Encovi presentó propuestas para disminuir la pobreza que en el año pasado aumentó a 51,9%
Encovi encontró que la vulnerabilidad social afectó el año pasado a seis de cada 10 hogares venezolanos, que la mayoría de los venezolanos no pueden costear la canasta alimentaria y que 78% de la vulnerabilidad moderada o severa se concentra en 30% más pobre del país
La Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi) de 2023 fue presentada este miércoles 13 de marzo por el Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (IIES) de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), en la que se encontró que «la pobreza multidimensional aumentó a 51,9%» durante el año pasado. Esta cifra representa un incremento de 1,4% con respecto al año anterior.
Por siete años consecutivos (desde 2014 hasta 2021) en el país se había reportado un incremento de los índices de pobreza, pero en 2022 se encontró una disminución de la pobreza, pasando de 65,2% a 50,5%.
El estudio que lleva por nombre «Encovi 2023: radiografía la vulnerabilidad social de Venezuela y propuestas de políticas públicas» también presentó propuestas para superar la vulnerabilidad y desigualdad. Anitza Freitez, directora e investigadora de IIES, y Luis Pedro España, investigador, fueron los encargados de presentar el estudio que se realizó tras consultar 12.683 hogares en todo el país.
En la Encovi se indicó que 82,8% de los hogares venezolanos está en la categoría de pobres por ingresos, que significa que no tuvieron el dinero suficiente para adquirir la canasta básica. Los datos de la pobreza multidimensional, que ascendió a 51,9%, se relacionó con condiciones de la vivienda, servicios públicos, protección social, trabajo y educación.
La mitad de la población está en pobreza extrema, que son los que no pueden costear la canasta alimentaria.
El profesor Luis Pedro España explicó que la vulnerabilidad es mayor donde condiciones como servicios básicos (agua, electricidad y saneamiento, problemas de salud y nutrición) son más difíciles de cambiar desde el ingreso económico de las familias.
Seguridad alimentaria y desigualdad
El profesor Luis Pedro España dijo que tras la eliminación de los controles, la reducción de la hiperinflación y la mejora en la distribución de los alimentos encontraron que la seguridad alimentaria mejoró, aunque persisten problemas.
España dijo que «quedan focos territoriales y de estratos, que alcanza aproximadamente un tercio del país, donde la inseguridad alimentaria moderada y severa sigue estando presente».
Los datos específicos arrojaron que 46,9% de los consultados dijo haber comido menos, 45,8% se quedó sin alimentos, 32,3% tuvo que dejar de hacer una comida al día, 32,3% sintió hambre pero no comió y 12,2% estuvo sin comer todo el día.
También reportaron una reducción de la desigualdad económica. El coeficiente de Gini, indicador que mide la concentración de ingresos entre los habitantes, disminuyó 9,1 puntos, al pasar de 60,3 en 2022 a 51,2 en 2023.
Sin embargo, el estudio de Encovi advirtió que aunque más venezolanos tengan acceso a ingresos, el país sigue siendo desigual y propuso tomar medidas estructurales para que se vayan superando estos niveles que siguen siendo muy altos.
España explicó que la desigualdad en los estados incide en las condiciones de pobreza y la vulnerabilidad. Añadió que 2,1 millones de personas se han mudado internamente en el país y aseguró «Caracas y San Cristóbal son las ciudades con menor vulnerabilidad social, mientras que Maracaibo y Maturín son las que tienen hogares más vulnerables».
Las entidades que más gente expulsan son Monagas, Falcón y Guárico.
Propuestas para avanzar
En este oportunidad, Encovi hizo una serie de recomendaciones de políticas públicas para construir un camino de soluciones, algunas están relacionadas con la inclusión de las mujeres en el campo laboral y aumentar la permanencia de los jóvenes en los centros de formación. Para los jóvenes también se propone desarrollar políticas para el primer empleo.
En el entorno comunitario, destaca la apertura al mercado de generación de energía y servicios públicos e inversión en movilidad interurbana.
Según los resultados de la Encovi se debe redefinir la política social completamente, cambiando las asignaciones de las transferencias monetarias y la distribución de alimentos. Cree necesario crear un registro moderno de información social para intervenir sobre los hogares más vulnerables.
En cuanto a los servicios sociales plantean eliminar el horario mosaico y reducir el gasto bolsillo en salud.
De la misma manera, los investigadores de la Encuesta de Condiciones de Vida piden una actuación coordinada sobre las áreas geográficas más vulnerables que son las fronteras y las comunidades indígenas, con la participación de agencias internacionales y nacionales que atienden las zonas con emergencia humanitaria; así como alinear los esfuerzos de los organismos internacionales con las políticas gubernamentales.