Carol Delgado, la embajadora que pagó por las ofensas de Jorge Rodríguez
Delgado fue designada en el cargo el 21 de noviembre de 2014, según la Gaceta Oficial N° 40.546, para reemplazar a María Lourdes Urbaneja
La carrera diplomática de Carol Delgado Arria ha sufrido un bache, pero no por acciones propias. La embajadora de Venezuela en Ecuador fue expulsada tras una declaraciones del ministro venezolano de Comunicación Jorge Rodríguez, quien tildó de mentiroso al presidente ecuatoriano Lenín Moreno.
Ministro de Comunicación venezolano, Jorge Rodríguez, llama «mentiroso» al Presidente de Ecuador @Lenin, y afirma que las cifras de migrantes venezolanos están «infladas». pic.twitter.com/5x3v70ltsr
— Gabriel Bastidas (@Gbastidas) 17 de octubre de 2018
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador respondió en un comunicado, que no están dispuestos a tolerar «ninguna muestra de irrespeto a sus autoridades», aunque se comprometieron a seguir brindando asistencia a los venezolanos que ingresan al país.
La recién expulsada es licenciada en Letras de la Universidad Central de Venezuela, y ha cursado estudios en Relaciones internacionales, Estudios de Género y Derecho. En el año 2011, fue Coordinadora de la Coalición de Cónsules Latinoamericanos en Nueva York.
Además, como muchos embajadores y funcionarios de la «revolución bolivariana» formó parte de la Liga Socialista y es militante del Partido Socialista Unido de Venezuela.
Delgado fue designada en el cargo el 21 de noviembre de 2014, según la Gaceta Oficial N° 40.546, para reemplazar a María Lourdes Urbaneja. Previamente, desde 2008, se desempeñó como Cónsul General de Venezuela en Nueva York, donde fue fundadora y coordinadora de la Coalición Latinoamericana de Cónsules Generales.
Dentro del plan de trabajo de la embajadora Delgado, estaba desarrollar «una diplomacia bolivariana» que ayudará a preservar la independencia.
En ese momento, Delgado aseguraba que era que es «de suma importancia caracterizar y vencer el arsenal de acciones dirigidas para someter a una situación ‘neocolonial’ a Latinoamérica».
En sus últimas declaraciones a medios, la embajadora aseveró que «Venezuela sufre el drama de un acoso internacional imperialista», que busca «suprimir la existencia de las instituciones del Estado, coaccionarlas, derogar el Estado de derecho y empujar a millones de venezolanos a migrar para luego estigmatizar al gobierno de esta situación y declarar que el país necesita una “intervención humanitaria” por parte de las mismas potencias que están librando esta “guerra sin fusiles” contra nuestro pueblo».