ENTREVISTA | Cruce ilegal de venezolanos a EEUU se redujo en 90% en los últimos meses
Luis Miranda, subsecretario adjunto principal de Comunicaciones del Departamento de Seguridad Nacional de los EEUU, conversó con TalCual sobre la dismunción en la cifra de cruces ilegales hacia ese país, las vías legales que existen para que los migrantes puedan llegar a Estados Unidos y también se refirió a la presencia del Tren de Aragua en Norteamérica
El presidente de los Estados Unidos (EEUU), Joe Biden, firmó el pasado mes de junio una orden ejecutiva para restringir las solicitudes de asilo en la frontera con México, una medida migratoria calificada como dura y que permite a las autoridades deportar a quienes no cumplan con estrictos estándares de asilo cuando la cifra exceda las 2.500 detenciones diarias en un lapso de siete días, pero este número no había disminuido para ese entonces de 4.000 aprehensiones por día durante 2024.
Sin embargo, a tres meses de haberse implementado la orden se han observado los resultados positivos para el país, pues en las últimas semanas, las cifras de migrantes que cruzan ilegalmente a los EEUU han mostrado una tendencia a la baja, de acuerdo con los reportes de las autoridades fronterizas estadounidenses.
En entrevista con TalCual, Luis Miranda, subsecretario adjunto principal de Comunicaciones del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés), afirmó que el número de migrantes por pasos irregulares a esta nación ha disminuido en más de 50% y destaca que el cruce de venezolanos entre los meses de julio y agosto de este año ha decrecido en 90% con respecto a mayo de 2024.
Estados Unidos recuerda que existen programas que ofrecen la oportunidad a ciudadanos de distintas nacionales para ingresar por vías legales a este territorio y recuerda los peligros que existen al tomar rutas clandestinas como la selva del Darién, donde no solo hay amenazas naturales, sino que existen bandas organizadas que se aprovechan de la vulnerabilidad de los migrantes.
Luis Miranda fue asistente al Comisionado de Relaciones Públicas de la Oficina de Protección Fronteriza y además se desempeñó como coordinador oficial de asuntos externos en la frontera sur del Departamento de Seguridad Nacional. Ha trabajado en cinco campañas electorales y formó parte de la oficina de Comunicaciones del expresidente Barack Obama entre 2009 y 2013.
—¿En cuánto ha disminuido la cifra de cruces ilegales a Estados Unidos desde la aplicación de la medida para restringir las solicitudes de asilo en la frontera con México? ¿Cuál es la cifra de personas que ha recibido asilo y la cantidad de deportados por nacionalidades?
—Desde que comenzamos con las restricciones en junio hemos podido reducir los cruces ilegales entre los puertos de entrada por más del 50% y muchísimo más si miramos lo que eran las cifras muy elevadas que estábamos viendo en diciembre. Para darte un ejemplo, con los venezolanos, en diciembre habíamos visto 46.918 cruzando ilegalmente; en julio y agosto fueron un poquito más de 600. Es una cifra increíblemente disminuida, incluso desde mayo, habían cruzado ilegalmente 6.570 y hemos visto una reducción muy fuerte de venezolanos, pero también de otras nacionalidades para un descenso de más de 50%.
También estamos haciendo lo que son devoluciones rápidas, gracias a que bajo la proclama y la orden, podemos poner a las personas en procesos de deportación acelerada mucho más fácil y hemos devuelto desde el 5 de junio al 10 de septiembre más de 131.000 individuos a más de 140 países; no te tengo la (data) país por país pero podemos deportar personas a sus propios países o a terceros países. México desde hace más de un año ha estado recibiendo ciudadanos venezolanos, cubanos, haitianos y nicaragüenses, que cruzan ilegalmente.
Nosotros estamos con la expansión de las vías legales, ofreciendo muchas oportunidades, así que no debería ser necesario cruzar ilegalmente.
—Sobre las deportaciones, los venezolanos son devueltos a México desde Estados Unidos porque las relaciones están rotas entre estos países (Venezuela y EEUU), pero México tampoco está haciendo devoluciones de venezolanos, entonces, ¿no se genera un embudo en este país con la cantidad de venezolanos, siendo el mayor número que ha estado cruzando por la selva del Darién?
—La realidad es que hay muchísimos países que le han dado la bienvenida a venezolanos. Colombia, que ha tomado más de dos millones y medio quizás casi tres millones de venezolanos, pero muchos otros países les han dado también la oportunidad de normalización. De hecho, las oficinas de movilidad segura que hemos establecido en varios países son para ayudar a la gente a encontrar dónde tienen esas oportunidades; entonces no es que sea un embudo porque hay embudos a lo largo del hemisferio y la realidad es que hay puntos en donde se les está dando oportunidad de normalización de estatus o de un estatus temporario.
Con el programa que tenemos de parole humanitario, (que) es un proceso en el que pueden viajar de donde estén y por avión, no tienen que estar cruzando de un país a otro ilegalmente.
—¿Están conscientes que tras las elecciones en Venezuela y toda la situación y los conflictos que se han generado puede haber una nueva ola migratoria en las próximas semanas y en los próximos meses? Incluso, ya se ha comenzado a ver que miles de venezolanos están saliendo por distintas fronteras y que muchos de ellos están tomando la ruta del Darién con la idea de llegar a Estados Unidos. Entonces, ¿cómo se ha preparado Estados Unidos para esto? ¿Qué medidas han tomado?
—Es importante que la gente sepa que el camino por el Darién es muy peligroso y que no se justifica. Estuvimos en Colombia hace pocas semanas para una reunión trilateral entre Colombia, Panamá y Estados Unidos en la que Colombia y Panamá estuvieron de acuerdo en afianzar lo que es su presencia en sus fronteras compartidas, mejorar la presencia de Estado y endurecer lo que es el proceso contra los grupos criminales, precisamente porque la gente que está explotando a los migrantes no les está diciendo la verdad sobre los peligros que hay cruzando el Darién: hacen parecer en redes sociales que es muy fácil y la realidad es que es un camino muy peligroso, entonces hay esfuerzos entre esos países para reducir eso (la presencia de grupos criminales).
Hemos puesto también sanciones en contra de las personas que operan los ferris (transporte acuático) que llevan a las personas de Colombia al Darién. Realmente tenemos un conjunto de actividades que ya estaban en pie incluso antes de las elecciones.
También hay que recordar que la migración de Venezuela no es nada nuevo. Sería difícil no estar preparados en este momento cuando hemos estado viviendo lo que son millones de venezolanos saliendo de su país y no solo aquí en Estados Unidos sino también en todo el hemisferio, como lo decía, Colombia que ha recibido casi tres millones (de migrantes venezolanos) y muchos otros países que han recibido muchísimos venezolanos. Entonces, tenemos muchos mecanismos, sean los de la aplicación de ley, Panamá está haciendo vuelos de devolución a varios países en un programa en el que nosotros también les estamos ayudando con lo que es logística y asesoramiento, pero es un programa de ellos.
Lo que estamos viendo es que hay consecuencias por cruzar irregularmente y no tener una base legal para permanecer en varios países. También necesitamos comunicar esa información, por eso esta comunicación contigo, en las redes, que la gente sepa dónde buscar fuentes oficiales: todo eso es importante para poder comunicar eso; pero que estemos preparados, eso ya viene desde varios años que estamos haciendo distintos esfuerzos para reducir esa migración y para expandir vías legales.
—Hablaba usted del parole humanitario y veíamos que hace aproximadamente un mes se había paralizado el proceso porque se habían detectado ciertas irregularidades, quería saber si ya se había retomado el proceso y consultarle, ya que se van a cumplir los dos años de los primeros beneficiarios en el que ellos tienen que regularizar su situación para permanecer en Estados Unidos, ¿se maneja la cifra de cuántos se han regularizado y si ya se retomó nuevamente el proceso?
—La cifra de venezolanos que han llegado con el proceso de parole humanitario hasta agosto son casi 121.000 venezolanos, que han sido autorizados para viajar y casi 117.000 ya han llegado legalmente. Es un ejemplo de que ha funcionado muy bien ese proceso.
Tuvimos una pausa breve para analizar algunas irregularidades, pero es importante que la gente también reconozca que fueron pocas y que tenían que ver más que todo con los patrocinadores y es un buen recordatorio que la gente debe tener, que no deben creerle a personas que les prometen ser patrocinadores y que les están cobrando o cometiendo algún otro tipo de fraude o que estén tratando de aprovecharse de ellos; eso es mucho de lo que se reporta en las redes y por noticieros locales que dicen que eso está sucediendo.
Es importante que la gente sepa que eso no es el programa: el proceso de parole humanitario es un proceso que inicia con un patrocinador y que luego se alinea con las personas que va a patrocinar, pero no es algo en el que nadie les debe estar cobrando o abusando de ellos.
Hemos reanudado el proceso hace un par de semanas y es un proceso que ha funcionado muy bien.
—En EEUU se han anunciado operativos contra integrantes de la banda delictiva Tren de Aragua y esta semana Nicolás Maduro dijo que el líder de esta, Héctor Guerrero, conocido como el «Niño Guerrero», trabaja para la CIA y la oposición y que buscan dar un golpe de Estado, ¿qué responder a esta afirmación? ¿Han encarcelado a personas de este grupo?
—Yo no le respondería a Nicolás Maduro pues no es mi lugar, le dejo esas comunicaciones de país a país a mis colegas del Departamento de Estado.
Nosotros estamos, por supuesto, analizando y hemos afianzado lo que son los análisis de las personas que están llegando a nuestras fronteras para determinar si posiblemente son miembros del Tren de Aragua y hemos afianzado los mecanismos para que personas que sean identificadas con afiliación a esa pandilla sean detenidos y procesados por otras agencias federales con los cargos criminales que sean necesarios o para poderlos poner en un proceso de deportación acelerada, eso es lo que estamos haciendo, además de trabajar con nuestros colegas de otras agencias tanto federales, como estatales y locales de ley para identificar posibles miembros que estén dentro del país.
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