Legitimidad de la AN «en juego» con fallo del TSJ en el exilio sobre Maduro
El escrito de los magistrados en el exilio fue remitido a la AN para que de cumplimiento a la sentencia, algo debe ser discutido por las distintas fracciones parlamentarias de oposición
El presidente de la Asamblea Nacional juega a la «cautela jurídica» antes de perder la credibilidad del único Poder independiente reconocido en el exterior.
Omar Barboza (Un Nuevo Tiempo-Zulia), presidente de la AN, aseveró el jueves 16 de agosto que el Parlamento aún no decide cómo ejecutar la sentencia de los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia en el exilio, que condenó a Nicolás Maduro a 18 años de prisión y una millonaria multa por su participación en hechos de corrupción con la constructora brasileña Odebrecht.
Además, la sentencia del TSJ en el exilio ordena llenar el «vacío de la Presidencia de la República», tras declarar a Maduro como un «presidente de facto».
El escrito de los magistrados en el exilio fue remitido a la AN para que de cumplimiento a la sentencia, algo debe ser discutido por las distintas fracciones parlamentarias de oposición tras una revisión de la consultoría jurídica del Poder Legislativo, destacó Barboza.
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¿El objetivo? No perder la legitimidad que les ha otorgado su cumplimiento a la Constitución de 1999, vigente en el país mientras una impuesta Asamblea Constituyente se «dedica» a redactar un nuevo texto constitucional.
«El problema no es tomar las decisiones por tomarlas sino saber si las podemos ejecutar o no. Hay que tener cuidado y ser responsables porque lo que nos estamos jugando es la credibilidad del único Poder Público legítimo, en materia constitucional no se debe dar ningún paso en falso que lo haga perder la legitimidad que tiene», recalcó Barboza a los medios de comunicación.
Sobre la decisión de los magistrados en el exilio de condenar a 18 años de cárcel a Maduro por incurrir en delitos de corrupción, Barboza respondió que aunque no conocen el contenido de la sentencia con detalle, usarán su contenido para respaldar y profundizar las investigaciones sobre Odebrecht que se lleva a cabo desde la comisión de Contraloría.
“Lamentablemente en Venezuela no hay Estado de derecho y son sentencias que no son ejecutables, pero es una señal importante de la voluntad de combatir la corrupción y vamos a enterarnos mejor de los detalles de ella”, indicó el presidente de la AN.
La Fracción 16 de Julio (integrada por Vente Venezuela, Alianza Bravo Pueblo y Convergencia) instó al Parlamento a acatar la sentencia el pasado 10 de julio y señaló que el presidente de la AN es quien debe suplir “el vacío de la Presidencia”, pues el vicepresidente Tareck El Aissami fue designado por Maduro luego de que declarara su abandono del cargo.
La constitución del TSJ en el exilio es cuestionada por organizaciones no gubernamentales como Acceso a la Justicia que señala que la AN no designó a todo un tribunal sino a los sustitutos de los llamados “magistrados exprés”.
Con información de Efecto Cocuyo