La Rebelión de las Regiones: el robo del siglo XXI, por Eduardo López Sandoval
Esto no es un cuento, es en serio. Es una pequeña fracción de una obra de teatro.
El autor de la obra, a través del PRESENTADOR, en actos muy sencillos, casi que infantiles, nos dice:
Buenos (días, tardes o noches), queridos panas, pretendemos explicar a mis contertulios, muy entre nos, que el origen de la propiedad está en la cofia de la raíz del origen mismo de la especie humana.
La esencia de la evolución del hombre está, por una parte, en el bajar del árbol y caminar erguido sobre sus dos patas posteriores para dejar de ser mono. Además, le sumamos desde esta orilla izquierda del río Guárico, que el carácter de hacerse “propietario” estuvo también necesariamente aparejado con el hablar para, sencillamente, poder comunicar:
– ¡Pija padre que lo piso! ¡Esto es mío!, -o,
– En esta cueva no te metas porque es mía!
Para la evolución de la especie humana, fueron necesarios todos estos ingredientes, pero, además, el plato que saboreamos hoy estuvo sazonado con LA MORAL.
Más que la vigilancia de los machos dominantes que, nunca es suficiente en número para vigilarlos a todos. Además, nunca se hubiese resuelto el quién vigila a los vigilantes y la cadena de vigilantes de vigilantes es infinita…
Se requería entonces, que naciera LA MORAL en el grupo, incluso antes de bajar del árbol.
Respetar la propiedad porque así lo dicta LA MORAL es el creyón indispensable con que se dibujó el perfil de la persistencia de la especie humana en el planeta.
(Los diálogos de la obra se han obviado por cuestiones de espacio. Solo leeremos el diálogo del presentador y uno del diputado Luis Parra. ¿Diálogo? ¿Dije? Sí, así le dicen a estas imágenes los que hacen teatro.
Lo que está entre paréntesis no se oye en la presentación de la obra, es una guía que solo se usa para el montaje.
Acto uno. Una manada de monos baja de un árbol y empiezan a caminar. A cada paso un poco más erguidos sobre las dos patas. ¡Se van haciendo humanos!
Se alegran superlativamente al experimentar caminar sobre sus dos patas y al hablar después. ¡Se van haciendo MÁS humanos!
Se hace LA MORAL. Los humanos se hacen propietarios. ¡Se hizo la especie humana! ¡Urpia Dolores!
(Voz en OFF. Las escenas que describe el PRESENTADOR, las desarrollan los actores que pierden el pelo del cuerpo en la medida que van dejando de caminar en cuatro patas).
Acto dos: El humano que más se esfuerza, obtiene los mejores resultados de lo que cazó y recolectó. Realiza el trueque y adquiere una casa.
El oro y las piedras preciosas que adquirió las pesa e intercambia en un banco de la plaza. Nacen los Bancos. Se respeta la propiedad privada.
Acto tres: Se consolidan algunos inventos como el motor, se acumulan grandes fortunas en las ciudades industriales de Europa.
El crecimiento industrial no se corresponde con las malas condiciones en la que viven los trabajadores.
En este clima de inventos, uno de estos inventores inventó, -valga la cacofonía de invento-, la máquina que ha destruido la mayor cantidad y calidad de vida de los humanos en el mundo, más que todas las bombas que han estallado en el planeta juntas: inventó EL COMUNISMO.
(En la pantalla se grafica la cantidad de millones de muertos por el comunismo vs las guerras del mundo y el narrador las describe).
Acto cuatro: La mitad del mundo creyó en esta mentira del comunismo, que no es verdad en cuanto niega la naturaleza misma del humano, el ser propietario…
(En la pantalla, en el fondo, se proyecta un mapa del mundo con los países comunistas resaltados de rojo. Proporcionalmente al mapa, la mitad de los actores empiezan a cambiar a monos).
La mitad de los humanos empiezan a doblarse en su caminar y se hacen de nuevo peludos monos, pero las armas que tenían cuando humanos eran, las siguen teniendo y saben leer aún porque aparece un aviso en el árbol, que ocupa el jefe que dice:
PROHIBIDA LA PROPIEDAD PRIVADA.
Más abajo un grafiti dice PROHIBIDO VIVIR COMO HUMANOS.
El mono mayor grita: “…exprópiese- exprópiese- exprópiese- exprópiese- exprópiese- exprópiese…”.
(La imagen en pantalla corre con la voz del mono mayor desaforado y, cada vez que este grita exprópiese, pasa una empresa, exprópiese, pasa la otra… hasta que de súbito cambia la voz del expropiador. Ahora es la voz del presidente de una de las Asambleas Nacionales, -la que tiene las botas, no la que tiene los votos… Aparece en la pantalla, ahora, la figura y el logo de la REBELIÓN DE LAS REGIONES. Y se oye el grito desaforado en la voz de Luis Parra: ¡Exprópiese! Y se sigue oyendo el eco: ¡Exprópiese! ¡Exprópiese! ¡Exprópiese!… En la pantalla, aparece cada vez más borrosa la inscripción LA REBELIÓN DE LAS REGIONES ES PROPIEDAD PRIVADA y con los números que acreditan su propiedad privada ante el mundo civilizado, depósito legal número: TA2017000081 ISBN: 9789801271024).
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La voz del expropiador de ahora la hace imitando la voz del expropiador primero, pero cada vez es menos convincente.
(En la pantalla vemos como se borran los números que acreditan la propiedad intelectual).
La bancada “opositora”, ahora oficialista, que ostenta el actual parlamento nacional está usando sin permiso esta propiedad intelectual y repiten su actuar delictual cada vez que respira su voz. No hay moral.
Uno de los propietarios, Luis “Balo” Farías, les ha escrito: “… Me dirijo a ustedes para informarles mi condición de autor y propietario intelectual de dos libros u obras literarias debidamente registrados, con los depósitos legales correspondientes, el primero de ellos titulado: CRISIS VENEZOLANA, CAUSAS Y SOLUCIONES ESTRUCTURALES, subtitulado: La rebelión de las regiones, y el segundo de ellos, titulado: LA REBELIÓN DE LAS REGIONES como actualización del primero y subtitulado, Crisis venezolana, causas y soluciones estructurales, ambos trabajos ampliamente promocionados nacional e internacionalmente en programas televisivos, radio, prensa, foros, charlas, conferencias, conversatorios, y diariamente en las redes sociales.”
Con su actitud el Gobierno le ha respondido:
– Ya nosotros dijimos, ¡EXPRÓPIESE! Y esto es una revolución bolivariana que no se arrepiente de lo que hace. No, no, no y no…
(Y los monos armados se adueñan del árbol que es Venezuela. En el mapa del mundo -al fondo- ahora resaltan solamente Corea del Norte, Cuba, Nicaragua y Venezuela de rojos…).
Pero los pueblos no se suicidan, la original y verdadera REBELIÓN DE LAS REGIONES está viva en algún lugar del corazón de Venezuela y es totalmente diferente a la falsa REBELIÓN DE LAS REGIONES: la oficialista.
La original lleva en sus entrañas el GRAN CAMBIO ESTRUCTURAL que aspiramos todos los venezolanos, por lo menos eso nos dicen los gochos que trajeron esta idea, -no tan gocha-, de LA REBELIÓN DE LAS REGIONES, hace unos cuantos años atrás, al corazón de Venezuela … al Estado GUÁRICO.