Inflación de EEUU es la más alta en 40 años y Venezuela la importa
El 8,5% de inflación interanual registrado por Estados Unidos se refleja directamente en los precios al consumidor presentes en el comercio venezolano, debido a que el país norteamericano es uno de los principales socios comerciales de la empresa privada nacional y se estiman importaciones anuales por el valor de $1.600 millones
La inflación anualizada de Estados Unidos alcanzó su punto más alto el pasado mes de marzo, cuando se registró un incremento en el índice e precios al consumo del 8,5% interanual.
Es decir, entre marzo de 2021 y el mismo mes de 2022, los precios aumentaron más de un 8%, lo que constituye el peor registro para el país norteamericano desde 1982.
Tan solo en marzo los precios tuvieron un repunte de 1,2%, el ritmo mensual más acelerado desde que se registrara un 0,8% en septiembre de 2005. Esto se debe, en parte, a la tensión internacional desatada por la guerra entre Rusia y Ucrania, así como su impacto en los commodities necesarios para Estados Unidos.
Estos números fueron publicados por la Oficina de Estadísticas Laborales y mide las consecuencias causadas por el conflicto geopolítico en Europa oriental.
Algunos rubros marcaron incrementos importantes que aumentaron la tasa global de la inflación, como la gasolina, que sufrió un aumento de 18,3% frente al mes anterior.
La incertidumbre en torno al costo y la oferta de crudo debido al conflicto geopolítico impulsa un alza de precios en suelo estadounidense. De hecho, este rubro representó alrededor de la mitad de la inflación del mes de marzo.
Analistas prevén que la inflación siga ganando pulso en las próximas semanas, siguiendo la tendencia de los precios del crudo y de la gasolina, que encarecen la producción y el traslado de productos tanto en lo interno como internacionalmente.
Sin embargo, a largo plazo, con la estabilización de los precios energéticos, las expectativas se centran en la caída de la inflación a niveles más controlados.
«Una eventual caída de los precios de energía, la relajación gradual de las restricciones para el comercio y una base inflacionaria más favorable indican que marzo podría ser el pico, para luego dar paso a una caída de la inflación general y subyacente en torno a un 3% para final de año», proyecta Paul Ashworth, economista jefe de la consultora Capital Economics.
Más inflación para Venezuela
Aunque el registro de la inflación de Estados Unidos se rija solo por su sistema económico, el impacto de un gigante comercial acaba por repercutir en la economía mundial.
Venezuela no queda al margen de la crisis que sufre Estados Unidos y ese 8,5% de inflación interanual se refleja directamente en muchos precios nacionales.
En otras palabras, la inflación de Estados Unidos acaba por combinarse con el incremento de precios local, lo que provoca una subida de los precios de bienes y servicios en dólares cada vez más alta.
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Esto se debe a que Estados Unidos es un importante socio comercial para Venezuela. Aunque el comercio entre los entes relacionados con el chavismo y Washington es prácticamente inexistente, los privados mantienen una relación estrecha con Norteamérica.
Durante 2021 el intercambio comercial entre ambos países incrementó en un 50%. Los datos indican que Venezuela importó desde Estados Unidos bienes por el valor de $1.652 millones, todos afectados por la inflación estadounidense.
Cifras de la Oficina de Análisis Económico de Estados Unidos (BEA, por sus siglas en inglés) detallan que en febrero se registraron exportaciones (para Venezuela, importaciones) por el valor de $126 millones. Además, en los dos primeros meses del año estas ventas alcanzaron los $265 millones.
A esto se suma el hecho de que Washington empieza a contemplan una flexibilización gradual de las sanciones, mientras que la Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC, por sus siglas en inglés) y otros privados presionan al gobierno estadounidense para abandonar esta política y abrir las puertas al comercio entre ambas naciones.
Si esta flexibilización ocurre, el flujo de importaciones y exportaciones crecería, por lo que el impacto de la inflación de Estados Unidos repercutiría aun más en los precios del comercio venezolano.