González se solidariza con presas políticas: Vulneran sus derechos y afectan convivencia
González Urrutia afirmó que cada detención de una mujer implica menos ingresos para la familia y más riesgos para niñas y niños, dado que un porcentaje significativo del trabajo de cuidado en el hogar es realizado por las mujeres
Edmundo González Urrutia se solidarizó con las presas políticas en Venezuela y aseguró que su detención no solo vulnera sus derechos individuales, sino que erosiona las bases de la convivencia democrática y el Estado de derecho.
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, González Urrutia recordó la violencia que se ejerce contra las presas políticas en el país.
«Estas prácticas no solo vulneran derechos individuales: erosionan las bases mismas de la convivencia democrática y del Estado de derecho. En este día, recordar a las mujeres presas políticas es un deber para quienes de verdad creemos en la paz», escribió en su cuenta en X.
Destacó que en el informe presentado por el Comité por la libertad de los presos politicos y la Alianza de Mujeres Políticas se muestra una realidad que amerita atención inmediata: «La prisión política de mujeres no solo afecta a quienes están tras las rejas. Desestructura hogares completos, profundiza la pobreza y aumenta la vulnerabilidad de comunidades enteras», señaló.
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Explicó que cada detención de una mujer implica menos ingresos para la familia y más riesgos para niñas y niños, dado que un porcentaje significativo del trabajo de cuidado en el hogar es realizado por las mujeres.
Según el informe del Comité por la libertad de los presos políticos, 178 mujeres están detenidas por razones políticas y se enfrentan a un sistema penitenciario diseñado para hombres que no contempla embarazo, postparto ni lactancia; tampoco ofrece atención ginecológica eficaz e ignora las necesidades de higiene y salud menstrual.
*El periodismo en Venezuela se ejerce en un entorno hostil para la prensa con decenas de instrumentos jurídicos dispuestos para el castigo de la palabra, especialmente las leyes «contra el odio», «contra el fascismo» y «contra el bloqueo». Este contenido fue escrito tomando en consideración las amenazas y límites que, en consecuencia, se han impuesto a la divulgación de informaciones desde dentro del país.





