José Antonio Abreu: una vida dedicada a la música
Ganador de dos Premios Nacionales de Música, José Antonio Abreu fue merecedor de innumerables galardones, ente ellos el Príncipe de Asturias de las Artes en 2008 y varias veces nominado al Nobel de la Paz
Jesús Hurtado | @jahurtado15
Hablar de José Antonio Abreu es englobar a la música académica venezolana del último medio siglo, además de nombrar a una de las figuras más sobresalientes de la gerencia musical a escala mundial, cuyo método de enseñanza musical es hoy empleado en decenas de países e incluso recomendado por la Unesco como idóneo para al democratización musical.
Nació en Valera, en el estado Trujillo, el 7 de mayo de 1939, y dedicó más de 60 años de su vida en el desarrollo de la música en el país.
Economista Summa Cum Laude de profesión, desde muy pequeño estudió música y obtuvo grados no solo como intérprete del piano, órgano y clavecín sino como compositor y director de orquesta. Recibió doctorados Honoris Causa en Economía, Música, Educación y Medicina de diversas universidades a nivel mundial.
En 1967 se hizo merecedor del Premio Nacional de Música Sinfónica por su habilidad como compositor, y entre 1989 y 1995 se desempeñó en los cargos de Ministro de la Cultura, vicepresidente y Director del Consejo Nacional de la Cultura (Conac).
Revolucionó la música
Fue en 1975 cuando tuvo la idea de fundar un programa de enseñanza musical dirigido exclusivamente a jóvenes y niños que abarcara todo el país, creando así el Sistema Nacional de las Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela (FESNOJIV), una red de orquestas y coros con núcleos hasta en los más recóndito rincones de la geografía nacional que ha congregado a cerca de un millón de niños y jóvenes a los largo de más de cuatro décadas.
Se trata de un método de educación musical que propone el mejoramiento social e intelectual de los escolares a través de la música.
El programa tiene como su máxima expresión la Orquesta Sinfónica de la Juventud Venezolana Simón Bolívar. Esto le valió otro Premio Nacional de Música 1979 por su trabajo en ‘El Sistema’, que ha sido modelo para otros países de América Latina, Norteamérica y Europa.
El exitoso programa le permitió hacerse merecedor de numerosas distinciones internacionales, como el Premio Internacional de Música IMC-UNESCO en la clase de institución (1993). Además, la Unesco nombró a Abreu como Embajador en Misión Especial para el Desarrollo de una Red Global de Orquestas Juveniles e Infantiles y Coros en 1995 y como representante especial para el desarrollo de la red de orquestas en el marco del Movimiento Mundial de Orquestas Juveniles e Infantiles y Coros de la Unesco y Embajador de Buena Voluntad por la Unesco en 1998.
En 2001, Abreu fue honrado con un premio Right Livelihood Award y el Doctorado honoris causa por el Conservatorio de Música de Nueva Inglaterra (Boston). En 2004 fue galardonado con el World Culture Open Creative Arts Award.
Entre sus numerosos galardones recibidos destacan la Orden del Sol Naciente, Gran Cordón en Japón en el año 2007, el Premio Glenn Gould en Canadá en 2008, el Premio Internacional Puccini 2008 (Italia), miembro honorario de la Royal Philharmonic Society en el Reino Unido en el año 2008, la Sociedad de la Beethoven-Haus en Alemania y el Premio de Derechos Humanos B’nai B’rith en ese mismo año.
Abreu es también co-fundador y vicepresidente de la Orquesta de las Américas.
En el 2007 las universidades Católica Andrés Bello y Nacional Experimental Francisco de Miranda, ambas de Venezuela, le otorgaron el titulo de Honoris causa ademas de recibir el Premio Don Juan de Borbón de la Música, en su segunda edición.
En 2008 también se hizo merecedor del Premio Príncipe de Asturias de las Artes, considerado como el Nobel de la cultura hispana. También fue nominado varias veces como candidato al Premio Nobel de la Paz por su contribución a hacer de la música un instrumentos para la cordialidad entre los hombres.