FAN paralela, por Teodoro Petkoff
La reforma que hizo Chávez, por vía de la obediente Asamblea Nacional, de la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional (Lofan), hace más o menos tres años, además de crear el grado militar de comandante en jefe para él mismo, estableció tres líneas de mando. Una, la del minpopodefensa, que atiende todo lo administrativo referente a los cuatro componentes tradicionales (Ejército, Armada, Aviación y Guardia Nacional); la segunda, la del Comando de la Reserva, que aparece así como un quinto componente de la institución castrense, sustraído, por cierto, al Ministerio de la Defensa; la tercera, la del Comando Estratégico Operacional (CEO), encargado de trazar los planes de las operaciones militares.
Las tres líneas de mando confluyen en el Comandante en Jefe, quien así se asegura no sólo el control absoluto de todas sino que, además, con esta ruptura de la unidad de mando –que es propia de todas las fuerzas armadas del planeta– está en condiciones de manejar más cómodamente el viejo adagio del Poder: divide y vencerás. Formalmente hablando, la Reserva, como su comando, recientemente designado, responden, pues, a las disposiciones de la Lofan.
Pero éste no es un asunto de formalidad legal, sino político. La creación de un cuerpo separado de Reserva contradice el criterio tradicional de todas las fuerzas armadas del mundo, en las cuales los batallones de reserva son propios de cada componente, atendiendo a la especificidad de cada uno de ellos. En nuestro caso, no. Ahora, la Reserva es un cuerpo único en el cual los límites entre los componentes han sido borrados. De modo que para todo efecto práctico, la Reserva es un nuevo componente de la FAN, el quinto, paralelo a los otros cuatro y, en principio, mucho más numeroso.
Supuestamente, ya hay 70 mil personas integradas a la Reserva. ¿Con qué objeto se crea una FAN paralela –en verdad, más un Ejército paralelo, que una FAN completa? El objetivo no es esa mítica guerra contra el Imperio. La Reserva está concebida como un cuerpo político al servicio estricto del Comandante en Jefe, bajo cuyo mando directo está. Es una guardia pretoriana. Es una forma de paramilitarismo. Su «seguro» ante la FAN tradicional, cuya «lealtad» siempre le será sospechosa. De hecho, conociendo el modo de proceder del oficialismo, puede tenerse por seguro que la integración física de la Reserva está políticamente filtrada.
Sus miembros responden a la orientación política de su Comandante en Jefe y seguramente cada uno porta carnet del PSUV. Si existe algún antecedente histórico, es el de la SS de Heinrich Himmler, paralela a la Wehrmacht: la Fuerza Armada, de Alemania, bajo el mando de Adolfo Hitler.