José Peseiro y el cambio de rumbo de la selección de La Vinotinto, por Gustavo Franco
Desde que la Vinotinto empezó a surgir como una propuesta futbolística seria solo hubo en ese período entrenadores venezolanos. Entrenadores que sabían lo que significaba el papel de “cenicienta” que se esperaba de la selección para cambiar esa mentalidad. El trabajo de Richard Páez en ese sentido fue encomiable y permitió que hubiese una base sobre la que construir un equipo competitivo.
De esas victorias memorables, como el 0-3 logrado en Uruguay viene una joven camada ilusionante de futbolistas. Sin Juan Arango no habrían los Yeferson Soteldo o Yángel Herrera que integran la selección y que lograron un subcampeonato mundial en la categoría sub20.
Pero, para dar un paso hacia delante, a lo mejor un perfil diferente era necesario. “Lo que te trajo hasta acá no te llevará hasta allá” es el título de un libro de Marshall Goldsmith que trata de cómo lograr el éxito. Esa frase parece estar hecha para la actual situación de la Vinotinto. Así, el fichaje del portugués José Peseiro ya es oficial tras su presentación y, para bien o para mal, todo indica que se ha iniciado un cambio de rumbo en la selección nacional.
La nacionalidad es lo primero que salta a la vista. En los últimos 27 años, la selección ha tenido a dos entrenadores extranjeros: el serbio Ratomir Dujkovic (1993-1994) y el argentino José Omar Pastoriza (1999-2000).
La carta de presentación del que es el nuevo entrenador vinotinto también es bastante distinta a la de sus predecesores. Los entrenadores que desde la era de Richard Páez tomaron el mando de la selección nacional lo hicieron siendo relativamente jóvenes.
Peseiro lo hará con 59 años habiendo entrenado a equipos como el Sporting Club de Portugal, el SC Braga y el Porto. Tiene experiencia en competiciones de prestigio, logrando una medalla de plata en la Copa Uefa en su edición 2004-2005, y tiene participaciones en la Liga de Campeones. Su trayectoria es muy dilatada y lo ha llevado a entrenar en Emiratos Árabes Unidos, Egipto, Rumanía, Grecia, Arabia Saudí (donde entrenó a la selección) así como el haber sido asistente de Carlos Queiroz en el Real Madrid.
Luego de que Ricard Páez, César Farías, Noel Sanvicente y Rafael Dudamel le dieron a la selección un empuje competitivo y el autoestima para creer que se puede ganar, era cuestión natural de que las expectativas que hay sobre la selección sean mayores.
Y lo cierto es que pese a los avances de los últimos 20 años, la clasificación a un mundial de fútbol todavía no se ha logrado. Es posible que al fútbol de la selección nacional le hace falta añadirle una capa adicional —de calidad, de juego asociativo, o de organización— que solo puede dar un entrenador que se ha labrado su carrera en competiciones europeas de élite.
Queda por ver si José Peseiro podrá navegar el ambiente hostil y no exento de polémica que suele rodear a La Vinotinto y a la Federación Venezolana de Fútbol (FVF). El primer cortocircuito ya está puesto sobre la mesa: muchos medios de comunicación informan de que José Peseiro es un entrenador puesto por el gobierno de Nicolás Maduro y que la FVF prefería contratar a Jorge Sampaoli. Estas informaciones aseguran que fueron diferencias económicas las que hicieron que la incorporación de Peseiro se hiciera realidad.
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Peseiro tendrá el reto de implementar su idea de juego —fútbol ofensivo— en un período corto de tiempo (menos de dos meses) y llegar al primer partido de eliminatorias ante Colombia (entrenada por Carlos Queiroz, de quien fue ayudante en el Real Madrid) de la mejor manera posible.