Juan Requesens lleva un año preso por el “magnicidio” en medio de un juicio viciado
La diputada Dennis Fernández, presidenta de la Comisión de Política Interior del parlamento, destacó que el encarcelamiento de presos políticos, y en particular los relacionados con la Asamblea Nacional (AN), tienen características comunes
“No hay reja que frene la fuerza de ese joven”. La frase pertenece al diputado Gilber Caro y “ese joven” es el parlamentario de Primero Justicia por el estado Táchira, Juan Requesens, quien cumplió un año de encarcelamiento tras ser acusado de ser el presunto autor intelectual y material del “magnicidio frustrado” contra Nicolás Maduro el 4 de agosto de 2018.
Dirigentes políticos y familiares del diputado se reunieron en un “acto de solidaridad”, donde estuvieron presentes los embajadores de Alemania, España, Italia, Unión Europea y un representante diplomático de Polonia, para enviar un mensaje a Requesens y defender su inocencia de manera pública, ante un proceso que no dudaron en calificar de viciado, por todos los lapsos que se han incumplido.
Gilber Caro aseveró que la prisión de Requesens sería en vano si la libertad de Venezuela “no está primero”. El diputado, que ha estado preso en dos ocasiones, recordó que su colega fue uno de sus pilares durante su detención en El Helicoide, una de las sedes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).
“Se merece que esto esté lleno pero no hemos madurado, no hemos valorado el sacrificio del otro”, dijo Caro en uno de los momentos de su discurso, al tiempo que pidió a los venezolanos “usar este pasado como fortaleza y resiliencia”.
La diputada Dennis Fernández, presidenta de la Comisión de Política Interior del parlamento, destacó que el encarcelamiento de presos políticos, y en particular los relacionados con la Asamblea Nacional (AN), tienen características comunes. “El esquema es el mismo: mismo tribunal, mismo juez, misma acusación, mismo proceso viciado”.
Fernández destacó que la AN está “firme en sus propósitos. A sus padres, su esposa, su hermana les decimos que no están solos, hay un pueblo que lo acompaña en su lucha”.
Mientras que Stalin González, segundo vicepresidente de la Asamblea Nacional, dijo que a un año de la detención de Requesens “no han podido comprobar de lo que se le acusa. Ninguno de nosotros duda de que Juan sea un preso político, está preso por pensar distinto, por tener un verbo duro contra las injusticias”.
El parlamentario, que dijo no tener contacto con Requesens desde su encarcelamiento, señaló que “hoy no podemos desmayar, no son días para bajar la cabeza, es momento de seguir en las calles unidos, de nuestro trabajo en la Asamblea Nacional, de seguir en todos los tableros como dice Juan Guaidó”.
Los familiares de Requesens participaron en el acto. Su madre, Paula Martínez, dijo que “él quiere que sigamos luchando, que no dejemos a Venezuela sola, no solamente por él sino por todos los presos políticos del país, por todos los que se han ido del país y no pueden regresar”.
Su hermana leyó una carta donde relató varias situaciones. Con voz quebrada en algunas ocasiones, Rafaela Requesens dijo que su hermano es “un ejemplo para muchos y muchos también son ejemplo para nosotros”.
“Miren donde estamos”
Henrique Capriles, exgobernador del estado Miranda, dijo que “hace 15 años yo estuve donde está Requesens ahora. Cuando llegó está mal llamada revolución tenía 10 años. Quince años después miren donde estamos. El país no está mejor, tampoco la administración de justicia ni lo que vive el venezolano en cualquier barrio”.
El dirigente de PJ reiteró varias veces la inocencia de Juan Requesens, pues “toda su trayectoria política, su currículo ha sido luchar por el apoyo del pueblo venezolano, jamás golpista o de esas cosas que se le acusan”.
Además, dijo que “si Juan ha pasado un año preso y sigue ahí sin rendirse, cómo no vamos a resistir y luchar los demás (…) Aquí el único culpable de todos los problemas del país es Nicolás Maduro y queremos que se vaya. Porque queremos a Requesens libre, un país libre”.
Por su parte, el presidente de la AN, Juan Guaidó, quien se juramentó como mandatario encargado del país el 23 de enero pasado, dijo que estamos en un “momento muy oscuro para Venezuela pero que no nos han robado el brillo de la esperanza, así como la lucha de Juan Requesens”.
Guaidó aseguró que el régimen de Nicolás Maduro tiene el cinismo de “tercerizar la culpa”, en referencia a las sanciones que impuso Estados Unidos recientemente, y dijo que eso ha llevado a la cárcel a varios presos, entre ellos el parlamentario de PJ.
“Rafaela narró historia de miles de familias que han sido perseguidas, que se ven obligados a huir, y todavía el cinismo del régimen da para advertir que no vayan a Estados Unidos porque es peligroso, cuando no se pronunciaron por la cota 905, no se pronunciaron por el asesinato de los pemones”.
El mandatario encargado dijo que “Venezuela como sociedad quiere sanar, quiere recuperar a su familia, no sentir orfandad de afectos porque están lejos o no están”, por lo que es necesaria la unión de todos los factores y no transformar las victorias “en un retroceso”.
“Hoy nuestro único enemigo es la desesperanza y la potencial falta de unión. No es Maduro, porque ya está derrotado”, destacó el parlamentario, quien además envió un mensaje a Nicolás Maduro tras sus declaraciones sobre las sanciones.
“El régimen pretende hacer de la urgencia un mecanismo de control social de la población, y ahora usa como excusa las sanciones para justificar el hambre, la falta de luz. No van a tercerizar la culpa. Si te interesa tanto, vete”.
¿Qué ha pasado desde agosto?
Juan Requesens fue arrestado la noche del 7 de agosto de 2018 junto a su hermana. Mientras a Rafaela Requesens la liberaron horas después, tras una detención totalmente arbitraria por parte de funcionarios del Sebin, al diputado le tocó la fórmula que parecen aplicar las autoridades cuando de presos políticos se trata: presentación en tribunales luego de lo que dicta la ley, con signos de haber sido agredido físicamente y totalmente aislado.
En ese ínterin, circuló un vídeo donde se ve al diputado desorientado, semidesnudo, con manchas de sangre y lo que parece ser orina y excremento, respondiendo preguntas que se presumen realizaron los encargados de su custodia.
Al parlamentario de Primero Justicia, quien días antes de su detención había dado un discurso en la Asamblea Nacional donde reclamaba las actuaciones del régimen de Nicolás Maduro y aseguraba “yo me niego a rendirme”, se le acusó de estar involucrado como autor intelectual y material en el llamado “magnicidio frustrado” contra Nicolás Maduro, ocurrido el 4 de agosto durante un acto de la Guardia Nacional en el centro de Caracas.
Según la narrativa de las autoridades gubernamentales, las acusaciones contra Requesens se basaron en unos vídeos de los supuestos implicados en la operación, pero no constan dentro de las actas de acusación que realizaron los fiscales Dinorah Bustamante y Farid Mora Salcedo.
La defensa del parlamentario, que ejerce el abogado penalista Joel García, alega que uno de los vicios de la acusación es que en los 219 folios del expediente, apenas 35 líneas se refieren a Requesens. De estas, 14 líneas se basan en afirmaciones difundidas en las redes sociales del diputado.
Su caso está siendo llevado por el Tribunal primero de Control con competencia en materia de Terrorismo, a cargo de la jueza Carol Padilla, quien ha sido sancionada por el gobierno de Estados Unidos al ser señalada como responsable en la violación de derechos humanos en el país.
Joel García, abogado de Juan Requesens, destacó que desde el 1° de julio hasta la fecha no se ha materializado el pase a juicio que dictó la jueza Carol Padilla. «El proceso no avanza”.
En el pase a juicio, al diputado se le imputaron los delitos de homicidio calificado frustrado contra el Presidente de la República y alto mando militar, asociación para delinquir, traición a la patria, instigación pública y tenencia ilícita de armas de guerra.
Joel García asegura que este año ha sido una “pena anticipada”. El 2 de julio pudieron verlo, y ya había pasado un mes desde la última visita que pudieron realizar sus abogados para asistirlo jurídicamente. «Hay que recordar que esto depende de la voluntad y el ánimo del funcionario del Sebin que nos toque».