
Para un clima de reconciliación nacional y gobernabilidad en el futuro, precisa Edmundo González, la Constitución cuenta con varios mecanismos de reformas que se pueden aplicar desde el inicio, «en ese período muy complicado de transición con un gobierno que se ha mantenido 25 años en el poder, para conciliar, sin revanchas; un lapso de pacificación y normalización institucional, de reencuentro de toda la gran familia de los venezolanos». Concluye: «Se trata de construir un país en paz, donde quepamos todos». Sin duda nuestro candidato unitario ha sido la mejor opción.