Iris Varela cree que venezolanos expulsados de Ibarra recibieron «su propia medicina»
Varela opina que los emigrantes han sido engañados y sectores de la oposición los convencen con «cantos de sirena»
La ministra para el servicio penitenciario, Iris Varela, sostuvo que algunos de los venezolanos perseguidos y expulsados en la ciudad ecuatoriana de Ibarra durante la noche del pasado domingo 20 de enero, recibieron «una dosis de su propia medicina».
En su cuenta de Twitter, Varela publicó una serie de tuits en los que comenta la situación de violencia y xenofobia desatada contra la comunidad venezolana en la ciudad tras el homicidio de una mujer ecuatoriana embarazada a manos de un venezolano.
«Un grupo de venezolanos que escucharon los cantos de sirena sufren en Ecuador, algunos reciben una dosis d su propia medicina, cuando aquí llenos de odio quemaron seres vivos y la oposición los bautizó como ‘héroes de franela’ ahora están sufriendo todos por el odio que anidaron», sentenció.
*Lea también: Ecuador solicitará a venezolanos antecedentes penales para ingresar a su territorio
Opina que los «apátridas» se llevan a los venezolanos al abismo con «cantos de sirena». Es decir, que ofrecen una realidad diferente a la que se presencia en el extranjero.
«Los apátridas continúan llevando venezolanos al abismo con cantos de sirena, mientras se reparten el botín que financia la conspiración», afirmó.
El Gobierno sostiene la tesis de que la migración Venezolana tiene como causa la «guerra económica» que perjudica el bolsillo del ciudadano común, pero además un «aparato propagandístico» que refleja una realidad «peor» a la que realmente acontece el pueblo venezolano.
Varela insiste en que estos grupos opositores «llenos de odio» se quedarán sin un lugar en el cual puedan «vivir tranquilos».
«Al paso que va esa oposición llena de odio y de ineptos, se quedarán sin un lugar donde vivir tranquilos, y es que no se puede hacer tanto daño impunemente. Achacar a otros la culpa de los males que ellos mismos generan, buscando encaramarse, se revierte. El pueblo no es idiota», agregó.