FOTOS | Habitantes de Yaguaraparo viven en zozobra ante cada réplica del sismo
Los vecinos alegan que el terremoto de Cariaco de 1997 se quedó corto en comparación con el del martes 21 de agosto. El Pitazo visitó la zona y recogió testimonios de los afectados
Autor: Yesenia Garcia | El Pitazo
“¡Nos va a tragar la Tierra!”, “¡Corramos a las vigas!”. Estas fueron las palabras que gritó Delia Rodríguez, madre de tres niños y habitante del sector Doña Bartola en Yaguaraparo, municipio Cajigal, del estado Sucre, a las 5:31 pm del martes 21 de agosto. Con lágrimas en los ojos relata la triste escena que vivió junto a su familia.
“Corrimos a resguardar nuestras vidas y el piso nos iba a tragar, mi casa comenzó a hundirse y a agrietarse. Y yo con mis hijos gritábamos despavoridos, pensamos que era una película de terror. Ahora quedé con mi casa dañada, donde tengo 20 años viviendo y no tengo a dónde ir. Espero que el gobernador del estado, Edwin Rojas, me brinde una respuesta”, agregó.
La calma se apoderó de la población donde tiendas, panaderías y comercios parecen extinguidos. Caminar por la plaza Bolívar de la localidad se asemeja a un desierto.
Juan José Marcano sostiene que lo que vivieron fue horrible e indescriptible “Mi hija se metió bajo una mesa y todos corríamos sin saber a dónde. Hoy volvió a temblar en verdad estamos alarmados. Dios nos proteja”.
Las esperanzas de los residentes de Yaguaraparo se centran en Dios, así lo relató un habitante de nombre Juan Longart: “Sentimos que la gente se apegó a Dios y todos juntos en la plaza rezamos. Personas que no se hablaban se volvieron a dirigir palabras. Primera vez que tiembla tan fuerte en Yaguaraparo, mucho más que cuando el terremoto de Cariaco”, agregó.
Los residentes coinciden en que el movimiento telúrico duró más de 20 segundos porque la tierra no dejaba de temblar. “Estamos asustados, no nos adaptamos a que vivimos en una zona sísmica. Este temblor fue muy extenso y es la primera vez que sentimos que la tierra tiemble tan horrible”, indicó Mirna Guerra, residente de Yaguaraparo.
La población ante el terremoto y las replicas que han ocurrido se mantienen a las expectativas y sostienen que duermen con ropa y bolsos preparados por si algo mayor llegara a ocurrir, manteniendo la fe en Dios que los protegerá.