Elliott Abrams critica a Capriles y espera que Alex Saab y Hugo Carvajal den datos a EEUU
Abrams cree que EEUU pudo haber hecho más para poder lograr un cambio de Gobierno en Venezuela y dijo que Trump se negó a usar la fuerza
Elliot Abrams, quien fue el el encargado especial del Gobierno de EEUU para los asuntos de Venezuela e Irán, aseguró que el empresario colombiano Alex Saab y el ex director de inteligencia venezolano Hugo «El Pollo» Carvajal, «saben mucho» sobre las finanzas de la administración de Maduro y de la familia del mandatario.
A su juicio, ambos manejan informaciones sobre temas polémicos que han sido cuestionados durante meses como los acuerdos con Turquía -donde el tema de los alimentos CLAP sale a relucir, sobre la venta del oro venezolano y sobre Irán, némesis del Gobierno de EEUU y uno de los aliados de Venezuela.
Resaltó que si bien Nicolás Maduro «ha tenido suficiente tiempo para mover cuentas bancarias», cuando Saab y Carvajal estén en manos de la justicia estadounidense podrán «revelar bastante», ya que confían en que conocen muchos secretos sobre los últimos 20 años del poder en nuestro país.
“No creo que ellos podrían decir ‘ve a este banco y allí encontrarás esta cuenta’, pero si alguien hubiera violado las sanciones de Estados Unidos hace un año, seguiría siendo un crimen. Entonces, si sabemos qué pasó el año pasado o el antepasado podremos acusar a personas, que podrían ser tratadas criminalmente por esa actividad y sabremos más sobre adónde fue el oro en el medio oriente”, expuso en entrevista concedida para EVTV la noche del lunes 13 de septiembre.
Para Elliott Abrams, las negociaciones que se están celebrando en México fue una decisión que tomó la oposición venezolana ya que, a pesar de la llegada del presidente Biden al poder, no ha modificado el esquema de sanciones que pesan sobre funcionarios y empresas estatales venezolanas.
Esta decisión fue motivada porque entendieron que EEUU no iba a ejecutar una intervención y ante la imposibilidad de soliviantar a los cuarteles en contra de Maduro. Opinó que en el seno de la oposición consideraron qué cosas podrían pasar en las elecciones regionales de 2021 y en unas presidenciales. «Creo que sentían presión por las cabezas de los partidos políticos locales y estatales que les decían ‘queremos ser candidatos y queremos participar en estas elecciones».
Cree que los sectores de oposición «estaban viendo a (Josep) Borrell en Europa jugando con Capriles y Maduro. También estaban viendo a Biden y decir que (Donald) Trump no utilizó a los militares, Biden nunca lo haría. Y estaban viendo el hecho de que quizás por covid-19, las calles estaban calladas (…) Entonces ¿Cuál es la mejor opción?».
Para Abrams, Capriles es un elemento disruptivo
Al ser preguntado sobre el exgobernador del estado Miranda Henrique Capriles, Abrams dijo ser crítico en torno a su figura porque considera que fue el causante de la ruptura de la unidad opositora tras más de un año de cohesión entre la mayoría de las fuerzas políticas que adversan a Maduro a lo interno.
“Cuando tomé la posición de representante especial en enero de 2019 todos decían que la oposición venezolana estaría desunida, peleándose entre sí, que era cuestión de dos semanas. No fue verdad, se mantuvieron hasta la mitad del 2020 completamente unidos hasta que Capriles decidió romper esa unión”, manifestó.
Por ello, sugiere que el posible papel de Capriles en debilitar el frente opositor y en ese sentido, lo califica de «error». Sin embargo, asegura que una de las ventajas que se tienen en las negociaciones de México es que está por un lado, el presidente de la Asamblea Nacional electa en diciembre en 2020, y Gerardo Blyde por el otro, «el real representante de (Juan) Guaidó y de esos partidos. No de Capriles. Entonces eso puso el viejo liderazgo de nuevo y creo que fue una derrota para Borrell y para Capriles.
A lo que hace referencia Abrams es al cambio de postura que Henrique Capriles propició y que fue un punto de distanciamiento con el sector de la oposición, al que se sumó entonces Stalin González. Ya desde enero de 2021 se venía marcando esa tendencia con un artículo que escribió para el diario El País donde se le pedía a quienes adversaran a Maduro a dejar a un lado la retórica y definir una agenda real que permita hacer hacer frente a las políticas del gobierno.
En dicho artículo, Capriles aseveró que Venezuela inició ese año con un vacío gigantesco y que la ciudadanía estaba sintiendo que la oposición se había convertido “en una confusa mezcla que genera una incertidumbre que solo le conviene a quienes tienen el poder”, ya que además se venia de una nueva consulta popular en diciembre que no tuvo los efectos deseados por parte de la oposición.
Además, es conocido que Henrique Capriles colaboró en la amnistía que el Ejecutivo venezolano concedió a más de 100 presos políticos en el país en aras de mejorar las condiciones. En octubre de 2020, cercana a esa acción del Gobierno de Maduro, el exgobernador había dicho que iría a unas elecciones parlamentarias -cosa que no cumplió-.
Este escenario permitió al Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, quien también es impulsor del Grupo Internacional de Contacto, decir que había una «ventana de oportunidad» para la realización de los comicios parlamentarios y de acompañar las elecciones, aunque dijo estar consciente que en el país no existen las condiciones para llevar a cabo un evento de tal envergadura.
El diario ABC publicó el 23 de septiembre que Josep Borrell envió una misión a Venezuela para intentar negociar con Maduro aplazar las elecciones legislativas unos seis meses. Antes de ello, el medio afirma que sostuvo una reunión con el presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez -de quien fue su canciller- para luego despachar a sus enviados.
Papel de EEUU
Por otro lado, Elliott Abrams cree que es necesario que EEUU acompañe y brinde apoyo a la oposición venezolana si bien Maduro tiene a los rusos sentados en la mesa de negociación.
Señaló que Países Bajos es un gran partidario de la democracia, pero hubiera preferido que Estados Unidos estuviese presente en la negociación.
“Respetábamos a Guaidó como presidente interino y nosotros hicimos un plan de transición que planteaba un gobierno de coalición, amnistía, una representación de los militares en ese gobierno de coalición. Creo que nunca hubo un cambio de visión, el problema fundamental es que Venezuela tiene a Rusia, China, Cuba, Irán y Turquía protegiendo y ayudando a Maduro y esa es una gran diferencia”, dijo.
Comentó también que el expresidente Donald Trump fue «muy cuidadoso con el uso de la fuerza» en Venezuela y en un punto tomó la decisión de no usarla para propiciar un cambio de Gobierno.
«Todos queríamos que Maduro se fuera, aún lo queremos fuera. Pero el presidente Trump tomó la decisión de no usar la fuerza en Venezuela. Creo que la mayor influencia en ello no fue el Departamento de Estado, sino los militares estadounidenses», destacó.
Abrams expresó que desde EEUU no se hizo lo suficiente para sacar a Maduro del poder y cree que los militares de la Fuerza Armada Nacional no le han quitado su respaldo porque «este no es un régimen militar, es un régimen criminal, y todas las personas involucradas, incluyendo los generales están involucradas en actividades criminales traficando droga, trabajando con la FARC, traficando el oro y personas. Tienen miedo de dejar el poder», dijo.
Aseveró que sí se gestará un cambio en Venezuela, pero advierte que el mismo puede ser más expedito si EEUU «es más activo en la coalición de las democracias».
«En estos nueve meses como presidente, Biden no ha hablado realmente sobre Venezuela. A mí me gustaría ver más actividad en la Casa Blanca y en el Departamento de Estado», indicó.
En ese sentido, explicó que «hay una teoría que quizás es verdad y es que miran a Venezuela y dicen Maduro está allí y se quedará por ahora (…) pero creo que eso es un error, porque Maduro no será presidente toda la vida. Venezuela no será una dictadura de 50 años, el cambio vendrá y será más rápido si EEUU. es más activo en la coalición de las democracias».
«Si Maduro se retira del poder puede haber una amnistía (…) el regreso de la democracia a Venezuela incluiría algún tipo de amnistía pero no creo que esto debe ser parte de esta negociación porque no hay retorno de la democracia. Esto se debe negociar cuando Maduro se retire y pierda su inmunidad presidencial», puntualizó.