«Indultados» vivieron el encierro en la cárcel entre enfermedades y resignación
Enrique Perdomo, abogado del expreso político Iván Simonovis, manifestó a su salida del Sebin que tras sufrir un infarto leve, quedó con la visión del ojo izquierdo disminuida en un 30-40%
El lunes 31 de agosto, Nicolás Maduro firmó un decreto “indultando” a 110 venezolanos, entre políticos y activistas, algunos de ellos encarcelados, otros con prohibición de participar en elecciones, con procesos penales pendientes y algunos hasta con boleta de excarcelación.
El anuncio y posterior lectura de la lista con los nombres, lo hizo el ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, quien recientemente anunció su recuperación, luego de contraer coronavirus.
Entre los liberados hubo quienes contaron las penurias de estar encarcelados injustamente y cómo el encierro les produjo severas afecciones de salud, que el régimen no atendió de forma diligente.
Es el caso de Enrique Perdomo, abogado del expreso político Iván Simonovis, quien manifestó a su salida del Sebin que tras sufrir un infarto leve, quedó con la visión del ojo izquierdo disminuida en un 30-40%. Asimismo, durante su reclusión, se conoció que padecía de retención de líquidos y cólico nefrítico.
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Perdomo fue detenido “arbitrariamente” el viernes 14 de junio de 2019 por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), cuando funcionarios de ese cuerpo hacían una inspección en la residencia de la familia Simonovis.
Otro de los favorecidos por las excarcelaciones fue Roberto Marrero, jefe del despacho del presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, detenido en 2019.
A su salida del Helicoide comentó: “La libertad será siempre bien recibida (…en prisión) uno es como una mercancía”.
“No le deseo a nadie la cárcel (…), es lo peor que pueden haber inventado para el ser humano”, agregó Marrero.
Por otro lado, la abogada Antonia Turbay, encarcelada por supuestamente colaborar con la fuga de su vecino, Iván Simonovis, de quien dice que no era amiga. En su caso, había una boleta de excarcelación desde un año y jamás ejecutaron su liberación.
“Ni soy amiga de Simonovis. Sí es mi vecino, y lo aprecio. Cuando él estuvo preso sentí mucha preocupación por sus hijos, pero yo no tengo nada que ver, y me han alejado de mi familia”, dijo entre lágrimas.
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“Me han alejado de mi familia, mi hija vive en Bogotá”, agregó, visiblemente afectada. Turbay reveló que se enteró de su excarcelación por televisión, nadie le anunció previamente que saldría de prisión.
A propósito de las liberaciones, anunciadas por el gobierno de Maduro como un perdón político para 110 venezolanos, el vicepresidente del Foro Penal Venezolano (FP), Gonzalo Himiob, informó ayer que de estas 110 personas solo 50 actualmente están detenidas por razones políticas, 23 ya estaban excarceladas con medidas cautelares, y el resto (37 personas) estaban sujetas a investigaciones judiciales sin que esto significara un perjuicio a su libertad personal.
Otros indultados
Este martes, el diputado de la AN José Guerra, a quien el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) acusó de traición a la patria, rebelión civil, concierto para delinquir, usurpación de funciones, instigación pública a la desobediencia de las leyes y el odio, aseguró: “Yo no fui indultado porque yo no he cometido delitos””.
“Aquí lo procedente es una amnistía nacional. El gesto de buena voluntad que debe darse es liberar a todos los presos políticos”, pidió y ante algunos rumores que ubican a algunos indultados como candidatos en las venideras elecciones parlamentarias, aclaró: “No tengo pensado ser candidato a la Asamblea Nacional”.
