La confusión y desinformación privó en el inicio de las mesas de dinero
Mientras la banca pública remitió a los clientes a sus sedes principales, la banca privada se limitó a recibir información sobre posturas
Con más imprecisiones que certezas, este 13 de mayo comenzó a operar a medias el nuevo sistema para la compra y venta de divisas a través de las mesas de dinero, un mecanismo que hasta ahora ha sido muy confuso por la escasa información que manejan los bancos públicos como privados, que serán los que manejen en lo sucesivo el mercado.
De acuerdo con la información manejada por los operadores, la confusión es lo que priva entre los operadores financieros tradicionales, cuyos voceros han remitido a los usuarios a las sedes principales de cada banco para lograr acceder al sistema. En las diferentes agencias bancarias aluden no disponer de información sobre cómo participar en el proceso.
Este ha sido el argumento preponderante en las oficinas de la banca pública (Venezuela, Tesoro, Bicentenario), mientras que en las agencias de bancos privados se argumenta varias cosas: desde que se necesita una carta que informe cuánto se va a vender o comprar y las cuentas en dólares para el depósito, hasta que buscar la información sobre el proceso en la página web de la institución. Otros aseguran que solo son algunas oficinas las autorizadas para operar y por ende redireccionan a los interesados hacia ellas, mientras que otros promotores aluden que deben esperar a que “baje la información” para poder ofrecerla al cliente.
En las casas de cambio la situación no es muy distinta, pues aun cuando al cierre de la jornada cambiaria (1:00 pm) señalaban que los clientes podían acceder al sistema, se limitaban a verificar la información del cliente para las posturas, pero sin remitir los datos al Banco Central de Venezuela (BCV) para procesar la transacción.
Según informó el portal Contrapunto, algunos bancos como Exterior, Provincial y Mercantil informaron que realizarán operaciones por montos que van de los 50 a los 500 dólares o euros diarios, mientras que Banesco fijó el tecno el 200 dólares o euros al día.
Aunque se suponía que la tasa aplicada sería el promedio del manejado por la banca, en este primer día terminó por imponerse el criterio sospechado: que sería la tasa Dicom la que serviría como base.
Sobre la confusa situación del mercado, el economista Asdrúbal Oliveros, director de la firma Econalítica, insistió en que los montos bajos van a ser un problema por el alto costo que repercute para los bancos, por lo que concluye que quienes realmente pueden aprovechar son las grandes empresas con transacciones superiores a los 10 mil dólares.
Explicó que otro obstáculo que ha impedido el despegue del sistema es que algunas instituciones financieras privadas mantienen problemas para realizar transacciones en divisas con sus bancos corresponsales extranjeros debido a las sanciones que mantiene Estados Unidos contra Venezuela, lo que les impide tramitar cualquier operación de empresas locales.
Asimismo, el economista indicó que de acuerdo a la nueva normativa los bancos privados quedaron autorizados para permitir a sus clientes realizar operaciones en divisas a través de internet, pero sostuvo que con los límites tan bajos de las tarjetas no hay posibilidades de hacer operaciones.
Con información de AFP y Unión Radio