Juan Pedro Lares: yo era la carnada para que mi papá se entregara al Sebin
Denunció que al momento de su detención, “los funcionarios del Sebin me patearon, me golpearon con una pistola, incluso me rociaron con gasolina y me decían que iban a prenderla si no les decía dónde estaba mi padre”
Juan Pedro Lares el joven venezolano que permaneció 10 meses secuestrado por los funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en su sede de El Helicoide, aseguró desde el exilio que en su caso él fue “la carnada para que mi papá se entregara”, recordemos que su padre es el exalcalde opositor del municipio Campo Elías del estado Mérida.
En una entrevista para Provea, Lares denunció las condiciones de reclusión “no eran nada fáciles. Dormíamos en el piso, nunca teníamos agua para bañarnos, la comida no llegaba”.
Señaló que luego de la toma pacífica que se produjo los primeros días de mayo por toda la población de presos políticos y comunes, la comida que le enviaban sus familiares y allegados más nunca llegó a sus manos.
Detalló que “no salíamos para nada de las celdas”, solo se podía comunicar con los otros presos a través de cartas y por las rejas que separaban su celda con la de presos políticos como Daniel Ceballos o Villca Fernández, sin embargo, resaltó el riesgo que corrían al realizar esta práctica, “si se daban cuenta los funcionarios te metías en problemas”.
Dijo que durante el tiempo que permaneció en El Helicoide no fue víctima de maltratos físicos, pero sí al momento de su detención, “los funcionarios del Sebin me patearon, me golpearon con una pistola, incluso me rociaron con gasolina y me decían que iban a prenderla si no les decía dónde estaba mi padre”.
“En la sede de ese organismo en Mérida me dijeron que si no decía dónde estaba mi padre me iban a poner la ´bolsa´, que es un método de tortura donde te tapan la cabeza con algún tipo de químico irritante como insecticida y te asfixies, también me amenazaron con electrocutarme”, relató Lares.
Recordemos que Juan Pedro Lares fue secuestrado el 30 de julio de 2017, cuando una comisión integrada por funcionarios del Sebin ingresó a su casa en Mérida buscando a su padre para llevárselo detenido, por presuntamente no poner fin a las protestas antigubernamentales; al no encontrarlo decidieron llevarse al joven.
Durante su tiempo de detención el ciudadano colombo-venezolano no fue presentando ni una sola vez ante un Tribunal. Finalmente el 1 de junio día de su liberación el joven tuvo que ser sacado por su madre en un carro de las instalaciones del Sebin.
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