Habló Diosdado, por Teodoro Petkoff
Diosdado Cabello es un duro. Podría decirse que es el jefe del ala dura del chavismo. Dura, que no de izquierda, porque en el chavismo los conceptos de izquierda y derecha son relativos. El mismo se encargó de trazar su propio perfil autoritario en la entrevista del domingo pasado en El Universal.
“Es de sentido común que el principal partido en todas las regiones es el MVR, y es el que pone los votos” . Así habló Diosdado. El MVR pone los votos y pondrá también los candidatos. Se acabó el relajo. Llegó el teniente y mando a parar.
“No vamos a permitir la indisciplina interna y que alguien lance un candidato porque el otro lo hizo y no acepto éste” . Se calan el candidato que proponga el MVR o no van pa’ l baile. Oído al tambor, PPT.
¿Cómo se va a manejar este proceso? “Se va a conformar un frente nacional, que no puede ser un colectivo de 200 personas porque no nos vamos a poner de acuerdo, y tiene que ser una instancia que tome decisiones y que dé la línea hacia abajo” . Habrá un cogollo, pues. Que tomará todas las decisiones y dará la línea. Mejor dicho, las órdenes. ¿Qué asegurará la autoridad de ese supercogollo? “Ahí tiene que estar el presidente. Tenemos un jefe. Eso no lo discute nadie y es una ventaja. Chávez es jefe del Gobierno y del partido” . La jefatura de Chávez, pues, la que nadie discute, será la palanca para imponer las decisiones y enviar las órdenes que, también se espera, nadie discutirá.
El modelo vertical de partido, con el poder concentrado en la cúpula (ya podrida, por lo demás) y en el todopoderoso presidente. Los partidos de la alianza gubernamental están advertidos: “Todos los factores que respaldan al presidente van a tener que apoyar al candidato (para gobernaciones y alcaldías) que se escoja dentro del bloque del cambio” . Pero ya está dicho: el MVR pone los votos y sus candidatos son los candidatos, y no vamos a permitir la indisciplina. Para eso está Chávez. El Jefe. El Big Brother.
Los que no han bailado pegado con el gobierno están sentenciados. “Hay gobiernos regionales que se han alejado del gobierno central, y la militancia no perdona” ¿La militancia? El autoritarismo y el personalismo conjugan siempre en primera persona del plural. A los que pudieran atreverse a pensar con su propia cabeza les va un aviso: “No hay grupo del chavismo con representatividad sin Chávez” . Aquí nadie tiene luz propia. Todos son lunas que reflejan la luz del Presidente-Sol. Por las dudas, vaya el recordatorio: “El chavismo light … fue golpeado en la elección interna. Los que quieran quedar bien con Dios y con el diablo van a tener que quedar bien con Dios, porque resultaron favorecidos quienes tienen conexión política y afectiva con el Presidente sin titubeo” . Acto fallido: Chávez es Dios (¿… dado?). Esa es la piedra de toque: la conexión política y afectiva con Dios ¿Para qué un programa, una línea política? Todo se define a partir de Dios (¿… dado?). Todos esos pendejos que dicen que ellos no siguen hombres sino ideas pueden irse mudando.
Chávez es el programa, la línea política, la organización. Con Chávez todo, fuera de él, nada. ¡Viva Gómez y adelante!.