Gobierno presenta «nuevos indicios» de golpe de Estado que vinculan a Borges y Albán
«Es una patraña la misión humanitaria. Estaba prevista una operación militar en 2019 y dijo que ”queda claro que la intención real de la administración de Trump es la agresión militar contra Venezuela”, indicó Rodríguez
El ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, presentó «nuevas pruebas» y testimonios que vinculan al expresidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, con el coronel capturado de la Guardia Nacional, Oswaldo García Palomo. Además, establecen una conexión de presunta complicidad del concejal Fernando Albán, quien murió el 8 de octubre de 2018 en las inmediaciones del Sebin de Plaza Venezuela.
En una rueda de prensa -en la que no admitió preguntas- Rodríguez dijo que lograron capturar a García Palomo en Barinas con engaños al supuestamente hacerle entender que una unidad del Ejército se levantó en Caracas, con lo que se vino de Colombia. Reveló que todo había sido parte de un operativo de los servicios de inteligencia nacionales y que incluso, los vehículos en los que se trasladó hasta su captura fueron puestos por el Gobierno.
Acusó a los gobiernos de EEUU y Colombia de financiar las actividades del militar dentro y fuera de Venezuela, así como manifestó tener «información detallada» de sus reuniones en varios países y con quién las tuvo.
Según dijo, habían tres fechas para dar un golpe de Estado en Venezuela: 27 de enero, 31 de enero y 3 de febrero, en donde se preveía tomar el control de Fuerte Tiuna, La Carlota y las comunicaciones del Palacio de Miraflores si se lograban reunir las unidades militares suficientes.
Afirmó que García Palomo ofreció «testimonio voluntario» y «sometido a polígrafo» para que no hubiera dudas de lo que decía. En las declaraciones, el militar retirado dijo que estuvo en contacto con el general Antonio Rivero (según el Gobierno entrenado por la CIA), así como con el comerciante Parsifal de Sola y Julio Borges (acusados de estar presuntamente detrás del llamado Golpe Azul de 2014, la llamada Operación Jericó).
Además de tener contactos con un asesor del Pentágono y un general de la Policía Nacional colombiana, que le permitieron acceso rápido a Venezuela, dijo estar en conocimiento de un supuesto golpe de Estado que sería llevado a cabo por EEUU y él acotó que antes de que invadieran el país, lo harían ellos mismos.
Junto a esto, se «descubrió» un enlace entre los hechos de 2014 de la Operación Jericó con el gobierno de Juan Manuel Santos, por lo que el Ejecutivo tiene «pruebas» de su implicación en un golpe de Estado. Caso que también se replicaría en 2019.
«Es una patraña la misión humanitaria. Estaba prevista una operación militar en 2019 y dijo que ”queda claro que la intención real de la administración de Trump es la agresión militar contra Venezuela”.
En otro video, García Palomo aseguró haber conocido a Borges en Colombia y que con él tuvo dos enlaces, uno de ellos el concejal Fernando Albán. También dijo que otras personas como la fiscal en el exilio, Luisa Ortega Díaz y su esposo, Germán Ferrer; Rafael Ramírez, Hebert García Plaza habían tenido la intención de comunicarse con él.
Dijo además haberse reunido con Cliver Alcalá Cordones y Miguel Rodríguez Torres. También con el «Pollo» Carvajal.
Señaló que estaba en conocimiento de los sucesos del 4 de agosto de 2018, que fue calificado por el Gobierno como «magnicidio en grado de frustración», así como que el entrenamiento de supuestos mercenarios en Colombia tenía tiempo. Rodríguez manifestó que esa fue la razón por la cual Borges y la oposición se retiraron de la mesa en Santo Domingo, porque tenían planteado hacer un golpe.
Reveló que dentro de la Guardia de Honor presidencial había un «topo», quien fue identificado como el teniente coronel Ovidio Carrasco Mosquera, quien estaba en comunicación con García Palomo y Julio Borges. Al parecer, éste habría dado información del cambio de lugar para la parada de la Guardia Nacional en agosto y tendría una «empresa de tortas» con Fernando Albán.
Acotó que unas de las prendas pedidas por Carrasco a Borges era la residencia en EEUU y cupo en las universidades. «Se encontró un recibo».