ENTREVISTA | «Wingo quiere impulsar el tráfico de turistas colombianos hacia Venezuela»
La reactivación de Wingo en Venezuela va con todo, así lo afirma la aerolínea colombiana. Aunque los planes de expansión de la empresa como otras líneas aéreas están supeditados a la hoja de ruta de reactivación de operaciones, definida por las autoridades de ambos países, existe una perspectiva positiva sobre el mercado binacional. Jorge Jiménez, vicepresidente Comercial y de Planificación de Wingo, indica que tienen buenas expectativas con las rutas entre Medellín y Barranquilla con Caracas y, Bogotá con Valencia y Maracaibo, una vez que reciban la autorización
Las líneas aéreas internacionales llegan a Venezuela para seguir analizando el mercado local y para impulsar sus planes de expansión. En esta oportunidad, representantes de la aerolínea colombiana Wingo visitaron recientemente el país con miras a consolidar las próximas rutas que permitirán la conexión entre varias ciudades y, así alcanzar la meta de movilizar 50.000 pasajeros en el período de un año.
Jorge Jiménez, vicepresidente Comercial y de Planificación de Wingo, señaló a TalCual que la empresa evalúa en forma permanente la demanda y características comunes entre Colombia y Venezuela, luego de la reactivación comercial entre ambos países. Sostuvo que la nación venezolana siempre ha sido una plaza clave para la empresa, por lo que prevén contar con nuevas rutas como Barranquilla y Medellín para conectar con Caracas, así como a Valencia y Maracaibo con Bogotá.
Aunque el tráfico aéreo entre ambas naciones es más por razones familiares, Wingo quiere impulsar el traslado aéreo de turistas colombianos hacia las zonas turísticas venezolanas. «Margarita, Los Roques y Canaima son atractivos para los consumidores colombianos y creemos que ahí tenemos un trabajo para profundizar».
Al ser consultado sobre las expectativas de la aerolínea en el futuro a corto y mediano plazo en Venezuela, dado los acontecimientos políticos y económicos tras la flexibilización de las sanciones de Estados Unidos, Jiménez afirmó que confían en que continúe la reactivación económica del país y que la empresa se adaptará a las circunstancias.
«Operamos a 11 países de Latinoamérica y hemos pasado por muchos problemas internos, es pan de cada día, y es por ello que sabemos operar en escenarios adversos», dijo.
Adaptarse a los mercados
Wingo nació en el año 2016 como la opción de bajo costo o low cost de Copa Holding (dueña de Copa Airlines), «y llevamos siete años de una historia exitosa de un modelo de negocio que a la gente le ha gustado», acotó su Vicepresidente Comercial y de Planificación. En Venezuela empezó a operar la ruta Bogotá-Caracas en 2017 y fue la última línea aérea en dejar de operar en el país al decretarse la cuarentena por la pandemia del covid-19.
-¿Cómo evalúan la situación económica de Venezuela y las expectativas de la empresa sobre el país para seguir operando?
-Desde el punto de vista económico, creemos que la reactivación de las relaciones comerciales entre Venezuela y Colombia generará mejoras en el comercio binacional. Las exportaciones se esperan terminen este año en 500 millones de dólares y nuestra apuesta es que siga creciendo, así que de mano con el crecimiento del Producto Interno Bruto venezolano, aumentarán las exportaciones e importaciones de ambas naciones. Esto a su vez hará que crezca el tejido empresarial, empezará a aumentar el empleo y redundará en el sector aéreo también.
Por otra parte, está el turismo colombiano hacia Venezuela que es algo que nosotros queremos explorar y creemos que hay muchas oportunidades turísticas en este país. Somos (Colombia) un país de 50 millones de habitantes y tenemos la posibilidad de crear tráfico hacia Venezuela a través del turismo. Ustedes tienen un producto turístico de calidad. Margarita, Los Roques y Canaima son atractivos para los consumidores colombianos y creemos que ahí tenemos un trabajo para profundizar. Nos queda la misión como marca de ayudar junto a los gobiernos a construir confianza en el sector turístico.
-¿Hay interés de ciudadanos colombianos en venir a Venezuela como turistas?
-En este momento no existe y ese es el gran trabajo que todos debemos hacer, entre los medios, la empresa privada, gobiernos. Tenemos que quitarle el miedo a los colombianos de venir a Venezuela, que sepa que es un país que tiene mucho por dar y que tiene oferta para todo tipo de necesidades y de gustos. Los colombianos vienen más por razones familiares, lo que llamamos en el segmento de la industria «Visitar familiares y amigos», es lo que se está moviendo en este mercado.
-¿Cómo prevé lidiar la empresa con la incertidumbre que genera la situación política?
-La aviación es una industria muy difícil porque todos los acontecimientos culturales, políticos, sociales, económicos, nos afecta; si hay una protesta o una huelga en un ciudad nos afecta, porque los viajeros no llegan; si hay un problema político entonces la demanda se disminuye y toca ajustar la capacidad; si hay un problema económico puede que no nos compren o nos compran en otra moneda, lo que quiero decir con esto es que somos una aerolínea que sabe hacer negocios en geografías con dificultades. Como aerolínea nos adaptamos a cada uno de los mercados en donde operamos y al final de cuenta es nuestra misión: adaptarnos a los mercados.
Operamos a 11 países de Latinoamérica y hemos pasado por muchos problemas internos, es pan de cada día, y es por ello que sabemos operar en escenarios adversos.
-¿Cuáles son las perspectivas de Wingo en cuanto sus operaciones en el país?
-Las perspectivas de Wingo con Venezuela están enfocadas en asegurar la capacidad que hay en la ruta Bogotá-Caracas de tres frecuencias semanales, y crecer a una cuarta frecuencia, la cual esperamos ocurra en las próximas semanas una vez que las autoridades aeronáuticas de ambos países lo autoricen. Estamos a la expectactiva de más operaciones.
Estamos concentrándonos en nuestros 122 vuelos que esperamos tener hasta marzo de 2024 con la movilización de 50 mil pasajeros, y en la próxima temporada alta de diciembre y enero.
En segundo punto, esperamos tener rutas nuevas hacia Bogotá desde Venezuela, esas serían Valencia-Bogotá y Maracaibo-Bogotá. Estas dos rutas están solicitadas y estamos a la espera de su aprobación. También tenemos planteado conectar Caracas con otras ciudades de Colombia: Barranquilla y Medellín.
De los 3 millones de ciudadanos venezolanos en Colombia, Barranquilla es la tercera ciudad donde viven más venezolanos, después de Bogotá y Cúcuta, por lo que es una oportunidad muy interesante para conectar a los dos países.
Precios competitivos
Hasta la fecha, hay varias líneas aéreas venezolanos viajando a Colombia (Laser y Turpial); mientras que del lado colombiano Wingo y ahora Latam. Avianca la empresa aeronáutica más grande de ese país aún no ha mostrado interés en operar territorio venezolano. Jorge Jiménez, vicepresidente Comercial y de Planificación de Wingo, cree que sí se llega a cabo el ingreso de Avianca no perturbará los planes de Wingo.
Wingo conecta desde el Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá con el Aeropuerto Internacional de Maiquetía, con tres frecuencias a la semana (martes, jueves y sábados), con tarifas que inician en los 167 dólares. Esto se considera un precio competitivo dadas las actuales circunstancias económicas de Venezuela donde aún la demanda de bienes y servicios tiene dificultades para crecer.
Recientemente, la aerolínea estatal colombiana Satena decidió suspender operaciones en la ruta Bogotá-Caracas-Bogotá, y en su caso, Wingo firmó un acuerdo de protección con dicha compañía aérea con el fin de transportar a los pasajeros que habían optado para sus servicios en dicha ruta. Este acuerdo de protección cobijará los vuelos de octubre, noviembre y diciembre de 2023.
Jorge Jiménez recalcó que Wingo firmó un acuerdo de protección con aquellos pasajeros a los que la empresa estatal le habían vendido boletos de octubre a diciembre de este año para brindarles transporte. «Es decir, personas que hayan comprado pasajes en Satena que necesiten moverse a Wingo lo deben hacer a través de Satena».
-Son una aerolínea de bajo costo, ¿en Venezuela serían la empresa con boletos más accesibles y esto los ha ayudado a tener una buena demanda en el país?
-Somos una aerolínea de ultra bajo costo y Wingo es una empresa de Copa Holding, uno de los grupos aeronáuticos más sólidos de América Latina, y ser una línea de bajo costo nos permite dos cosas. Primero, ofrecer el más bajo costo de tarifas desde 167 dólares; y dos, la posibilidad de personalizar el viaje, es decir, que el pasajero puede elegir si quieren llevar mascotas, si quieren llevar una a tres maletas, si quieren precomprar lo que van a recibir a bordo. Damos el beneficio y el diferencial del modelo de bajo costo y cada viajero diseña el viaje de acuerdo a su necesidad.
-¿Han llevado a cabo mejoras en el sistema de venta de boletos, qué los diferencia de las grandes empresas?
-Tenemos dentro de nuestro modelo de negocio cuatro pilares: precios bajos, seguridad, puntualidad y buena onda. Dentro de buena onda somos la aerolínea con más flexibilidad en la región y esto apunta a que es la única empresa que permite cambiar de vuelo sin cobro de penalidad hasta 14 días antes del viaje. Adicionalmente, la aerolínea permite con previo pago, cambiar de nombre el boleto, es decir, tenemos un producto flexible. No requerimos de hacer tantos cambios a nuestro sistema de venta. La compra de los boletos en Wingo es en dólares o pesos colombianos a través de su página web.
-¿Creen que Avianca les quite mercado en caso de comenzar a operar hacia Venezuela?
-Nos gusta la competencia, somos bastante confiados en nuestro producto, creemos que es consistente, sólido y que le gusta a la gente, por lo que si entran otras aerolíneas nuestra misión es defender el mercado y ganarnos el favoritismo de los viajeros. Avianca operó esta ruta tal vez hasta el año 2019, es algo que puede pasar, pero nos pasa en todos los mercados, que entren y salgan aerolíneas.
-¿Qué tipo de aviones están volando hacia Venezuela?
-Wingo usa aeronaves Boeing 737 con capacidad para 186 pasajeros. No tenemos planeado por ahora incrementar el número de aviones, pero nuestro proceso de planeación parte de las oportunidades y en la medida que se ocurra crecemos la flota. Si logramos crecer en otras ciudades en Venezuela como estamos pensando y tenemos la aprobación de las autoridades, pues detrás de eso vendría nuevas flotas.
Los factores de ocupación de la ruta Bogotá-Caracas están en estos momentos entre 80% y 85%, lo que consideramos un resultado bastante saludable para una aerolínea de bajo costo, pero por supuesto hay 15% de más espacio para llenar; ha sido positiva la respuesta de la ruta y prueba de ello es este factor de ocupación.
-¿Cómo evalúan la infraestructura aeroportuaria venezolana y el tema de seguridad de los aeropuertos locales y en todo caso Maiquetía donde están llegando actualmente?
-Hasta el momento desde el punto de vista comercial más no operativo, hemos podido operar de manera continua sin ningún contratiempo o problema, por supuesto, siempre hay posibilidades de mejoras en los aeropuertos y ahora estamos operando de manera correcta.
-¿Cómo ha sido la relación con las autoridades venezolanas?
-Es una relación cordial, abierta. Las dos autoridades tanto el INAC (Instituto Nacional de Aeronáutica Civil) en Venezuela como la Aeronáutica Civil en Colombia, tienen una comunicación fluida. Sin embargo, debo decir que en el momento en el que estamos es extraño porque hay una hoja de ruta que no es muy clara, en estos momentos hay tres aerolíneas y acaban de anunciar una cuarta volando entre Colombia y Venezuela con tres frecuencias cada una, pero creo que se requiere acelerar la conectividad y en términos de rutas es imperativo que las tengamos y dependemos de los gobiernos para obtener esos permisos.
Hay una relación muy buena, unas autoridades que se comunican, pero necesitamos más velocidad en esa apertura de la conectividad entre ambos países.
-¿Están satisfechos con la hoja de ruta que han acordado ambas naciones?
-La hoja de ruta de ambos países busca que la reactivación de la conectividad aérea o rutas se haga se manera recíproca para aerolíneas venezolanas y colombianas y, en la misma frecuencia. Lo que entiendo que están tratando con la hoja de ruta es ir poco a poco asegurando esa reciprocidad. Solo esperamos que se acelere un poco más las autorizaciones que se soliciten.
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