Gobierno aceitó su «puerta giratoria»: salen 36 detenidos pero encarcelan a otros 33
El director del Foro Penal explicó que en dos días se produjeron 36 excarcelaciones de personas que estaban detenidas desde abril pero en un solo día encarcelaron a 30 más
La visita a Venezuela de la Alta Comisionada de la ONU para los DDHH, Michelle Bachelet, y la posterior presentación del informe oficial sobre la situación del país realizada en Ginebra este #5Jul ha significado buenas noticias para algunos pero al mismo tiempo un peor escenario para otros.
Solo en la primera semana de julio, el Gobierno nuevamente aplicó su política del efecto «puerta giratoria», que está bien aceitada, ya que por cada anuncio de liberaciones hay una nueva arremetida en la que detienen y encarcelan a un grupo igual o superior.
Alfredo Romero, director del Foro Penal, ejemplificó lo ocurrido esta semana: el 3 de julio excarcelaron a 23 personas y al día siguiente, el 4 de julio, soltaron a 13 personas más lo que sumó en dos días la liberación de 36 jóvenes que estuvieron detenidos en el estado Lara por las protestas del 30A y del 1ro de mayo. Pero el mismo 3 de julio se registraron otras 30 personas que fueron detenidas por protestar y dentro de ese grupo están presos 12 adolescentes.
En la mañana del 5 de julio, cuando la Alta Comisionada declaraba a los medios de comunicación luego de la presentación del informe ante el Consejo de DDHH en Ginebra, informó que serían liberadas 22 personas, entre ellos la jueza María Lourdes Afiuni y el periodista Braulio Jatar.
Pero el anuncio -que aún espera por la definición oficial de las condiciones por parte del poder judicial- ocurre el mismo día en el que el director del Foro Penal denunció la detención y desaparición de tres personas: la trabajadora doméstica de Iván Simonovis, junto a una tía y la prima de ella. Con estas tres mujeres la lista asciende a 33 personas detenidas.
#5Julio Resultado de Efecto puerta giratoria de esta semana: 37 #PresosPolíticos excarcelados y 33 nuevos #PresosPolíticos encarcelados.
— Alfredo Romero (@alfredoromero) July 5, 2019
El efecto de la «puerta giratoria» ya había dejado sus secuelas la semana pasada. El 21 de junio, el mismo día que Bachelet salió del país luego de una visita de tres días, la familia del capitán Rafael Acosta Arévalo denunció que desconocían su paradero y luego de siete días se supo que fue detenido por hombres armados sin identificar. Ni su familia ni sus abogados fueron informados de su detención, lo que constituye una desaparición forzada.
El 28 de junio, Acosta Arévalo fue llevado ante un tribunal militar por miembros de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) junto a cuatro militares más y dos exfuncionarios de seguridad que fueron señalados públicamente por representantes del gobierno nacional, de participar en una conspiración en contra de Nicolás Maduro.
Ante las evidentes condiciones de haber sido torturado que mostraba Acosta Arévalo, el juez lo mandó de inmediato al Hospital militar, donde murió en la madrugada del 29 de junio.