Expertos prevén que nuevo gobierno español mantendrá posición neutral con Venezuela
Analistas coinciden en que Sánchez tiene una posición complicada en el poder, con apenas el 25% de presencia de su partido en el congreso, podría ver el final de su administración en pocos meses
El cambio de gobierno en España ha provocado revuelo a nivel mundial. La postura del nuevo mandato bajo la administración de Pedro Sánchez pone al Partido Socialista Obrero de España (PSOE) al mando del país, y su relación con la facción de izquierda, Podemos, genera incógnita sobre las decisiones que pueda tomar la nueva gestión y especialmente la manera en la que puedan cambiar las relaciones con Venezuela.
Con el cambio político, “amigos” del gobierno venezolano y del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) tendrán una posición mayor de poder en España. Sin embargo, expertos en el área indican que no debería existir una modificación sustancial en la posición sobre Venezuela.
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“Puede que haya un giro en la política española, pero no será radical. Puede que haya un enfrentamiento menos directo con el gobierno de Venezuela, pero se integrarán a las decisiones tomadas en la Unión Europea siguiendo sus intereses nacionales”, señala Carlos Romero.
El internacionalista prevé una modificación en el tono de confrontación de España a Venezuela, pero una postura más neutral tanto hacia el gobierno como a la oposición.
Tome el camino que tome, Sánchez tendrá que ser muy precavido para actuar en un gobierno muy endeble. El líder de PSOE se hizo con el cargo con apenas el 25% de participación de su partido en el Parlamento, por lo que tuvo que convencer a otras facciones opuestas a Mariano Rajoy. El problema está en que tendrá que tomar decisiones complacientes para todas las fuerzas políticas que lo respaldaron, por lo que tendrá una libertad de acción mínima.
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“Yo no creo que vaya a durar mucho. Es muy difícil que se mantenga por más de unos cuantos meses, y casi imposible que dure los dos años que le corresponden”, asegura Sadio Garavini, embajador y analista político.
De acuerdo con Garavini, Sánchez no podría inclinar la balanza a favor del gobierno de Maduro aún con la presencia de Podemos, debido al conflicto de intereses entre los partidos que lo apoyaron. En este sentido, el Partido Nacionalista Vasco sería fundamental en su coalición, y su postura sobre el mandatario venezolano siempre ha sido de rechazo.
Agrega que otro factor de influencia será la Unión Europea, y asumirán la posición que dicten los países que la conforman.
“Hubo mucho susto por la postura que podría asumir Sánchez por su relación con Podemos, pero no creo que logren tener demasiada influencia”, explicó.
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Por otra parte, el internacionalista Felix Arellano opina que lo ideal sería que Sánchez comprenda la naturaleza del gobierno de Maduro en Venezuela y la crisis institucional que sufre el país, y mantener una postura de rechazo. “Debe entender que el gobierno de Maduro no guarda relación con el socialismo en la búsqueda del bienestar social, sino que más bien perjudica a su pueblo”, agregó.
El experto cree que España, en este nuevo contexto, debería celebrar elecciones para que el pueblo sea quien decida su gobernante.