Una eventualidad bastante probable, por Luis Manuel Esculpi
A su regreso de Rusia Nicolás volvió a hablar de proseguir la negociación facilitada por los noruegos. A pesar que alguno de los integrantes de la denominada «mesita», evalúan como un paso exitoso en el desarrollo de la política sobre «acuerdos parciales» adelantada con el régimen de Maduro, los hechos parecieran no concederle la razón.
No solo por la afirmación de Maduro al retornar, sino por la reacción de la comunidad democrática internacional, cuando su inmensa mayoría, se ha pronunciado por la continuación de las conversaciones iniciadas en Oslo y continuadas en la isla de Barbados, lo que en la práctica significa reconocer la legitimidad de las fuerzas representadas en la Asamblea Nacional, para actuar como contraparte en ese proceso con los representantes del régimen.
El debate realizado a raíz de la reincorporación de los parlamentarios del PSUV al poder legislativo evidenció, nuevamente, la escasez de argumentos para justificar la integración al parlamento y a la vez sostener la injustificada e inconstitucional tesis del desacato, además de la pretensión que ese poder actuará violando la Constitución, admitiendo la reincorporación de diputados que habían asumido otros cargos en distintas instancias ejecutivas. Sobre ese aspecto hay numerosos antecedentes donde se aplicó la disposición constitucional.
La fuerzas democráticas venezolanas han manifestado reiteradamente su disposición a lograr una salida democrática, constitucional y electoral a la crisis. Esa manifestación se sintetiza en la realización el próximo año de unas verdaderas elecciones presidenciales libres.
Los técnicos electorales de todos los sectores políticos conocen exactamente, los condiciones que deben ser cubiertas para realizar los comicios con esas características. Por supuesto, no limitadas exclusivamente a la designación de los rectores del organismo electoral. Por esa razón la decisión sobre ese aspecto crucial, no es en lo esencial un tema técnico, fundamentalmente es un problema de decisión política.
Es así como la fórmula propuesta por la representación de Juan Guaidó, respaldada por la mayoría de la AN, está totalmente en sintonía con la proposición estratégica diseñada.
En el excelente Foro realizado la pasada semana, por la Fundación Espacio Abierto, con el respaldo de TalCual y Radio Comunitaria, donde participaron como expositores; Pedro Benítez, Gerardo Blyde y Fernando Martínez Mottola, (los dos últimos integrantes de la delegación negociadora) en un auditorio pleno y con una asistencia sumamente representativa, varios de los presentes comentaron apenas finalizado el evento, su convicción en el sentido que la crítica expresadas por algunos factores, acerca de la inexistencia de una estrategia por parte de las fuerzas democráticas carece totalmente de sentido.
Los sectores de la sociedad democrática debiera hacer suya la propuesta formulada en Barbados, en realidad fue la que motivó la reacción de la delegación de Maduro de la Mesa y el optar por su Plan B promoviendo la mesita. Esa fórmula coloca las negociaciones en un estado totalmente distinto a los diálogos y conversaciones anteriores, una de las conclusiones desprendidas del Foro es que si bien en cierta medida, esta es la continuación de otros procesos, su distinción principal es que por la condición y experiencia los facilitadores es de una calidad distinta y superior.
Aunque no se puede deducir explícitamente de la palabra de los expositores, quienes por su condición de negociadores actuaron con prudencia y midiendo sus expresiones; y sin sacrificar la información posible de trasmitir acerca del clima y los aspectos que se podían conocer respetando el patrón de confidencialidad acordado.
El análisis que proyecta la reanudación del proceso de negociación, con los actores representativos de los factores principales del conflicto actual es una eventualidad bastante probable. Mientras antes suceda mejor, cuando antes se vislumbre una alternativa, el sufrimiento y las penalidades actuales de la mayoría tendrán un aliciente para continuar la lucha por el cambio.